UVALDE, Texas. El hombre que mató a 19 niños en una escuela primaria el 24 de mayo hizo tres publicaciones en Facebook antes de llegar a las instalaciones, dijo el miércoles el gobernador Greg Abbott.
Aproximadamente 30 minutos antes de que Salvador Ramos, de 18 años, ingresara a la escuela primaria Robb y abriera fuego, escribió en las redes sociales: “Le voy a disparar a mi abuela”.
Otra publicación, minutos después, “Le disparé a mi abuela”.
Una tercera publicación, unos 15 minutos antes de que comenzara la masacre, decía: “Voy a dispararle a una escuela primaria”.
Aparte de las publicaciones, “no hubo una advertencia significativa” del tiroteo masivo, dijo Abbott, un republicano, a los periodistas durante una sesión informativa.
Andy Stone, portavoz de la empresa matriz de Facebook, Meta, dijo en un comunicado que las publicaciones eran mensajes de texto privados uno a uno.
Los mensajes “fueron descubiertos después de que ocurriera la terrible tragedia”, dijo Stone, y agregó que la compañía está cooperando estrechamente con las fuerzas del orden público en su investigación en curso.
Las publicaciones fueron localizadas por el FBI, que está ayudando a las autoridades locales y estatales con la investigación, según funcionarios de Texas.
Una búsqueda en Internet no arrojó ningún antecedente penal, y las autoridades no han encontrado hasta ahora ningún indicio de incidentes delictivos anteriores.
Ramos había abandonado los estudios en el instituto de Uvalde. No está claro si asistió a la escuela primaria Robb.
Después de que Ramos le disparara a su abuela, de 66 años, en la casa donde vivía, su madre llamó a la policía. También corrió en busca de ayuda para su madre, quien fue trasladada en avión a un hospital en San Antonio donde está viva, pero en estado crítico.
Luego, Ramos tomó el auto de su abuela y condujo alrededor de 2.9 millas antes de chocar. Salió del vehículo con una mochila y uno de los rifles semiautomáticos que compró legalmente en una tienda local de artículos deportivos en marzo. Se trasladó al lado oeste del campus. Mientras se acercaba, un oficial de recursos escolares se enfrentó al hombre. No hubo intercambio de disparos y Ramos pudo llegar a la escuela.
Giró a la derecha, luego a la izquierda, antes de llegar a dos aulas contiguas y acceder a ellas. Abrió fuego.
Ramos había intentado entrar en al menos otra aula, pero siguió adelante tras encontrar una puerta cerrada con llave, dijo Joe Daniel, un residente de Uvalde que vive cerca de la escuela, a The Epoch Times. La hija de Daniel, de 8 años, estaba dentro de esa aula.
Chris Vasquez, maestra de una escuela privada cercana, dijo que habló con un padre cuyo hijo recibió un disparo durante el caos. El niño les dijo a sus padres que el tirador entró al salón de clases y dijo: “Está bien, buenas noches”.
Un equipo táctico de agentes del orden público, incluidos agentes SWAT de la Patrulla Fronteriza y un oficial de Uvalde, rompieron la puerta del salón de clases y mataron a Ramos.
Además del tirador y 19 niños, dos maestros fueron asesinados.
Otros individuos quedaron heridos.
El motivo sigue sin estar claro, dijeron las autoridades.
Los líderes de Texas enmarcaron en gran medida el problema como uno de salud mental, en contraposición a uno relacionado con el acceso a las armas de fuego.
Cualquier persona que realice un ataque de este tipo tiene problemas de salud mental, dijo Abbott. “Nosotros, como gobierno, debemos encontrar una manera de abordar ese desafío de salud mental y hacer algo al respecto”, dijo.
“Hay ‘leyes de armas reales’ en Nueva York. Hay ‘leyes de armas reales’ en Chicago. Hay ‘leyes de armas reales’ en California. Odio decir esto, pero hay más personas a las que les disparan cada fin de semana en Chicago que en las escuelas de Texas. Y tenemos que darnos cuenta de que la gente que puede pensar que se resolverá al aplicar leyes de armas más duras, pero: Chicago, y Los Ángeles, y Nueva York desmienten esa tesis», añadió después. «Nuestro trabajo es presentar soluciones reales que podamos aplicar”.
El presidente de la Cámara de Representantes de Texas, Dade Phelan, un republicano, dijo que la legislatura estatal, cuando se vuelva a reunir, discutirá la legislación para abordar los problemas de salud mental.
Aun así, Abbott dijo que las leyes que se aprobaron en 2019 y que estaban destinadas a prevenir los tiroteos en las escuelas serían examinadas de cerca para asegurarse de que no hubiera deficiencias en el lenguaje o en la implementación.
Nota del editor: Esta historia se ha actualizado con información de Meta.
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