WASHINGTON – Tres estadounidenses dieron sus primeros respiros de libertad cuando salieron de su avión en Maryland el jueves por la mañana temprano.
Los tres, que habían sido encarcelados en Corea del Norte, fueron recibidos por el presidente de Estados Unidos Donald Trump y la Primera Dama Melania Trump, en la pista de la Base Aérea Andrews. El vicepresidente Mike Pence y su esposa Karen Pence también estuvieron presentes.
En un ambiente de clima festivo, una multitud se reunió para presenciar el regreso a casa. Una enorme bandera estadounidense, sostenida por dos carros de bomberos con escaleras extendidas, creó el telón de fondo para una tribuna instalada en la pista.
«El mayor logro será desnuclearizar a toda la península [coreana]», dijo Trump después de reunirse con los hombres en el avión y desembarcar. «Apreciamos mucho que [Kim] les haya permitido salir antes de la reunión. Tenemos muchas posibilidades de hacer algo magnífico”.
«Creo que [Kim] hizo esto … porque quiere llevar a su país al mundo real«, dijo Trump. «Veremos que pasa. Estamos hablando de unas pocas semanas».
El secretario de Estado Mike Pompeo viajó junto con los tres hombres: Kim Dong-chul, Kim Sang-duk y Kim Hak-song.
Kim Dong-chul estuvo en prisión desde octubre de 2015. Kim Sang-duk y Kim Hak-song fueron arrestados en abril y mayo del año pasado, respectivamente.
Uno de los hombres dijo que volver a casa «es como un sueño… y estamos muy, muy contentos«.
Luego se le preguntó cómo fue tratado en Corea del Norte.
«Fuimos tratados de muchas maneras diferentes. A mí me tocó hacer mucho trabajo, pero cuando me enfermé, ellos me hicieron tratar».
Las familias de los repatriados no estaban en el aeropuerto, según la Casa Blanca.
Después de llegar y reunirse con el Presidente, los tres fueron llevados en autobús al Centro Médico Militar Nacional Walter Reed para una evaluación adicional y tratamiento médico. La Casa Blanca está enviando cualquier pregunta sobre su condición médica al Departamento de Estado.
El 9 de mayo Trump escribió en Twitter que la fecha y la hora habían sido fijadas para las conversaciones entre él y el líder norcoreano Kim Jong Un. Los detalles de la Cumbre, dijo que los revelará en los próximos días, y que no tendrá lugar en la zona desmilitarizada entre las dos Coreas.
La liberación y el regreso de los detenidos es otra gran concesión de Kim Jong Un. Antes de su próxima reunión con Trump, el líder comunista ya acordó en una Cumbre con Corea del Sur en abril, completar la desnuclearización y la paz entre los dos países.
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