El principal republicano de la Cámara de Representantes pidió este lunes que se detenga lo que calificó de politización de las Fuerzas Armadas.
«Los militares en servicio criticaron recientemente a un ciudadano privado por sus derechos de la Primera Enmienda y hoy un legislador demócrata utilizó a los soldados en un truco político contra un miembro del Partido Republicano», escribió el representante Kevin McCarthy (R-Calif.) en una declaración en las redes sociales.
«Esto sienta un peligroso precedente. Debe detenerse ahora», añadió McCarthy etiquetando al secretario de Defensa, Lloyd Austin.
Los militares tienen prohibido involucrarse en la política mientras llevan uniforme, pero varios miembros criticaron recientemente a Tucker Carlson, de Fox News, después de que Carlson criticara a los militares por centrarse en incluir a las mujeres, argumentando que sería mejor que dedicara más tiempo a combatir a rivales como China.
A su vez el lunes, el representante Michael F.Q. San Nicolas (D- Guam) llevó a miembros uniformados de la Guardia Nacional a enfrentarse a la representante Marjorie Taylor Greene (R- Ga.) en su oficina, después de que Greene supuestamente sugiriera el mes pasado que Guam no era parte de Estados Unidos.
Greene no estaba en su despacho, pero San Nicolas pidió a un empleado que hablara con el personal de la Guardia. El empleado lo hizo.
La general de división Esther Aguigui, general de la Guardia Nacional de Guam, dijo a The Epoch Times en una declaración enviada por correo electrónico que «apreciamos los esfuerzos del congresista San Nicolas para representar nuestra cultura de Inafa’ Maolek, o traer la armonía, practicada aquí en Guam».
«También agradecemos a la congresista Greene que, en última instancia, ayude a crear conciencia a los guameños como ciudadanos de Estados Unidos y a nuestra rica tradición de servicio y sacrificio a nuestra nación. Como entidad no partidista, la Guardia Nacional de Guam está aquí para continuar este legado de apoyo y defensa de la Constitución de Estados Unidos y de las libertades que proporciona. Seguiremos estando siempre listos y siempre ahí, para servir a nuestra gran nación y contribuir a un Guam justo, próspero, compasivo y seguro», añadió.
El Pentágono no quiso responder directamente a McCarthy. El inspector general del Departamento de Defensa se negó a decir si estaba investigando alguna de las dos situaciones.
Greene dijo por correo electrónico que «es hora de que nuestros grandes hombres y mujeres de la Guardia Nacional vuelvan a casa, desde Washington DC, y estén con sus familias».
«Los demócratas tienen que dejar de utilizarlos como teatro político y drama en el Capitolio. Debería darles vergüenza a los demócratas por faltar al respeto a nuestros militares», añadió.
La oficina de San Nicolas no devolvió una solicitud de información.
Otros miembros del Congreso también cuestionaron las recientes acciones de los militares, las que incluyen la emisión de un comunicado de prensa que, según los críticos, distorsionó los comentarios de Carlson.
El Pentágono alegó que Carlson «utilizó su programa para denigrar las contribuciones de las mujeres en el ejército y para decir que el ejército chino está alcanzando al estadounidense porque no permite que las mujeres sirvan en el porcentaje que lo hace Estados Unidos».
Durante un programa reciente, Carlson señaló que el presidente Joe Biden habló de diseñar trajes de vuelo militares y de flexibilizar las restricciones de peinado en un intento de que las mujeres se sientan seguras y respetadas en el ejército.
«Es una burla al ejército de Estados Unidos. Mientras el ejército de China se vuelve más masculino, ya que está montando la mayor armada del mundo, nuestro ejército tiene que volverse, como dice Joe Biden, más femenino, sea lo que sea lo que signifique femenino ya que los hombres y las mujeres ya no existen. La conclusión es que esto está fuera de control, y el Pentágono le sigue la corriente», dijo Carlson.
El secretario de prensa del Pentágono, un alto funcionario de la Fuerza Espacial y varios otros militares lanzaron sus ataques en respuesta. A través del portavoz, Austin también expresó su desprecio por los comentarios de Carlson.
El senador Ted Cruz (R-Texas) dijo que solicitó una reunión con el jefe del Cuerpo de Marines después de que los marines se unieran a los ataques. Ellos dijeron a un usuario de las redes sociales que «vuelva cuando haya servido y esté embarazado», utilizando además un peyorativo contra Carlson.
El Cuerpo de Marines borró posteriormente los tuits.
En una carta, Cruz dijo a Austin que está «profundamente preocupado» por la situación y acusó al Pentágono de movilizar «ataques sistemáticos y públicos» contra Carlson.
«Al igual que con toda la correspondencia del Congreso, el secretario responderá directamente al autor de la carta según corresponda», dijo un portavoz del Pentágono a The Epoch Times por correo electrónico.
El Senado tuvo que aprobar una exención para que Austin, un general retirado, ocupara el cargo de secretario de Defensa. Durante las audiencias de confirmación, dijo a los senadores que entendía las preocupaciones que tenían y que «la seguridad de nuestra democracia exige un control civil competente de nuestras fuerzas armadas».
«Si me confirman, puedo asegurarles que el Pentágono, bajo mi dirección, respetará sus responsabilidades de supervisión. Seremos comunicativos y transparentes», añadió.
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