NUEVA YORK —El expresidente Donald Trump tiene previsto comparecer este martes ante un tribunal de Nueva York para una audiencia de lectura de cargos en la que se espera que reciba cargos por delitos graves en relación con un presunto pago de dinero por silencio en 2016 a la actriz de entretenimiento para adultos Stormy Daniels.
Antes de su comparecencia ante el tribunal, se espera que Trump se someta a un procesamiento estándar en la oficina del fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, quien ha dirigido la investigación del expresidente. A Trump se le tomarán las huellas dactilares, se le hará una foto policial y se le leerán sus derechos.
La comparecencia está prevista en la Corte Suprema del condado de Nueva York a las 14.15 horas. El juez Juan Merchan presidirá la comparecencia de Trump y los procedimientos posteriores.
La comparecencia del martes dará inicio al primer procedimiento de enjuiciamiento penal de un expresidente, algo sin precedentes en la historia de Estados Unidos. Esto se produce días después de que un gran jurado de Nueva York votara a favor de acusar a Trump el 30 de marzo.
El martes por la mañana, cientos de empleados de los medios de comunicación y decenas de manifestantes se habían reunido frente al tribunal.
No está claro cómo Trump, que estará acompañado por el Servicio Secreto todo el tiempo, entrará en el tribunal, aunque los expertos no esperan que tenga que hacer un «exposición mediática» o una llegada pública por motivos de seguridad. Joseph Tacopina, uno de los abogados de Trump en el caso, ha dicho que el expresidente no será esposado.
No se espera que se haga pública la ficha policial de Trump dado que las leyes de Nueva York restringen su publicación a menos que se pueda establecer un propósito de aplicación de la ley. Alina Habba, otra abogada de Trump, dijo el lunes que se opondría a cualquier publicación o filtración de la ficha policial de Trump.
«Las fotos de ficha policial son para que la gente reconozca quién es. Él es la cara más reconocida del mundo, por no hablar del país en este momento, así que no hay necesidad de eso. No hay necesidad de teatro», dijo Habba a la CNN.
El expresidente voló a Nueva York el lunes por la tarde y llegó a la Torre Trump sobre las 16.25 horas, donde pasó la noche. Fuera de su casa de Manhattan, una pequeña multitud de simpatizantes se reunió para animar a Trump, agitando banderas estadounidenses y coreando «amamos a Trump».
Acusaciones
Aunque la acusación permanece sellada, los expertos legales anticipan que Trump sería acusado de falsificación de registros comerciales a nivel de delito grave. Este cargo requeriría que Bragg demostrara que Trump tenía la intención de falsificar registros comerciales en un intento de cometer o encubrir otro delito, en este caso, violaciones federales de financiamiento de campaña.
Se cree que el caso se basa en gran medida en el testimonio del exabogado de Trump Michael Cohen. Semanas antes de las elecciones presidenciales de 2015, Cohen pagó 130,000 dólares en concepto de silencio a Daniels para evitar que hiciera pública una presunta aventura que tuvo con Trump una década antes. Trump niega la aventura.
Cohen se declaró culpable de violar las leyes federales de financiación de campañas en 2018 al organizar los pagos a Daniels y a otra mujer que afirmó haber tenido una aventura con Trump. En su acuerdo de culpabilidad, Cohen afirmó haberlo hecho bajo la orden de Trump y que fue reembolsado por la Organización Trump a través de gastos legales de rutina, a pesar de sus afirmaciones anteriores en sentido contrario.
Trump ha negado cualquier irregularidad en el asunto, denunciando el caso como una «persecución política».
La comparecencia
Durante la comparecencia, el abogado defensor de Trump conocerá los cargos contra el expresidente. La audiencia no será televisada.
Tacopina, el abogado de Trump, dijo a Hannity, de Fox New, a última hora del lunes que espera presentar múltiples mociones de desestimación tras recibir la acusación.
«Habrá una gran cantidad de mociones que vamos a hacer, incluyendo, te lo digo de inmediato, una moción de desestimación basada en la acusación selectiva y la mala conducta del fiscal», dijo Tacopina, y agregó que el equipo de defensa considerará otras mociones después de ver la acusación, como un cambio de sede.
El juez también podría emitir una orden de silencio, impidiendo que Trump y sus abogados hablen públicamente sobre el caso. Las violaciones podrían significar que una persona sea declarada en desacato al tribunal. Aunque los expertos legales dicen que no esperan tal orden dado su potencial para interferir en las elecciones presidenciales.
Se espera que Trump sea puesto en libertad tras la comparecencia, dado que las leyes de Nueva York prohíben a los fiscales solicitar la libertad bajo fianza en delitos graves no violentos.
A continuación, el expresidente se dirigirá a su casa en Mar-a-Lago, en Florida, donde está previsto que pronuncie un discurso horas después de la comparecencia, a las 20:15 ET.
Obstáculos legales
Según algunos expertos jurídicos, el caso de Bragg contra Trump se enfrenta a importantes obstáculos legales.
Alan Dershowitz, un académico legal que enseñó en Harvard durante 50 años, se mostró muy escéptico sobre el posible intento de Bragg de combinar leyes estatales y federales: un cargo de registros falsos y las leyes de financiación de campañas, respectivamente.
«Hay un estatuto federal de campaña, y hay un estatuto estatal de registros, y los dos no tienen nada que ver entre sí», dijo Dershowitz a The Epoch Times el 18 de marzo. «Pero para convertir el estatuto estatal en un delito grave, hay que tomar prestado un estatuto federal, lo que parece plantear verdaderos y serios interrogantes jurídicos».
Tras la noticia de la acusación, dijo que «en 60 años de práctica, este es el peor caso de abuso de la fiscalía que he visto nunca».
Antes de que un tribunal decida sobre el mérito de este caso, otra disputa a la que Bragg podría enfrentarse es la prescripción de la acusación que presentaría, dijo el abogado litigante John O’Connor a The Epoch Times.
El cargo de delito grave tiene un plazo de prescripción de cinco años según la ley de Nueva York y habría expirado en circunstancias normales, dado que el pago se realizó en 2016, o hace unos siete años. O’Connor dijo que Bragg podría intentar utilizar una disposición que dice que el reloj de la prescripción se detiene cuando «el acusado estuvo continuamente fuera» de Nueva York.
La cuestión aquí, por lo tanto, depende de la interpretación del tribunal de «continuamente», dijo O’Connor, teniendo en cuenta el hecho de que Trump vivió en Washington DC y Florida durante la mayor parte del tiempo desde el momento de la comisión del presunto delito.
A pesar de la atención prestada al caso, Dershowitz, O’Connor y Clark Neily, vicepresidente senior de estudios jurídicos del Instituto Cato, dijeron en marzo a The Epoch Times que el caso de Bragg tiene una base jurídica inestable.
«Cuando persigues a alguien que se presenta a las elecciones presidenciales, más vale que tengas un buen argumento, y éste ni siquiera se acerca», dijo Dershowitz.
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