Una doctora de Texas que fue suspendida del hospital Metodista de Houston la semana pasada después de que la acusaran de difundir «desinformación peligrosa» sobre el COVID-19 ha renunciado.
La Dra. Mary Bowden, otorrinolaringóloga, escribió en Twitter el martes que se había separado del hospital, al mismo tiempo que agradecía a sus seguidores por su apoyo.
«¡Me he liberado del Metodista y aprecio mucho el montón de apoyo que he recibido! Gracias sinceras a todos los que me han enviado sus amables palabras», escribió.
En su carta de renuncia al hospital, que fue compartida en Twitter, Bowden afirmó que ha «tratado a más de 2000 pacientes con COVID-19, incluyendo muchos con comorbilidades, y que ninguno de estos pacientes requirió hospitalización».
«A lo largo de esta pandemia, no ha habido ningún tratamiento aprobado por la FDA para el COVID. Por lo tanto, he hecho lo mejor que he podido para atender a mis pacientes y salvar vidas en ausencia de un claro consenso científico», escribió Bowden.
«Estoy orgullosa de mi trayectoria como médica en estas difíciles circunstancias. No culpo a ningún médico por ejercer su mejor criterio médico. Pero creo que si más médicos se hubieran centrado en el tratamiento temprano, se podrían haber evitado muchas muertes y hospitalizaciones relacionadas con el COVID».
La doctora señaló que no es antivacunas, pero sí se opone a las órdenes de vacunación, y añadió que «ninguna de las vacunas actuales es eficaz».
Bowden escribió que ha decidido «separarse» del hospital después de que la acusaran de difundir «desinformación peligrosa», una afirmación que, según ella, es «falsa y difamatoria».
«No difundo desinformación, y mis opiniones están respaldadas por la ciencia. Hay pruebas sustanciales de la eficacia de la ivermectina en el tratamiento del COVID-19 y no hay pruebas de efectos secundarios graves o mortales asociados a las dosis utilizadas para el tratamiento del COVID-19», escribió.
Bowden, que dirige su propia clínica privada BreatheMD, había compartido varios tuits en los que elogiaba el medicamento antiparasitario ivermectina.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de EE. UU. no han autorizado ni aprobado el uso de la ivermectina para prevenir o tratar el COVID-19 en seres humanos o animales y han desaconsejado el uso del medicamento para tratar el virus.
El viernes, un portavoz del Metodista de Houston dijo a la CNN que habían suspendido los privilegios de Bowden. El hospital también compartió una serie de mensajes en Twitter denunciando los comentarios de Bowden sobre el COVID-19 y sus tratamientos en las redes sociales.
«La Dra. Mary Bowden, que recientemente se unió al personal médico del Hospital Metodista de Houston, está utilizando sus cuentas en las redes sociales para expresar sus opiniones personales y políticas sobre la vacuna COVID-19 y sus tratamientos», escribió el hospital en Twitter el 13 de noviembre
«Estas opiniones, que son perjudiciales para la comunidad, no reflejan la evidencia médica fiable ni los valores del Metodista de Houston, donde hemos tratado a más de 25,000 pacientes hospitalizados con COVID-19, y donde todos nuestros empleados y médicos están vacunados para proteger a nuestros pacientes».
El hospital también dijo: «A pesar de lo que ella ha posteado, el Metodista de Houston no niega ni negará nunca la atención a un paciente basándose en su estado de vacunación. La Dra. Bowden, que nunca ha admitido a un paciente en el Hospital Metodista de Houston, está difundiendo desinformación peligrosa que no está basada en la ciencia».
«Además, la doctora Bowden ha dicho al Metodista de Houston que está vacunada, como se exige a todos los médicos que ejercen en el Metodista de Houston», añadió el hospital.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el Metodista de Houston para obtener más comentarios.
Bowden dará una conferencia de prensa para hablar del tratamiento para el COVID-19 y de su renuncia el miércoles a las 11 de la mañana.
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