El presidente Donald Trump está instando al Senado a aprobar rápidamente una medida que impediría que drogas sintéticas opioides ilícitas como el fentanilo sean transportadas desde China a Estados Unidos mediante el servicio de correos postal.
«Es escandaloso que la venenosa heroína sintética fentanilo fluya al Sistema Postal de EE. UU. desde China«, escribió en una publicación en Twitter el 20 de agosto.
El fentanilo es un opioide 50 a 100 veces más potente que la morfina, de acuerdo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). En 2016, alrededor de 19.400 personas murieron por sobredosis de opiáceos sintéticos, incluido el fentanilo, además de la metadona.
«Podemos, y debemos, ¡TERMINAR ESTO AHORA! El Senado debería aprobar la Ley STOP y DETENER firmemente a este veneno que mata a nuestros niños y destruye a nuestro país. ¡No más demoras!”, continuó escribiendo Trump.
En junio, la Cámara aprobó la Ley STOP, entre un aluvión de medidas integrales para combatir la crisis de los opiáceos; el Senado todavía tiene que decidir sobre este proyecto de ley.
Los comentarios del Presidente se producen en medio de versiones de que la administración pronto publicará un informe muy esperado, destinado a reformar el Servicio Postal de Estados Unidos.
La Ley STOP, introducida por primera vez en septiembre de 2016 por los senadores republicanos Rob Portman, de Ohio, Ron Johnson, de Wisconsin, y la entonces senadora Kelly Ayotte de New Hampshire, fortalece las reglas postales y requiere que el correo enviado a través de servicios postales extranjeros envíe los mismos datos electrónicos previos de los operadores privados como United Postal Service o FedEx.
La ley destaca que la mayoría de las drogas se están enviando desde lugares como China e India, generalmente por correo.
Los datos permitirían a la Aduana y a la Protección Fronteriza de Estados Unidos «apuntar mejor a posibles paquetes ilegales y evitar que estas drogas peligrosas terminen en manos de traficantes que quieran dañar a nuestras comunidades locales».
La legislación también incluye otra droga llamada carfentanilo, de la misma clase de droga que el fentanilo, solo que 100 veces más potente. El carfentanilo se ha utilizado como sedante para animales grandes y está prohibido en el campo de batalla, en virtud de la Convención sobre Armas Químicas.
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