El expresidente Donald Trump criticó al presidente Joe Biden y al Departamento de Justicia de Estados Unidos por perseguir «injustamente» a una mujer de 71 años apodada la «Abuela rezadora del 6 de enero», que entró en el Capitolio de EE. UU. durante unos 10 minutos el 6 de enero de 2021.
Rebecca Lavrenz fue declarada culpable el 4 de abril de cuatro delitos federales menores, entre ellos entrar y permanecer en un edificio de acceso restringido y conducta desordenada y perturbadora. Se enfrenta a una pena de hasta un año de prisión y 200,000 dólares de multa. Su sentencia está prevista para el 12 de agosto.
El presidente Trump acudió a las redes sociales el viernes para denunciar su condena.
«Rebecca Lavrez, también conocida como la ‘Abuela Rezadora del 6 de enero’, ha sido injustamente atacada por el corrupto Departamento de Justicia de Joe Biden, y ahora se enfrenta a hasta 1 AÑO de prisión por caminar pacíficamente alrededor del Capitolio y rezar por nuestra Fallida Nación el 6 de enero», escribió el Sr. Trump en un posteo en Truth Social.
El presidente Trump dijo que la Sra. Lavrez, una abuela de 71 años y propietaria de una pequeña empresa de Colorado, se ha convertido ahora en «¡¡¡Una de las REHENES DEL 6 DE ENERO de Joe Biden!!!».
El presidente Trump ha hecho del supuesto maltrato a los acusados del 6 de enero una piedra angular de su campaña de reelección, prometiendo, si es elegido, utilizar el poder ejecutivo para emitir indultos y liberar a los «rehenes» del 6 de enero poco después de asumir el cargo.
«El corrupto Joe Biden pasa más tiempo procesando a Patriotas como Rebecca, Y YO, que a Criminales Violentos, Matones, Asesinos e INMIGRANTES ILEGALES que están destruyendo nuestro País. ESTO ES A LO QUE NOS ENFRENTAMOS», añadió el presidente Trump en su posteo.
El presidente Biden criticó duramente las declaraciones del presidente Trump sobre los acusados del 6 de enero. A su vez, el fiscal general Merrick Garland prometió seguir adelante con más procesamientos del 6 de enero, ampliando aún más la redada del Departamento de Justicia para incluir a personas que ni siquiera estaban presentes en el Capitolio ese día.
«Como he dicho antes, el Departamento de Justicia hará que todos los autores del 6 de enero, a cualquier nivel, rindan cuentas ante la ley, tanto si estuvieron presentes ese día como si fueron penalmente responsables del asalto a nuestra democracia», dijo el Sr. Garland en un discurso pronunciado el 5 de enero.
Más de 1350 personas han sido acusadas de diversos delitos en relación con el asalto al Capitolio del 6 de enero, desde delitos menores como allanamiento de morada hasta delitos graves como conspiración sediciosa y agresión a agentes de policía.
De ellos, unos 800 han sido condenados, y casi dos tercios han pasado algún tiempo en prisión.
«Yo fui allí a rezar»
La Sra. Lavrenz, que en la biografía de su cuenta X se autodenomina «bisabuela rezadora del 6 de enero», fue declarada culpable por un jurado federal el 4 de abril por cuatro cargos penales.
Tras casi 26 horas de deliberaciones, un jurado la declaró culpable de entrar y permanecer en un edificio o recinto restringido, conducta desordenada y perturbadora en un edificio o recinto restringido, conducta desordenada en un edificio del Capitolio y desfilar, manifestarse o formar piquetes en un edificio del Capitolio.
En una aparición el 5 de abril, en el programa War Room de Steve Bannon, la Sra. Lavrenz dijo que solo pasó 10 minutos dentro del Capitolio y que viajó a Washington el 6 de enero para rezar por el futuro de Estados Unidos.
«Fui allí a rezar», dijo Lavrenz a Bannon. Ella explicó que estaba en Washington el 6 de enero de 2021 «porque amo a Dios, a mi país y a mi familia, y sabía que algo no estaba bien en esas elecciones de 2020».
La mujer fue capturada en un video de vigilancia entrando en el edificio del Capitolio a través de las puertas de la Rotonda Este, caminando alrededor del edificio y hablando brevemente con un oficial de policía antes de salir del edificio, según los documentos de acusación.
El Departamento de Justicia (DOJ) alegó en la denuncia contra ella que Lavrenz ofreció voluntariamente a los agentes del FBI las fotos suyas en el Capitolio el día de la irrupción. La denuncia dice que la residente de Falcon, Colorado, «admitió haber viajado a Washington, D.C. el 6 de enero de 2021 para asistir a la manifestación ‘Stop the Steal’ (Detengan el robo)en el centro comercial y ‘seguir a la multitud hasta el edificio del Capitolio de EE.UU.'».
En su declaración de hechos contra la Sra. Lavrenz, el DOJ dijo que la abuela de siete nietos entró en el edificio a pesar de ver barreras físicas «que indicaban que los terrenos del edificio del Capitolio de los Estados Unidos eran un área restringida».
El expediente también afirma que ella «observó a la gente entrar en enfrentamientos físicos con la policía» y que ella «vio a una mujer resultar herida en el intercambio». Las pruebas de vídeo confirman la declaración de la Sra. Lavrenz de que estuvo dentro del edificio solo 10 minutos, según los archivos judiciales.
Varios días antes del inicio de su juicio, la Sra. Lavrenz publicó un vídeo de sí misma en Internet mientras entraba en el recinto del Capitolio por primera vez desde el 6 de enero de 2021.
«Mi propio país me está tratando como a una criminal solo porque creo que me robaron mi legítimo presidente, y solo defender a mi país me convierte en una criminal», dijo en el video. «No está bien. Se siente tan raro estar aquí».
La Sra. Lavrenz, enfermera registrada jubilada, también es propietaria y regenta un bed and breakfast cerca de las Montañas Rocosas, en Falcon (Colorado).
Ella creó una página de crowdfunding GiveSendGo para ayudar a pagar sus facturas legales y hasta el sábado había recibido más de 82.000 dólares en donaciones.
Con la contribución de Alice Giordano
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
