Cientos de personas en Michigan están siendo monitoreadas por la preocupación de que puedan tener el nuevo coronavirus, que causa el COVID-19.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Michigan confirmó el domingo que está monitoreando a 325 personas, informó ClickonDetroit.
Todas las personas bajo observación han estado en China continental en las últimas dos semanas o fueron pasajeros de un crucero con un caso confirmado del virus, dijeron los funcionarios de salud del estado. Esos funcionarios no dieron detalles sobre el crucero.
Hasta ahora, ninguno de los pacientes ha sido puesto en cuarentena. Pero Lynn Sutfin, de la agencia estatal de salud, dijo a Fox17 que a todos se les ha pedido que se pongan en cuarentena en casa.
Los pacientes no tienen un riesgo tan alto como para ser puestos en cuarentena en una instalación, añadió.
Hasta ahora, cinco personas en Michigan se han hecho la prueba del virus según los estándares de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU., pero todas las pruebas han resultado negativas. No se han confirmado casos de coronavirus en Michigan, pero se confirmó un caso cercano a Wisconsin y dos cercanos a Illinois.
Todos los pacientes en Michigan están siendo monitoreados por fiebre alta, tos u otros problemas respiratorios, que son características de COVID-19.
Se han confirmado 35 casos de COVID-19 en todo el territorio de Estados Unidos, y muchos de ellos estuvieron en el crucero en cuarentena Diamond Princess, que permaneció aislado cerca de Yokohama, Japón, durante dos semanas.
«Estamos haciendo un seguimiento de los casos resultantes de los esfuerzos de repatriación por separado porque no creemos que esas cifras representen con precisión la imagen de lo que está sucediendo en la comunidad de Estados Unidos en este momento», dijo a los periodistas el 21 de febrero la Dra. Nancy Messonnier, jefa del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias de los CDC.
Dieciocho de los casos recientes fueron pasajeros del crucero Diamond Princess y tres fueron repatriados previamente desde China.
Messonnier, al mismo tiempo, dijo que los funcionarios de salud de EE.UU. se están preparando para la probabilidad de que el nuevo coronavirus se convierta en una pandemia.
«No estamos viendo que haya propagación comunitaria aquí en Estados Unidos, todavía, pero es muy posible, incluso probable, que eventualmente pueda suceder», dijo. «Nuestro objetivo sigue siendo frenar la introducción del virus en EE.UU. Esto nos da más tiempo para preparar a las comunidades para más casos y posiblemente una propagación sostenida».
En franjas de China, donde se cree que se originó el virus, numerosas escuelas y empresas han sido cerradas durante semanas para contener el brote. Estados Unidos podrían verse obligados a hacer lo mismo, dijo Messonnier.
«Puede llegar el día en que tengamos que aplicar esas medidas en este país», advirtió.
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