Al terminar abruptamente el levantamiento del grupo mercenario Wagner contra el Estado ruso, el exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie afirmó que la «debilidad» del presidente ruso Vladimir Putin es «evidente ahora dentro de su propio país».
Además, Christie afirmó que apoyar a Ucrania para que luche contra el ejército ruso podría ayudar a contener la ambición hegemónica de la China comunista.
«Creo que lo que esto puede hacer… es acercarnos a una resolución de esta batalla debido a la debilidad de Putin, que ahora es obvia dentro de su propio país», dijo Christie durante una entrevista en el programa «This Week» de la cadena ABC el 25 de junio.
«Creo que, en gran parte, por la forma en que ha llevado esta guerra».
Christie, que ha lanzado formalmente su segunda candidatura a la presidencia, reiteró que Estados Unidos debe continuar su apoyo a Ucrania y que el objetivo es repeler al ejército ruso.
«El apoyo de Estados Unidos, junto con el de nuestros aliados de la OTAN, a Ucrania, ha contribuido en gran medida a provocar lo que estamos viendo ahora en Rusia, la desventura de Putin», afirmó. «Y todos los pasos en falso que dieron la Administración Biden, la Administración Trump y la Administración Obama en este asunto han conducido a este momento».
«Creo que hay que observar esto con mucha atención, pero tenemos que seguir apoyando a Ucrania», dijo Christie. «Tenemos que darles las armas que necesitan para librar su batalla contra los rusos y repelerlos».
«Guerra indirecta con China»
Christie argumentó que respaldar a Ucrania para luchar contra el ejército ruso podría ayudar a contrarrestar la ambición hegemónica del Partido Comunista Chino (PCCh).
«Tenemos que asegurarnos de que estamos comprometidos porque, créeme, éste es el primer combate de la guerra indirecta con China. China está financiando esta guerra para Rusia comprando petróleo ruso», afirmó.
«Tenemos que asegurarnos de que seguimos comprometiéndonos de esta manera. No queremos un mundo dominado por la China comunista. Por tanto, ésta es una lucha que Estados Unidos debe librar.
«Al final de este sacrificio, creo absolutamente en el hecho de que Estados Unidos será más grande, más fuerte, más rico y más influyente en el mundo porque nos mantuvimos fieles a nuestros principios y apoyamos a nuestros amigos», añadió.
Christie ha utilizado su firme apoyo a la ayuda estadounidense a la defensa de Ucrania para diferenciarse de otros candidatos presidenciales republicanos, concretamente el expresidente Donald Trump y el gobernador de Florida Ron DeSantis.
Trump afirmó anteriormente que oponerse a Rusia en su actual guerra con Ucrania es más importante para los intereses estratégicos de Europa, diciendo: «Por eso Europa debería pagar mucho más que nosotros, o igual».
Trump dijo que, si fuera elegido, podría facilitar el fin del conflicto en «24 horas».
«Puede hacerse, y debe hacerse… ¡ahora!», declaró a Fox News en marzo.
En aquel momento, DeSantis dijo también que frenar el poder económico, cultural y militar del PCCh es un interés nacional estadounidense más vital que ayudar a Ucrania en su conflicto con Rusia.
El comentario de Christie se produjo mientras Beijing manifestaba su apoyo a Rusia tras el breve motín de Moscú.
En una declaración hecha pública a última hora del domingo, un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Beijing describió el levantamiento armado del fin de semana como «asuntos internos de Rusia».
El portavoz declaró que el PCCh apoya a Rusia para que «mantenga su estabilidad nacional y alcance el desarrollo y la prosperidad».
El breve comentario se produjo tras una reunión celebrada el domingo en Beijing entre el ministro chino de Asuntos Exteriores, Qin Gang, y el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Andrei Rudenko.
Rudenko también se reunió con el viceministro chino de Asuntos Exteriores, Ma Zhaoxu, durante el viaje no anunciado a Beijing, en el que ambas partes se comprometieron a «salvaguardar los intereses comunes» en la «compleja y grave» situación internacional, según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores chino.
El régimen chino, que ha afirmado repetidamente su asociación «sin límites» con Rusia a lo largo de la guerra de Ucrania, guardó silencio anteriormente mientras se desarrollaba la crisis en Rusia.
El domingo, el grupo mercenario Wagner detuvo su avance hacia Moscú y regresó a su base tras alcanzarse un acuerdo entre su líder, Yevgeny Prigozhin, y el Kremlin.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, declaró que la agitación mostraba «grietas» en el poder de Putin.
«Vemos que están surgiendo grietas», declaró Blinken a ABC el domingo. «Adónde van, si es que van a alguna parte, cuándo llegarán, es muy difícil de decir. No quiero especular».
Blinken añadió: «No creo que hayamos visto el acto final».
Con información de Caden Pearson.
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