El entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue informado el 6 de enero de 2021 de que a algunas personas no se les permitió entrar en una zona designada para su discurso porque llevaban objetos prohibidos, afirmó un agente del Servicio Secreto.
«En algún momento de ese día, el presidente preguntó sobre alguna variación de por qué a un grupo de personas —grupos de personas— no se les permitía entrar a través de los magnetómetros», testificó el agente.
Robert Engel, otro agente que estaba con el presidente Trump, le dijo al presidente «que era porque (…) tenían artículos prohibidos de algún tipo», declaró el agente.
Los artículos prohibidos, para el Servicio Secreto, incluyen aerosoles, munición, neveras, pistolas y palos. Los agentes controlaban a la gente en los magnetómetros, o detectores de metales.
El agente llevó y trajo al presidente Trump al lugar del discurso en la Elipse, y el Sr. Engel iba en el vehículo con ellos.
En cuanto a lo que dijo exactamente el Sr. Engel, «no recuerdo que fuera específico con lo que tenían, más allá de ‘artículos prohibidos'», declaró el agente. «En cuanto a sus palabras exactas, no lo recuerdo, pero fue una versión de, señor, mucha gente tiene cosas que no permitimos a través de los magnetómetros, por lo que se quedan fuera del perímetro y esencialmente, observan desde fuera».
El agente no recordaba cómo respondió el presidente Trump.
El agente hizo estas declaraciones ante el comité selecto de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, que investigó los sucesos del 6 de enero antes de disolverse a finales de 2022. The Epoch Times revisó la transcripción.
En otro testimonio, dado por Anthony Ornato, otro agente del Servicio Secreto en servicio el 6 de enero, el Sr. Ornato dijo que el presidente Trump vio a la multitud fuera de la zona de seguridad e indicó que quería que entraran. El Sr. Ornato indicó que el presidente Trump estaba enojado y «regañó» a los funcionarios por la situación.
Los funcionarios «le explicaron que las puertas estaban abiertas de par en par; la gente de fuera no quiere entrar. Ellos pueden ver y oír desde donde están, y no quieren ir a través de los magnetómetros», declaró el Sr. Ornato. Uno de los funcionarios indicó que la gente «tiene tiendas de campaña, tienen sillas, no pueden venir a través de los magnetómetros con esas cosas», agregó a continuación. «Así que no van a entrar, se van a quedar fuera para no perder sus pertenencias», dijo el funcionario.
El Sr. Engel también indicó que algunas personas tenían chalecos antibalas y cascos de ciclista.
El testimonio respalda parcialmente una afirmación hecha por Cassidy Hutchinson, que era ayudante del jefe de personal de la Casa Blanca en ese momento.
La Sra. Hutchinson declaró al panel en una audiencia pública que el presidente Trump pensó que el área designada no estaba lo suficientemente llena.
«Estaba enojado porque no dejábamos pasar a la gente con armas», dijo la Sra. Hutchinson. «Pero cuando estábamos en la tienda fuera del escenario, estaba en las inmediaciones de una conversación en la que escuché al presidente decir algo así como: ‘No me (…) importa que tengan armas. No están aquí para hacerme daño. Quítenles las armas. Dejen entrar a mi gente, ellos pueden marchar al Capitolio desde aquí».
Según el comité, el Servicio Secreto dijo a los legisladores, que de 28,000 personas que fueron revisadas, los agentes se incautaron de 30 armas blancas, 269 cuchillos o navajas y 29 pistolas paralizantes.
Un portavoz del presidente Trump no respondió a una solicitud de comentarios. Un abogado de la Sra. Hutchinson no devolvió una consulta. El Servicio Secreto no respondió a una solicitud de comentarios.
Otras partes del testimonio de la Sra. Hutchinson fueron rebatidas por el conductor y el Sr. Ornato, incluyendo su afirmación de que el presidente Trump trató de agarrar el volante del vehículo porque quería ir al Capitolio después de su discurso y el Servicio Secreto presentó objeciones.
«La historia era falsa y muy ridícula», dijo el presidente Trump en un podcast esta semana. Más tarde indicó que era «inventada».
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