Un enfoque funcional de la osteoporosis y la salud ósea

Reduzca el riesgo de desarrollar esta enfermedad con ideas y hábitos que pueden mantener sus huesos fuertes durante muchos años.

Por Ashley Turner, BCDHH
27 de junio de 2023 7:32 PM Actualizado: 27 de junio de 2023 7:33 PM

Varios factores pueden contribuir a la osteoporosis, y muchos de ellos están bajo su control. En lugar de centrarse en una deficiencia o problema aislado, es aconsejable tener en cuenta su estilo de vida en general para los factores de riesgo y tomar medidas para prevenir la osteoporosis.

Por ejemplo, la inflamación sistémica es una de las principales causas de la osteoporosis. Si existe una inflamación sistémica crónica en todo el organismo, se inhibe la remodelación ósea, lo que contribuye al desarrollo de la osteoporosis. La inflamación continua puede deberse a varios factores, desde la dieta hasta el estrés, pasando por las toxinas ambientales.

La osteoporosis suele presentarse en combinación con otra enfermedad inflamatoria, como la diabetes y la artritis reumatoide. En esencia, la inflamación crónica puede provocar una reacción en cadena de afecciones.

La osteoporosis deja los huesos débiles y propensos a las fracturas, con una baja densidad mineral ósea. Esta enfermedad puede desarrollarse con pocos síntomas evidentes y en la actualidad afecta a más de 10,2 millones de adultos mayores de 50 años en Estados Unidos.

Factores de riesgo de la osteoporosis

Edad

Las mujeres mayores de 50 años representan la gran mayoría de los diagnósticos de osteoporosis debido a los cambios hormonales que experimentan las mujeres a lo largo de las etapas de la menopausia. Sin embargo, los hombres y las mujeres más jóvenes también pueden experimentar una baja densidad ósea, más común en las lesiones de cadera.

Dieta estadounidense estándar

Consumir una dieta rica en hidratos de carbono simples, azúcares refinados y alimentos procesados provoca estrés oxidativo, desencadenando una respuesta del sistema inmunitario. Esto conduce a niveles elevados de cortisol, haciendo que los huesos pierdan mayores cantidades de calcio.

Estilo de vida sedentario

A medida que una persona envejece, experimentará de forma natural sarcopenia, una pérdida de masa muscular. Esta pérdida de masa muscular suele ser la culpable de las caídas y las lesiones óseas que se producen con la edad. Llevar un estilo de vida activo es imprescindible para luchar contra esta respuesta biológica natural. El sedentarismo provoca una mayor reducción de la densidad ósea y debilidad general. La actividad física estresa los huesos y los estimula para que se fortalezcan.

Estrés crónico

El estrés es el culpable de muchos problemas físicos, y la osteoporosis no es una excepción. El estrés puede causar una reducción de la cantidad de ácido estomacal producido, por lo que el cuerpo no es capaz de digerir y utilizar adecuadamente los nutrientes y minerales necesarios que requieren los huesos.

Además, el estrés provoca una inmunodepresión. Esto puede inhibir la capacidad del organismo de utilizar el calcio para luchar contra la inflamación. El cuerpo encontrará una manera de acceder al calcio si está bajo estrés, y si no puede encontrarlo en otra parte, extraerá el calcio de los huesos.

Otro efecto del estrés crónico son los niveles elevados de cortisol, la hormona del estrés. Esto hace que el cuerpo deposite el calcio en la orina en lugar de en los huesos, que es donde debería ir.

Intestino permeable

El intestino permeable suele ser un factor importante que contribuye a la inflamación crónica. Como se mencionó anteriormente, la inflamación sistémica puede conducir a la mala absorción, causando la resorción ósea como el cuerpo trata de encontrar los minerales vitales que necesita para prosperar.

Sensibilidad alimentaria, sensibilidad al gluten o enfermedad celíaca

Tanto si se trata de una sensibilidad alimentaria, una sensibilidad al gluten o una enfermedad celíaca (una enfermedad autoinmune), el consumo de alimentos a los que el cuerpo reacciona desencadenará la inflamación. El cuerpo ve estos alimentos como una amenaza y trata de combatirlos.

Exposición a toxinas ambientales

Otra de las principales causas de la inflamación sistémica es llevar una alta carga tóxica. La mayoría de las personas de todo el mundo entran en contacto con una gran variedad de toxinas cada día, ya sea por el plomo, el aluminio y otros metales pesados o por las sustancias químicas que alteran el sistema endocrino que se encuentran en productos de higiene convencionales como el jabón corporal, el champú y la crema de afeitar. Otras fuentes de toxinas son los plásticos, el alcohol, el tabaco, el moho y diversos pesticidas.

Cómo diagnosticar la osteoporosis

El método más habitual para evaluar la densidad mineral ósea es la absorciometría de rayos X de energía dual (DEXA). Este método utiliza bajas cantidades de radiación para medir la solidez de huesos como los de la cadera, la muñeca y la columna vertebral. Por lo general, esta prueba se recomienda a mujeres mayores de 65 años, aunque la DEXA suele realizarse a mujeres u hombres que presentan factores de riesgo de osteoporosis.

La DEXA evalúa los huesos y los puntúa comparándolos con los huesos sanos de una persona de 30 años. Estos resultados se dan en una puntuación t, considerándose «normal» todo lo que sea superior a -1.

Una persona que muestre signos tempranos de pérdida ósea tendrá normalmente una puntuación t entre -1 y -2,5, y las puntuaciones inferiores a -2,5 tienen más probabilidades de ser diagnosticadas de osteoporosis.

