Los abogados del expresidente Donald Trump pidieron a un juez que deseche dos cargos en su contra del caso sobre las elecciones de Georgia, argumentando que la fiscal de distrito del condado de Fulton, Fani Willis, se salió de su jurisdicción legal al presentarlos.
Los abogados de Trump, Steve Sadow y Jennifer Little, presentaron el miércoles documentos judiciales en los que piden al juez del condado de Fulton, Scott McAfee, que supervisa el caso, que desestime dos cargos contra el expresidente y los coacusados. La presentación quiere en particular que se desestimen los cargos de conspiración para presentar documentos falsos y de presentación de documentos falsos.
Esos cargos argumentaron los abogados, afectan a las elecciones estadounidenses a nivel federal, no estatal. Como resultado, esos cargos solo pueden ser procesados por funcionarios federales, haciendo que el caso de la Sra. Willis sea discutible, añadieron los abogados.
«La presunta conducta que el Estado está tratando de procesar en los cargos 15 y 27 se aborda en el estatuto federal de declaraciones falsas y, por tanto, la jurisdicción corresponde exclusivamente a una corte federal», dice la moción judicial. «Como tal, el estado carece de jurisdicción o autoridad para procesar al presidente Trump cuando el propósito claro de hacerlo es proteger la integridad de los asuntos federales».
Uno de los cargos se refiere a la presentación de documentos en una corte federal varias semanas después de las elecciones de 2020, incluido el documento que involucra una lista de electores republicanos que la oficina de la fiscal del distrito dijo que era falsa. El otro cargo se centra en una demanda que incluye lo que los fiscales dicen que son supuestas reclamaciones falsas de fraude electoral.
Los dos cargos «no pueden mantenerse porque el Estado de Georgia carece de autoridad para criminalizar una conducta en virtud de un estatuto estatal (…) cuando dicha conducta se dirige a un foro federal, aquí el poder judicial federal», dijeron también sus abogados.
El Sr. Sadow y la Sra. Little agregaron que «debido a que la conducta imputada en ambos cargos afecta real y directamente al poder judicial de Estados Unidos, contraviene la ley penal federal, no estatal», agregando que la Sra. Willis no debería poder procesar al expresidente.
«El uso de documentos falsos en la jurisdicción del poder judicial de Estados Unidos está tipificado como delito por una ley federal específica» que está «diseñada para proteger los intereses federales contra el uso de documentos supuestamente falsos en relación con el poder judicial de Estados Unidos», indican los documentos judiciales.
La oficina de la Sra. Willis aún no ha presentado una respuesta a la última solicitud del equipo legal de Trump.
En marzo, el juez McAfee dictaminó que seis de los cargos de la acusación debían ser desechados, pero permitió que varios otros cargos se mantuvieran. También dictaminó que los fiscales podrían intentar rehacer una imputación sobre los cargos que fueron desestimados. Esta fue la primera vez en cualquiera de los casos contra el presidente Trump que se retiraron cargos.
El juez dictaminó que las alegaciones presentadas por los fiscales carecían de detalles y añadió que había una falta «fatal» de información «relativa a un elemento jurídico esencial». El expresidente Trump había enfrentado originalmente 13 cargos, pero solo enfrenta 10 en el condado de Fulton.
El expresidente se declaró inocente en el caso, argumentando que el juicio es una forma de interferencia electoral diseñada para poner en peligro sus posibilidades de ganar las elecciones de 2024. El juez aún no ha fijado una fecha para el juicio, cuya fiscal que lo procesa, la Sra. Willis, fue acusada a principios de año de mantener una relación secreta con su exasesor especial en el caso Trump.
Esas acusaciones, sin embargo, hasta ahora no han dado lugar a la remoción de la Sra. Willis del caso. El juez McAfee dictaminó el mes pasado que puede permanecer como fiscal jefe en el caso, pero debía destituir al exfiscal especial, que renunció más tarde.
El mes pasado, los abogados del presidente Trump apelaron el fallo del juez McAfee y dijeron que se equivocó al no descalificar también a la Sra. Willis, argumentando que «proporcionar a la fiscal Willis la opción de simplemente destituir a Wade confunde la lógica y es contrario a la ley de Georgia».
El recurso añade que la desestimación del caso es «el remedio verdaderamente apropiado» porque el daño causado a los acusados y a sus derechos al debido proceso no puede deshacerse completamente ni siquiera descalificando a la fiscal del distrito y a su oficina. Pero su inhabilitación es «lo mínimo que debe hacerse para eliminar la mancha de su conducta legalmente impropia y claramente contraria a la ética del resto del caso», añadieron los abogados.
La Corte de apelaciones tiene 45 días para decidir si acepta el recurso. Tanto Willis como el juez McAfee declararon que seguirán adelante con el caso durante el proceso de apelación.
Días después de sobrevivir al intento de descalificación, la Sra. Willis dijo a CNN que su caso contra el expresidente Trump y los demás está en curso.
«Mientras eso ocurría, estábamos escribiendo escritos de respuesta, todavía estábamos haciendo el caso de la manera que tenía que hacerse. No siento que nos hayan frenado en absoluto. Creo que se está intentando frenar el tren, pero el tren sigue su curso», declaró la fiscal de distrito a fines de marzo.
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