La plataforma conservadora de medios de comunicación The Daily Wire, con sede en Nashville, está haciendo su propia adaptación cinematográfica de «Blancanieves», el cuento de hadas de los hermanos Grimm, en un reproche al próximo remake de Disney de la película clásica de 1937, «Blancanieves y los siete enanitos».
La adaptación de The Daily Wire, «Blancanieves y la Reina Malvada», se estrenará en su recién lanzada plataforma de streaming infantil, Bentkey, en 2024.
Blancanieves será interpretada por Brett Cooper, que presenta » La sección de comentarios» en The Daily Wire.
Jeremy Boreing, cofundador de The Daily Wire con el comentarista político Ben Shapiro, anunció sus razones para crear Bentkey y la nueva película, afirmando que Disney se ha degradado cada vez más al promover contenidos de extrema izquierda y progresistas para niños.
«Ha pasado solo un año desde que Disney, la compañía de entretenimiento más poderosa del mundo, fue sorprendida diciendo la parte silenciosa en voz alta, a saber, que estaban utilizando su marca -una marca que los padres habían confiado a sus hijos durante generaciones- para adoctrinar a esos niños en el culto LGBTQIA», dijo Boreing en el anuncio.
Boreing se refería al vídeo filtrado publicado por Christopher Rufo, del Manhattan Institute, en el que aparecía una ejecutiva de Disney -que dijo tener un hijo transexual y otro pansexual- hablando de cómo planeaba introducir más temas LGBT en el contenido de Disney.
«Y no es solo la homosexualidad lo que Disney está promoviendo», dijo Boreing. «En el programa ‘La familia orgullosa’, Disney agita la división racial con canciones como ‘Los esclavos construyeron este país’, donde los niños rapean sobre descendientes de esclavos que ganan indemnizaciones por cada minuto que pasan sumergidos en ‘el prejuicio sistemático, el racismo y la supremacía blanca'».
Calificó este cambio de enorme pérdida para quienes «creen en la realidad básica».
«Disney controla la mayor biblioteca de contenidos jamás creada», dijo. «Su alcance cultural, sobre todo entre los niños, supera todo lo que ha existido jamás».
Un experimento social
El 16 de octubre, en el centenario de la fundación de Walt Disney, Boreing presentó el lanzamiento de Bentkey, una plataforma de streaming con contenidos para niños que no tratan de política, sino de «infancia, asombro y aventura».
«Trata de valores y de todas las cosas sobre las que luego se construye la política», dijo.
Disney ha empezado a participar en un experimento social que se ha hecho con los niños, dijo en una entrevista con Jordan Peterson, adoctrinándoles con contenidos políticos que les están privando de su infancia.
«Los estamos utilizando como experimentos sociales para ver si es posible inculcarles una serie de valores casi antivalores», dijo. «Digo antivalores porque no son nada que se hubiera considerado históricamente como valores y se oponen en muchos sentidos a los valores sobre los que se ha construido hasta ahora la civilización».
Los niños merecen una infancia
Boreing abordó la polémica en torno al remake de «Blancanieves» de Disney, actualmente en producción.
Rachel Zegler, la actriz que interpreta a Blancanieves en el remake de Disney, dijo que la película tendrá «un toque moderno» porque Blancanieves no será salvada por el príncipe ni soñará con el amor verdadero, sino que se centrará en convertirse en una líder.
Disney se ha enfrentado a críticas por su deconstrucción de antiguos cuentos y su reescritura con temas progresistas.
David Hand, cuyo padre del mismo nombre dirigió la Blancanieves original de 1937, calificó la nueva adaptación de «insultante».
«Es un concepto totalmente diferente, y estoy totalmente en desacuerdo con él, y sé que mi padre y Walt también estarían muy en desacuerdo», dijo Hand.
Boreing dijo que, aunque Disney conserva el nombre de Walt, su legado ha sido abandonado.
«En lugar de contar historias sobre la verdad intemporal, de lo que trataban los antiguos cuentos de hadas, la nueva ‘Blancanieves’ de Disney es una apología de su pasado y expondrá a los niños a las populares pero destructivas mentiras del momento actual», dijo.
Ante la insistencia de la izquierda en que la política debe impregnar los contenidos infantiles, Boreing dijo a Peterson que, aunque el lanzamiento de Bentkey y la nueva adaptación de Blancanieves es un acto inherentemente político, el material en sí está libre de mensajes políticos.
«Los niños se merecen una infancia», dijo el Sr. Boreing.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con Disney para recabar comentarios.
«Tienen una responsabilidad»
Atraer talentos como animadores no ha sido difícil porque hay muchos empleados descontentos en el entretenimiento infantil que no están de acuerdo con la dirección que están tomando sus empresas, dijo.
Poner ideologías transgénero en programas dirigidos a niños de 7 años ha puesto en una situación difícil a muchas personas que trabajan para empresas como Disney, afirmó.
«Las personas que se sienten atraídas por el entretenimiento infantil en particular son personas que aman a los niños», dijo. «Les encanta la inocencia de los niños, su juventud. Tienen una responsabilidad».
Calificó a muchas de las personas que trabajan en Disney como «una raza especial», creativa y «llena de amor».
«Son artistas increíbles en todos los sentidos de la palabra y se sienten profundamente responsables del contenido que crean», dijo.
Este conflicto ha facilitado que algunos abandonen el barco y firmen con Bentkey, dijo, donde no tendrán que aceptar que se impongan agendas progresistas a los niños.
«Lo que se les pide que hagan en su vida diaria es malo, y no quieren participar en el mal», afirma Boreing.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
