El presidente Donald Trump reaccionó a las críticas del expresidente Barack Obama sobre la respuesta del gobierno al COVID-19, calificando a su predecesor «gravemente incompetente».
Después de regresar a la Casa Blanca desde Camp David el domingo, un periodista le preguntó a Trump qué pensaba de la aparente sugerencia de Obama durante un discurso virtual el sábado, de que muchos en el actual gobierno «ni siquiera están fingiendo estar a cargo».
El presidente comenzó diciendo que acababa de regresar de un «fin de semana de trabajo» y que «se están haciendo tremendos progresos en muchos frentes, incluyendo la cura de esta horrible plaga que ha asolado a nuestro país».
Presionado nuevamente por una respuesta, Trump declaró que no había escuchado el comentario de Obama, pero cuando se le preguntó por tercera vez, Trump respondió: «Mira, era un presidente incompetente, es todo lo que puedo decir. Totalmente incompetente».
El sábado, Obama comentó sobre el manejo de la pandemia por parte del gobierno de Trump, acusando a la administración del país de ser irresponsable y desorganizada.
«Más que nada, esta pandemia ha rasgado completamente, finalmente, la cortina de la idea de que muchas de las personas a cargo saben lo que están haciendo», dijo Obama el sábado en un discurso de inicio virtual de las universidades históricamente negras. «Muchos de ellos ni siquiera pretenden estar a cargo», agregó.
Aunque los demócratas han criticado repetidamente la respuesta de Trump al brote epidémico de COVID-19, la enfermedad causada por el virus del Partido Comunista Chino (PCCh), Obama rara vez ha salido a hablar en público. Sin embargo, a principios de este mes, varios medios de comunicación informaron que Obama habría dicho en una llamada privada a sus partidarios que la respuesta del gobierno de Trump a la pandemia ha sido «un absoluto desastre caótico».
«Hacer lo que se siente bien, lo que es conveniente, lo que es fácil, así es como piensan los niños pequeños. Desafortunadamente, muchos de los llamados adultos, incluyendo algunos con títulos elegantes y trabajos importantes, todavía piensan de esa manera, por lo que las cosas están tan jodidas», dijo Obama el sábado. «Espero que en vez de eso, ustedes decidan basarse en valores que perduren, como la honestidad, el trabajo duro, la responsabilidad, la justicia, la generosidad, el respeto por los demás».
El líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), dijo la semana pasada en una grabación telefónica de una entrevista junto a la asesora principal de la campaña de reelección de Trump 2020, Lara Trump, que Obama debería haber «mantenido la boca cerrada» en lugar de criticar a Trump por los esfuerzos de respuesta de la administración al COVID-19. McConnell llamó a la intervención del expresidente «sin clase».
Karl Rove, un estratega republicano y subjefe de gabinete durante el gobierno de George W. Bush, dijo a Fox & Friends el domingo que, los comentarios de Obama el sábado equivalían a un «tiroteo político».
«Es tan indecoroso para un expresidente tomar la ceremonia de inauguración virtual de una serie de colegios y universidades históricamente negras y convertirla en un tiroteo político», dijo Rove a Fox News.
«Este es un momento en el que estos jóvenes graduados, que podrían haber sido inspirados a una vida de servicio, reconocer que la vida va a traer desafíos y cómo manejamos los desafíos va a demostrar nuestro carácter. Hay muchos mensajes positivos que el expresidente podría haber entregado», dijo Rove, acusando al expresidente de calumnias.
«Ha calumniado, ya sabes, no solo al presidente, que es su objetivo político, y el lo dejó claro hace una semana que iba a ir a por él», dijo Rove, interpretando la intención de la llamada telefónica filtrada de Obama, «pero está dando una bofetada al vicepresidente, que ha hecho un trabajo extraordinariamente eficaz como jefe del grupo de trabajo del coronavirus, el Dr. Fauci, la Dra. Birx, el secretario Azar, el director Collin, todo el ejército que puso ese hospital en Javits Center, la Marina que envió sus barcos a Los Ángeles y Nueva York, todas estas personas a cargo para responder a esto, ahora finalmente dice que no saben lo que están haciendo».
Las muertes en Estados Unidos debido a la pandemia se acercan a las 90,000, según un recuento de Johns Hopkins, mientras que el número de infecciones supera los 1,4 millones.
Durante una entrevista el domingo en el programa ‘Estado de la Unión’ de CNN, el secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, defendió la respuesta al brote epidémico de parte del gobierno, destacando que Estados Unidos ha realizado 10 millones de tests del virus en los últimos meses.
«Gracias a los históricos esfuerzos de la respuesta del presidente aquí y al trabajo de colaboración de los gobernadores y heroicos trabajadores de la salud en primera línea, estamos en posición de reabrir», dijo Azar.
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