El presidente electo, Donald Trump, nombró a Morgan Ortagus enviada presidencial especial adjunta para asuntos de Medio Oriente, aunque expresó algunas reservas.
Trump anunció el nombramiento el 3 de enero a través de su plataforma de redes sociales Truth. El presidente entrante indicó que Ortagus trabajará directamente bajo las órdenes de Steven Witkoff, a quien nombró en noviembre como enviado especial para Medio Oriente.
Ortagus ha trabajado en múltiples campañas políticas y puestos gubernamentales. Se unió a la primera administración presidencial de Trump como portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos de 2019 a 2021.
También se ha destacado como analista de seguridad nacional. Ha contribuido con comentarios políticos y de política exterior en la cadena Fox News durante varios años, y fundó la organización sin fines de lucro Polaris National Security.
Ortagus sirve actualmente como oficial de la Reserva Naval de Estados Unidos, un aspecto que Trump resaltó en su anuncio.
Trump espera que Ortagus «haya aprendido la lección»
Trump dijo estar «complacido de anunciar a Morgan Ortagus» para el puesto de política de Medio Oriente, pero señaló su polémica historia de desacuerdos.
Ortagus apoyó a Jeb Bush durante las primarias presidenciales republicanas de 2016, y expresó repetidamente sus dudas sobre la candidatura de Trump.
En una aparición en abril de 2016 en el canal Fox Business, Ortagus criticó la perspectiva de política exterior de Trump después de que este dijera que no quería que Estados Unidos fuera «el policía del mundo».
«Discrepo fundamentalmente con su enfoque aislacionista de la política exterior», dijo entonces Ortagus.
A pesar de sus desacuerdos pasados, Ortagus se incorporó a la administración Trump. Trump también respaldó su candidatura en 2022 al Congreso por el 5º Distrito de Tennessee, aunque posteriormente fue descalificada de las primarias.
En su anuncio del 3 de enero, Trump recordó su enemistad pasada y mostró cierta aprensión sobre el regreso de Ortagus para su segunda administración presidencial.
«Al principio, Morgan me confrontó durante tres años, pero espero que haya aprendido la lección», dijo. «Estas situaciones no suelen funcionar, pero tiene un fuerte apoyo republicano, y no lo hago por mí, lo hago por ellos».
Turbulencias en Medio Oriente
El presidente electo expresó su esperanza de que Ortagus pueda impulsar su política en Medio Oriente en un momento de múltiples conflictos y agitación política en la región.
«Veremos qué sucede. Esperamos que sea un apoyo para Steve, un gran líder y talento, mientras intentamos llevar calma y prosperidad a una región muy convulsa», dijo Trump.
El presidente entrante reconoció el papel de Ortagus en promover los Acuerdos de Abraham, su modelo para estabilizar las relaciones entre Israel y sus vecinos en la región. Gracias a estos acuerdos, Israel normalizó sus relaciones diplomáticas con Bahréin, Emiratos Árabes Unidos, Sudán y Marruecos en los últimos meses del primer mandato de Trump.
La administración Biden esperaba continuar con los Acuerdos de Abraham, incluyendo la normalización de relaciones entre Israel y Arabia Saudí, un actor influyente en la región.
Esos esfuerzos de normalización saudí-israelí se han debilitado debido a la actual guerra entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza. Durante el último año, el ministro de Asuntos Exteriores saudí, el príncipe Faisal bin Farhan, señaló que la normalización con Israel no avanzará hasta resolver el conflicto palestino-israelí, incluyendo la creación de un Estado palestino.
Tras el anuncio, Ortagus expresó en un comunicado sentirse honrada por la elección de Trump.
«Tener la oportunidad de representar nuevamente a mi país y a la administración Trump en un papel diplomático crucial es un sueño cumplido», dijo. «Lo más importante es que, a través del presidente Trump, llevemos paz y estabilidad a una región convulsa, y agradezco poder contribuir en este esfuerzo».
En una entrevista de diciembre de 2024 con Fox Business, Ortagus afirmó que el equilibrio de poder en Medio Oriente se ha inclinado a favor de Israel durante el último año, principalmente porque el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ignoró los llamados de la administración Biden a la moderación. En la misma entrevista, elogió la decisión de Trump de ordenar el ataque de enero de 2020 que eliminó al general iraní Qasem Soleimani y señaló que su regreso a la Casa Blanca envía una fuerte señal a toda la región.
«Debemos reconocer ampliamente la reelección del presidente Donald Trump», dijo. «Puedo asegurarles que todos los terroristas de la región recuerdan lo que hizo en 2020 con Qasem Soleimani».
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