Un panel de tres jueces está listo para escuchar la apelación del expresidente Donald Trump, a una decisión de una corte inferior que rechazó las afirmaciones de que algunas de sus acciones del 6 de enero de 2021 estaban protegidas por la inmunidad presidencial.
La audiencia programada para el 9 de enero, es la segunda apelación importante de la acusación del Departamento de Justicia (DOJ) contra el presidente Trump en D.C. El expresidente estará presente en la audiencia.
El 8 de enero, el expresidente Trump confirmó que asistiría. “Por supuesto, como presidente de Estados Unidos y comandante en jefe, tenía derecho a la inmunidad. No estaba haciendo campaña, las elecciones ya habían terminado hace mucho”, dijo el Sr. Trump.
“Yo estaba buscando fraude electoral y encontrándolo, lo cual es mi obligación de hacer, y de lo contrario, dirigía [sic] nuestro país”.
La jueza de distrito de DC, Tanya Chutkan, a quien el presidente Trump ha acusado de parcialidad, dictaminó en diciembre que no era inmune al procesamiento. “Los cuatro años de servicio del acusado como Comandante en Jefe no le otorgaron el derecho divino de los reyes a evadir la responsabilidad penal que rige a sus conciudadanos”, escribió la jueza en su sentencia.
El expresidente Trump apeló esa decisión ante la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito de D.C., mientras que el fiscal especial Jack Smith buscó la intervención de la Corte Suprema de los Estados Unidos para acelerar la apelación. Los jueces finalmente rechazaron la solicitud del Sr. Smith, dejando el asunto en manos de la corte de apelaciones y manteniendo una suspensión en los procedimientos de la corte de distrito.
No está claro cuándo emitirá una decisión la Corte de apelaciones, pero sus deliberaciones y una posible apelación adicional ante la Corte Suprema de Estados Unidos podrían retrasar la fecha prevista para el juicio del 4 de marzo. Si los jueces fallan a favor del presidente Trump, socavaría el caso del Departamento de Justicia en su contra.
Independientemente del resultado, es probable que el Departamento de Justicia o el presidente Trump apelen la decisión ante la Corte Suprema de Estados Unidos. A la vez la Corte Suprema está revisando el fallo de una corte de Colorado que le descalificó al expresidente para aparecer en la boleta electoral del estado, porque supuestamente participó en una insurrección, según se describe en la Sección Tres de la Decimocuarta Enmienda.
Los argumentos
Gran parte de los desafíos legales actuales del presidente Trump se centran en su respuesta a las elecciones presidenciales de 2020 y, en particular, su conducta el 6 de enero de 2021. El debate sobre la inmunidad presidencial es informativo, ya que podría generar opiniones judiciales sobre cuánto protegieron la ley las actividades de Trump en ese día.
La Corte de apelaciones ya dictaminó que el presidente Trump no es inmune a toda responsabilidad civil y permitió que agentes de policía del Capitolio de Estados Unidos presentaran una demanda contra él. La Corte Suprema sostuvo anteriormente en Nixon vs. Fitzgerald que los presidentes tenían inmunidad de responsabilidad civil por conductas que caen dentro de los deberes oficiales de su cargo.
El Departamento de Justicia, que presenta cargos penales, sostuvo que el presidente malinterpretó el concepto de inmunidad presidencial. “El acusado, un expresidente, no disfruta de inmunidad de procesamiento federal por los delitos imputados en este caso”, dice uno de los documentos del fiscal especial.
El presidente Trump ha argumentado que, debido a que la Constitución confiere poder ejecutivo al presidente, su conducta no es revisable por las cortes de la misma manera que la conducta de otros funcionarios ejecutivos.
“Esa doctrina no es controvertida. Esta fue tratada como evidente y fundamental desde los albores de la República, y se deriva directamente de la cláusula de adquisición exclusiva del Artículo II”, afirma una presentación judicial en nombre del presidente Trump. “En 1803, el presidente de la Corte Suprema Marshall lo respaldó y escribió en Marbury vs. Madison que los actos oficiales de un presidente ‘nunca podrán ser examinados por las cortes’”.
Los abogados del presidente Trump también argumentaron que el procesamiento del Departamento de Justicia viola la protección de la Constitución contra la doble incriminación porque el Senado de los Estados Unidos ya lo había absuelto en respuesta a un artículo de impeachment relacionado con el 6 de enero.
La semana pasada, el abogado de Trump, John Lauro, presentó una moción pidiendo a la jueza Chutkan que sancione al Sr. Smith y su equipo por intentar proporcionar evidencias en el proceso probatorio mientras el juicio está en pausa. La jueza, escribió, debería declarar en desacato al equipo del fiscal especial.
Se han presentado varios escritos amicus curiae, incluido uno del grupo American Oversight, que sostienen que la corte de apelaciones carece de competencia para revisar la denegación de inmunidad de parte de la jueza Chutkan.
Otro de exfuncionarios del gobierno, incluido el exfiscal especial del presidente Trump, Ty Cobb, argumentó que el reclamo de inmunidad “no encuentra respaldo en el texto de la Constitución ni en la práctica histórica”.
Otro documento, escrito por dos profesores de derecho y el exfiscal general Edwin Meese, afirma no respaldar la posición de ninguna de las partes en la apelación, pero argumenta que el Sr. Smith carecía de “autoridad para llevar a cabo el procesamiento subyacente”.
Sostiene que ni los estatutos ni la Constitución de Estados Unidos “autorizaron remotamente el nombramiento por parte del fiscal general de un ciudadano privado para recibir poderes extraordinarios de aplicación de la ley penal bajo el título de Abogado Especial”.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
