Una tercera científica que trabajó para GlaxoSmithKline (GSK) se declaró culpable de robar secretos comerciales para beneficiar a la farmacéutica Renopharma, empresa que cuenta con financiación del régimen chino, anunció este lunes el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Lucy Xi, de 44 años y exresidente de Malvern, Pensilvania, es la tercera persona que se declara culpable en la trama que implica a tres coacusados, Yu Xue, Tao Li y Yan Mei, con quien Lucy Xi está casada.
Según el Departamento de Justicia, Xi y sus coacusados crearon Renopharma en Nanjing, China, para investigar y desarrollar medicamentos contra el cáncer.
Sin embargo, los tres también trabajaban en las instalaciones del fabricante británico de medicamentos GlaxoSmithKline en Upper Merion, Pensilvania, donde desarrollaban productos biofarmacéuticos.
Los fiscales dijeron que los acusados utilizaron sus puestos en la empresa para robar secretos comerciales de su empleador en beneficio de Renopharma, empresa que recibía apoyo financiero y subvenciones del régimen chino.
La investigación y el desarrollo de estos productos suele costar más de USD 1000 millones, dijo la fiscal de Estados Unidos Jennifer Arbittier Williams, al anunciar la declaración de culpabilidad de Xi.
Según el Departamento de Justicia, en 2015 Xi envió a su marido un documento de GlaxoSmithKline (GSK) que contenía datos e información confidencial y de secreto comercial, incluido un resumen de la investigación de GSK de ese momento sobre anticuerpos monoclonales —proteínas fabricadas en laboratorio que imitan la capacidad del sistema inmunitario para combatir infecciones como los virus.
Xi supuestamente escribió en el correo electrónico: «Tienes que entenderlo muy bien. Te ayudará en tu futuro negocio [RENOPHARMA]».
El caso de Xi fue investigado por el FBI y está siendo procesado por los fiscales adjuntos de Estados Unidos Robert J. Livermore y J. Jeanette Kang.
«La acusada robó ilegalmente secretos comerciales para beneficiar a la empresa de su marido que estaba financiada por el gobierno chino», dijo la fiscal federal Williams. «El elemento vital de empresas como GSK es su propiedad intelectual y cuando roban esa propiedad y la transfieren a un país extranjero, amenaza miles de puestos de trabajo estadounidenses y pone en peligro los beneficios estratégicos aportados por la investigación y el desarrollo. Este comportamiento criminal debe ser perseguido con todo el rigor de la ley».
La doctora Yu Xue, su hermana Tian Xue y Tao Li se declararon culpables por su participación en la trama. Yan Mei, considerado como fugitivo por el gobierno de Estados Unidos, reside actualmente en China.
Yu Xue se declaró culpable de sus cargos de conspiración para robar secretos comerciales de GlaxoSmithKline en un tribunal de distrito de EE. UU. en Pensilvania, en agosto de 2018, según un comunicado de prensa de 2018 del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Tao Li se declaró culpable de cargos similares en septiembre de 2018.
La agente del FBI Jacqueline Maguire señaló que las empresas farmacéuticas como GlaxoSmithKline invierten una enorme cantidad de tiempo y dinero en el desarrollo de nuevos medicamentos y en su comercialización.
«Cuando los individuos roban valiosos secretos comerciales relacionados con uno de estos medicamentos, es una amenaza tanto para esa firma como para el resto. Al fin y al cabo, este tipo de innovaciones son las que impulsan la economía estadounidense», dijo Maguire, agente especial a cargo de la División de Filadelfia del FBI. «El FBI se ha comprometido a hacer cumplir las leyes que protegen a las empresas del país de este tipo de robos. No permitiremos que la investigación y el desarrollo estadounidenses sean afectados en beneficio de otras empresas o países”.
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