El Departamento del Tesoro de EE.UU. publicó una guía (pdf) el viernes por la noche informando a las empresas y los trabajadores cómo se aplicará a ellos el feriado fiscal propuesto por Trump.
Las compañías pueden dejar de retener los impuestos de los empleados a partir del 1 de septiembre, aunque los trabajadores tendrán que pagar impuestos a finales de abril de 2021. La nueva orientación, publicada junto con el IRS, se aplica solo a aquellos cuyos cheques de pago quincenales sean inferiores a 4000 dólares, el equivalente a 104,000 dólares al año.
La guía surge después de la acción ejecutiva del presidente Donald Trump del 8 de agosto, que dio a los trabajadores vacaciones fiscales. Dejó abierta la posibilidad de perdonar el impuesto diferido más adelante.
Pero solo el Congreso tiene el poder de eliminar los impuestos, así que todo lo que el presidente puede hacer es posponerlos hasta que se venzan.
Aunque la acción de Trump fue firmada semanas antes, la guía se retrasó mientras la Casa Blanca estudiaba si era posible prescindir de los impuestos de los trabajadores por completo en lugar de aplazarlos al año siguiente. La respuesta del Servicio de Impuestos Internos fue no, los empleados todavía deben pagar sus impuestos el próximo año.
Depende de las empresas si optan por el aplazamiento del impuesto sobre la nómina. Muchos esperaban la guía del Departamento del Tesoro, pero ya hay un grupo de líderes empresariales que han rechazado el plan.
«Muchos de nuestros miembros consideran que es injusto para los empleados tomar una decisión que les obligaría a pagar un gran impuesto el año que viene», escribieron la Cámara de Comercio de EE. UU. y más de 30 asociaciones comerciales en una carta del 18 de agosto al Congreso y al Departamento del Tesoro.
«También sería inviable implementar un sistema en el que los empleados tomen esta decisión», escribieron los grupos, añadiendo que muchos de sus miembros probablemente se negarán a aplazar el impuesto.
Si las compañías toman este enfoque y retienen los impuestos para los empleados a partir del miércoles, los impuestos serán aplazados hasta el 1 de enero. En ese momento, las empresas retendrán impuestos de los cheques de pago en cantidades mayores para que los empleados puedan pagar lo que deben.
No está claro qué pasa si los empleados dejan de trabajar en sus empresas antes de finales de abril, ya sea porque han renunciado o han sido despedidos. La guía del IRS dice que las compañías pueden «hacer arreglos para cobrar el total de los impuestos aplicables al empleado».
Con información de CNN Wire.
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