Tres gobernadores ordenaron a sus tropas locales de la Guardia Nacional que regresen a sus respectivos estados seguido a las directrices de que miles de efectivos fueron «desterrados» para apostarse en el Capitolio.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, escribió esta mañana en Twitter que «dio instrucciones al general Norris para que ordene el regreso de la Guardia Nacional de Texas a nuestro estado».
I have instructed General Norris to order the return of the Texas National Guard to our state. @TexasGuard
— Greg Abbott (@GregAbbott_TX) January 22, 2021
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, también anunció en Twitter que ordenó el regreso de la Guardia Nacional desde D.C. a su estado.
«Anoche, ordené a nuestro Ayudante General que trajera a los soldados de la Guardia Nacional de Florida a casa desde la Región de la Capital Nacional», escribió.
Last night, I ordered our Adjutant General to bring Florida National Guard soldiers home from the National Capital Region.
— Ron DeSantis (@GovRonDeSantis) January 22, 2021
El gobernador de New Hampshire, Chris Sununu, también procedió a hacer lo mismo, mencionando que fueron tratados con condiciones «subestándar».
«He ordenado el regreso inmediato de toda la Guardia Nacional de New Hampshire desde Washington DC», escribió Sununu en Twitter. «Hicieron un trabajo sobresaliente sirviendo a la capital de nuestra nación en un momento de conflicto y deberían ser elogiados gentilmente, no sometidos a condiciones subestándar».
I’ve ordered the immediate return of all New Hampshire National Guard from Washington DC. They did an outstanding job serving our nation’s capital in a time of strife and should be graciously praised, not subject to substandard conditions. @NHNationalGuard
— Chris Sununu (@GovChrisSununu) January 22, 2021
DeSantis dijo en Fox&Friends que la asignación era una «misión a medias en este punto», y añadió que «no son los sirvientes de Nancy Pelosi», refiriéndose a los 600 guardias nacionales de Texas.
La Guardia Nacional emitió una declaración en el que afirmaba que coordinará el regreso de unos 15,000 efectivos durante un periodo de entre 5 y 10 días, y al final de la logística, unos 7000 efectivos de la Guardia Nacional permanecerán en D.C. hasta finales de mes.
El 21 de enero, circularon por Internet fotos que mostraban a los miles de soldados atrincherados en un estacionamiento. Más tarde se permitió a las tropas volver.
«Ayer, decenas de senadores y congresistas recorrieron nuestras filas haciéndose fotos, estrechando nuestras manos y agradeciendo nuestro servicio; 24 horas después ya no nos querían y nos desterraron a la esquina de un aparcamiento. Nos sentimos increíblemente traicionados», dijo un guardia a Politico.
Al parecer, se ordenó repentinamente a cinco mil soldados que desalojaran el Capitolio y se fueran a descansar a un aparcamiento cercano sin recepción de Internet, con una sola toma de corriente, un solo baño y con una temperatura que descendía hasta los 40 grados Farenheight por la noche.
La medida provocó críticas generalizadas de ambos partidos.
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