Sin embargo, hay algunas excepciones. Muchas mujeres tienen una densidad ósea más baja de forma natural y pueden tener una puntuación t de -3,5; para algunas mujeres, esto es absolutamente normal y no debería ser un motivo automático de preocupación ni un diagnóstico y tratamiento automáticos.

Si una persona recibe una puntuación de -4,0 o peor, se considera que tiene un riesgo significativo de fractura ósea. Si se obtiene una puntuación de este tipo, el principal objetivo del proveedor debe ser sacar al paciente del problema lo antes posible. A veces es necesaria la medicación, al tiempo que se hace hincapié en la nutrición y el estilo de vida.

Profundizar en la causa de la osteoporosis

Tener en cuenta otros marcadores inflamatorios puede ser de gran ayuda para identificar la causa principal de la osteoporosis.

Proteína C reactiva (PCR): La inflamación puede examinarse analizando los niveles de PCR, que produce el hígado. Si el organismo está inflamado, los resultados de la prueba mostrarán niveles elevados de PCR.

Ferritina: El análisis de los niveles de ferritina en sangre muestra la cantidad de hierro que el organismo es capaz de almacenar. Si los niveles de ferritina son elevados, puede indicar una forma de inflamación crónica.

Hormonas: Se trata de una estrategia de análisis habitual en las mujeres que atraviesan alguna de las fases de la menopausia. Como los niveles hormonales (sobre todo de progesterona y estrógeno) fluctúan durante estos años, los huesos de la mujer pueden verse directamente afectados, ya que la absorción y la masa ósea suelen verse directamente afectadas por los cambios en los niveles hormonales.

Microbios intestinales: Un análisis completo de las heces puede ser útil para identificar cualquier tipo de inflamación o disbiosis intestinal.

Carga total de toxinas: Esta prueba integral producirá una gran cantidad de información sobre una variedad de factores que afectan directamente a la salud ósea, tales como metales pesados, toxinas ambientales y micotoxinas. Esto puede ser particularmente útil en la toma de un plan de juego informado para comenzar a sanar el cuerpo.

El enfoque funcional

Vitamina D: La vitamina D ayuda al organismo a absorber el calcio de los alimentos. Es importante obtener cantidades adecuadas de vitamina D del sol cada día y de alimentos ricos en vitamina D como el salmón salvaje, el hígado de ternera alimentada con pasto, las sardinas y el aceite de hígado de bacalao.

Magnesio: El magnesio es necesario si se toman suplementos de vitamina D, ya que la convierte en una forma activa que el organismo puede utilizar.

Vitamina K2: La vitamina K2 activa la osteocalcina para que el calcio se fije en los huesos y se mantenga fuera de los vasos sanguíneos.

Ácido alfa-lipoico: El ácido alfa-lipoico puede ser eficaz para reducir el estrés oxidativo y la inflamación sistémica.

Berberina: La suplementación con berberina demostró ser eficaz para reducir los niveles de inflamación, ayudando a prevenir la pérdida ósea.

Alimentación rica en nutrientes: Evite los alimentos procesados, los azúcares y los hidratos de carbono simples que no nutren suficientemente el organismo. Además, evite cualquier sensibilidad alimentaria individual en un esfuerzo por reducir los niveles de inflamación. Coma alimentos integrales.

Grasas beneficiosas para la salud: La mantequilla alimentada con pasto, el ghee y el sebo son buenas fuentes de vitamina A, D y K2.

Ácidos grasos omega-3: Son esenciales y el cuerpo no puede producirlos, por lo que deben consumirse en la dieta. Los alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 son el salmón, la caballa, el arenque, las ostras, el aceite de hígado de bacalao y las sardinas. Los frutos secos y las semillas, incluidas las nueces, la linaza y las semillas de chía, también son buenas fuentes de ácidos grasos omega-3.

Proteínas: Consumir una dieta con altos niveles de proteínas es necesario para preservar la densidad mineral ósea.

Ejercicio: Mantenga el cuerpo en movimiento todos los días. Los ejercicios de resistencia demostraron ser especialmente útiles para la salud ósea. Entre estos ejercicios se incluyen saltar a la cuerda, el senderismo, el entrenamiento por intervalos de alta intensidad y el entrenamiento de fuerza. También son especialmente útiles los ejercicios que favorecen la flexibilidad, como el yoga y el pilates. Mantenerse activo y fuerte ayudará a preservar la salud ósea, la masa muscular, la estabilidad y el equilibrio, contribuyendo a reducir el riesgo de caídas y otros accidentes y lesiones comunes relacionados con la osteoporosis.

Gestión del estrés: Hay muchas formas de reducir los niveles de estrés, como los paseos diarios, los ejercicios de respiración, el baile, la jardinería y los diarios. Sea cual sea el método de control del estrés, es importante convertirlo en una rutina diaria para sacar al cuerpo de un estado sostenido de lucha o huida.

Reducir la carga tóxica: Aunque esto puede parecer abrumador, los cambios pequeños y constantes tienen un efecto significativo en la carga tóxica general del cuerpo. Evitar los alimentos procesados, los productos de limpieza fuertes, los cigarrillos y otros productos químicos comunes ayudará. Elimine los productos de higiene personal, las velas y los detergentes que contengan fragancias sintéticas. Consuma alimentos integrales de alta calidad elaborados y cultivados sin conservantes ni pesticidas.

Aunque la osteoporosis es una enfermedad que afecta a muchos adultos a medida que envejecen, hay opciones de estilo de vida que pueden ayudar a prevenir ésta y otras dolencias comunes relacionadas con la edad. Es imprescindible dar prioridad a un estilo de vida saludable. Consumir una dieta rica en nutrientes, llevar un estilo de vida activo y mantener bajos los niveles de estrés siempre que sea posible ayudarán a prevenir la aparición de la osteoporosis.


Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí


Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.