Un hombre fue acusado en el Tribunal de Distrito de Seattle el 17 de junio por robar suministros médicos relacionados con el virus del PCCh del Centro Médico de Asuntos de Veteranos (VAMC) y por venderlos en eBay.
Gene Wamsley, de 41 años de Bonney Lake, Washington, fue acusado de robo de propiedad del gobierno por robar tres broncoscopios, cinco respiradores y una variedad de otros equipos de apoyo respiratorio, de acuerdo con un comunicado del Departamento de Justicia.
Él hizo su aparición en la denuncia penal en Seattle el miércoles.
La Fiscalía de los Estados Unidos, Distrito Oeste de Washington, dijo que Wamsley estaba empleado como terapeuta respiratorio en el VAMC hasta el 9 de junio, cuando fue puesto fuera de servicio.
“En este momento, el equipo de soporte respiratorio es crítico en la atención médica para quienes padecen infecciones con COVID-19. Robar y vender el equipo necesario para cuidar a nuestros veteranos es una traición escandalosa”, dijo el fiscal federal Brian T. Moran en el comunicado.
La investigación sobre el caso comenzó cuando el VAMC descubrió que faltaban dos broncoscopios en enero. Un tercer broncoscopio fue reportado como desaparecido en abril.
El personal del VAMC descubrió broncoscopios para la venta en eBay de alguien en Bonney Lake; en una investigación posterior descubrieron que Wamsley los vendió.
Investigaciones adicionales en los registros de Wamsley en eBay mostraron que vendió cinco respiradores en marzo y abril de 2020. El VAMC descubrió que tres respiradores habían desaparecido del hospital durante el mismo periodo.
Los administradores del VAMC confirmaron varios otros equipos faltantes de soporte respiratorio encontrados en los registros de Wamsley en eBay.
Los investigadores encontraron suministros médicos y registros de eBay de la casa de Wamsley el 9 de junio luego de que se emitiera una orden de registro contra él.
Wamsley podría enfrentar hasta diez años de prisión por robo de propiedad del gobierno.
Grupo de trabajo COVID-19 del FBI
A medida que ocurre la pandemia del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), también comenzó a surgir el riesgo de fraudes relacionados con el virus, por lo que el FBI estableció un Grupo de Trabajo COVID-19 compuesto por representantes de las 56 oficinas locales del FBI y 500 participantes del Departamento de Justicia.
El trabajo de este grupo es combatir a los delincuentes que operan durante la crisis pandémica.
«La pandemia COVID-19 solo ha servido para aumentar el número de esquemas de fraude de estímulo, atención médica, banco, ancianos y gobierno», dijo Calvin A. Shivers, subdirector de la División de Investigación Criminal en un comunicado ante el Comité Judicial del Senado el 9 de junio.
Shivers enumeró una variedad de fraudes, incluidos los esquemas de fraude de atención médica y dijo que el FBI está involucrado en varios esfuerzos para prevenir estos fraudes.
“Los legítimos profesionales médicos y científicos de todo Estados Unidos están trabajando arduamente para encontrar una cura, un tratamiento aprobado y una vacuna para la COVID-19. Desafortunadamente, al mismo tiempo los malos actores están vendiendo kits de prueba COVID-19 fraudulentos y tratamientos no aprobados a través de llamadas de telemercadeo, plataformas de redes sociales y visitas puerta a puerta”, dijo Shivers.
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