El presidente Donald Trump y el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, uno de los demócratas más destacados del país, se enfrentan por quién tiene el poder de reabrir el país, que se ha cerrado, en gran medida, debido a la pandemia de COVID-19.
Dos pactos anunciados por nueve gobernadores demócratas, incluido Cuomo, y el gobernador de Massachusetts, Charlie Baker, parecían estar dirigidos a la autoridad de Trump. Los gobernadores dijeron que harían planes sobre cuándo y cómo comenzar a reabrir sus estados, con poca mención del presidente.
Casi todos los estados de Estados Unidos están bloqueados en un intento por frenar la propagación del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como nuevo coronavirus. El virus causa COVID-19, una enfermedad que resulta fatal para un pequeño porcentaje de pacientes.
Cuomo es el líder del grupo de la costa este, que incluye Nueva Jersey, Connecticut y Pensilvania. Los gobernadores de Washington, Oregón y California formaron el segundo pacto.
Trump dijo a los periodistas, el lunes por la noche, que tiene la autoridad para decidir cuándo reabrir el país, ubicándose en una posición que parecía estar en desacuerdo con los gobernadores, aunque en otro momento dijo que los gobernadores pueden decidir cuándo reabrir sus estados.
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«Pronto finalizaremos pautas nuevas y muy importantes para dar a los gobernadores la información que necesitan para comenzar a abrir sus estados de manera segura», dijo, haciendo referencia a un nuevo comité que formó para explorar cuándo y cómo volver a abrir.
Cuando se le preguntó qué sucedería si algunos estados se negaran a reabrir, Trump sugirió que esos gobernadores serían destituidos.
«Van a abrir. Todos van a abrir. Quieren abrir. Tienen que abrir. Tienen que abrirse. Todos en esos estados, la gente quiere ir”, dijo el presidente. «Tenemos un gobierno local que con suerte hará un buen trabajo y, si no lo hacen, yo intervendría muy rápido».
La situación es diferente en algunos estados que han visto pocos casos del virus del PCCh, en comparación con algunos de los estados más afectados como Nueva York, Luisiana y Michigan, dijo Trump.
El vicepresidente Mike Pence respaldó al presidente y dijo a los periodistas: «A lo largo de la larga historia de este país, la autoridad del presidente de Estados Unidos durante las emergencias nacionales es indudablemente plenaria» o absoluta.
«Se puede mirar hacia atrás en tiempos de guerra y otras emergencias nacionales», dijo.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el gobierno federal está a cargo de prevenir la entrada de enfermedades en el país y está autorizado a tomar medidas para prevenir la propagación de enfermedades entre los estados. Mientras tanto, los estados «tienen funciones de poder policial para proteger la salud, la seguridad y el bienestar de las personas dentro de sus fronteras».
«Es posible que las autoridades sanitarias federales, estatales, locales y tribales tengan y utilicen al mismo tiempo una facultad de cuarentena legal separada, pero coexistente en determinados eventos. En caso de conflicto, la ley federal es superior», declaró la agencia.
Cuomo, que ha oscilado entre críticas y elogios a Trump, dijo el martes temprano que Trump no debería tratar de obligar a los estados a reabrir.
«La única forma en que esta situación empeora es si el presidente crea una crisis constitucional», dijo Cuomo durante una aparición en «Morning Joe» de MSNBC.
«Si me dice: ‘Lo declaro abierto’, y eso es un riesgo para la salud pública o es imprudente con el bienestar de la gente de mi estado, me opondré».
Si Cuomo y otros gobernadores se niegan a seguir una orden de Trump provocarían una situación terrible para el país, dijo el demócrata. El gobernador de Pensilvania, Tom Wolf, y el gobernador de Michigan, Gretchen Whitmer, también han rechazado las afirmaciones de Trump, mientras que el gobernador de California, Gavin Newsom, quien se ha referido repetidamente al estado como un «estado-nación», dijo que el pacto de la Costa Oeste se centrará en la reapertura basada sobre «salud, no en política».
Trump respondió a Cuomo en Twitter, alegando que el gobernador de Nueva York lo ha estado llamando todos los días «rogando por todo», incluidos artículos que deberían haber sido responsabilidad del estado, como nuevos hospitales y ventiladores.
“Lo hice todo por él, y por todos los demás, ¡y ahora parece querer Independencia! ¡Eso no sucederá! » Trump escribió.
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