¿Cuántos de ustedes se han sentido abrumados recientemente por todo lo que tienen que hacer?
¿Cuántos de ustedes han sentido que algo que tienen que hacer, o todo lo que tienen que hacer, es una carga?
Muchos de nosotros sentimos que las tareas que hacemos en la vida son abrumadoras. Casi todos nosotros vemos las cosas de esta manera a veces. Parece que es algo conectado a nosotros.
Se deriva de cómo miramos el mundo y nuestra vida. Pero es cambiable. Comienza cambiando su perspectiva.
En lugar de ver el mundo como una carga, ¿podemos verlo como un regalo?
En lugar de ver el mundo como dificultad y lucha, ¿podemos verlo como una posibilidad y una oportunidad?
En lugar de pensar que tenemos mucho que hacer, ¿podemos ver la alegría en cada tarea y ver que un montón de tareas es una gran cantidad de posibilidades?
Sí, tenemos muchas cosas que hacer y sentimos que no tenemos suficiente tiempo para hacerlas todas. Pero todos tenemos la misma cantidad de tiempo, y todo lo que podemos hacer es una tarea a la vez. Podemos mejorar al elegir qué tareas hacer (priorizar), pero al final, nunca hay certeza de que estamos haciendo las tareas correctas.
Si bien podemos ampliar nuestras capacidades a través de la automatización, la delegación y la subcontratación, la experiencia nos dice que, incluso haciendo todo eso, todavía tenemos demasiadas tareas que hacer. El problema no desaparece con estos recursos.
La cantidad de tareas no es el problema, porque siempre tendremos muchas que hacer. El problema viene en parte de comprometerse demasiado, pero incluso si mejoramos en eso, a menudo todavía nos sentimos abrumados y agobiados.
La única solución real es un cambio de mentalidad: ver todo lo que tenemos que hacer como un regalo, como una posibilidad y oportunidad, como una abundancia de alegría. Necesitamos aceptar que simplemente no podemos hacer todo, y siempre habrá más cosas que hacer de las que podamos hacer.
Así que aquí hay una técnica para lidiar con el «tener demasiado que hacer»:
Cuando esté abrumado, agobiado o temeroso, haga una pausa y siéntalo. Déjese llevar por completo, vívalo, siéntalo por completo y ábrase a él. ¿Puede sentir curiosidad al respecto? ¿Puede encontrar una manera de amar el sentimiento?
Vea si puede ver las tareas frente a usted como un regalo. Elija hacer estas cosas porque quiere. Lo benefician a usted y a los demás. Hágalo con amor y agradezca el regalo que trae cada una.
Vea si puede ver la posibilidad y la oportunidad en cada una. ¿Qué se puede hacer con ellos? ¿Qué tan abiertos y vastos son con respecto a lo que usted cree que son?
¿Puede experimentar la abundancia de alegría en su lista de tareas? Si cada una es un alegre regalo, ¿no hay abundancia en su lista? Puede sumergirse en lo que tiene que hacer y aprovechar una oportunidad de alegría y crecimiento. Es su oportunidad de darle algo al mundo.
Los cambios de mentalidad no son algo que podamos cambiar como un interruptor. Necesitan ser practicados conscientemente, pero se abren nuevos mundos si lo haces.
Leo Babauta es autor de seis libros, escritor de «Zen Habits», un blog con más de 2 millones de suscriptores, y creador de varios programas en línea para ayudarlo a dominar sus hábitos. Visita ZenHabits.net
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