La Universidad Estatal de Washington (WSU) dijo que ya no eximirá a los estudiantes de la vacunación obligatoria contra COVID-19 por razones personales o filosóficas, citando la «creciente amenaza de la variante delta para aquellos que no están vacunados».
En un anuncio publicado el 12 de agosto, los responsables de la universidad dijeron que el cambio se producirá tan pronto como la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos conceda la plena aprobación a cualquiera de las tres vacunas autorizadas para uso de emergencia.
En estos momentos, ninguna vacuna contra el nuevo coronavirus está plenamente aprobada por la FDA, pero las vacunas de Pfizer-BioNTech, Moderna y Johnson & Johnson se están administrando en todo el país con autorización de la agencia federal, como uso de emergencia.
La universidad, cuyo campus ubicado en Pullman atiende a más de 31,000 estudiantes, también dijo que está adelantando desde noviembre al 10 de septiembre, el plazo para que los estudiantes cumplan con el requisito de vacunación. El curso de otoño para la WSU comienza el 23 de agosto.
«Una vez que la exención personal se elimine formalmente de la normativa de vacunación de la universidad, los estudiantes tendrán hasta 45 días para iniciar el proceso de vacunación recibiendo al menos una dosis de una vacuna aprobada o solicitar una nueva exención religiosa o médica», dijo la universidad.
De acuerdo con el reglamento de vacunación de la universidad, los estudiantes, el profesorado y el personal que no se vacunen pueden tener restricciones para participar en eventos y actividades. Además se les exige que lleven mascarillas en el interior del recinto.
«La universidad puede imponer más restricciones en interés de mantener la salud pública, hasta que uno haya cumplido con el requisito de la vacunación», dijo la escuela en un correo electrónico para todo el campus.
El anuncio se produce en un momento en el que cientos de escuelas y universidades de Estados Unidos están exigiendo que todos los estudiantes y miembros del profesorado se vacunen contra COVID-19 antes de regresar o acudir al campus. En una demanda judicial reciente, ocho estudiantes de la Universidad de Indiana se querellaron con la escuela por una orden de vacunación que impedía que los alumnos no vacunados se registren en las clases. Siete de los estudiantes obtuvieron el derecho a una exención religiosa pero tienen que llevar mascarillas y someterse al test de infección de COVID-19, según el reglamento de la universidad.
De acuerdo a los archivos judiciales, los estudiantes dijeron que tienen «un derecho constitucional a la integridad corporal, a la autonomía y a la elección del tratamiento médico en el contexto de una orden de vacunación». Ellos pidieron que el tribunal emita una orden que prohíba a la universidad aplicar el reglamento.
El 2 de agosto, un tribunal federal de apelaciones confirmó la sentencia de un tribunal inferior a favor de la universidad, afirmando que los estudiantes no habían demostrado con suficiencia que sus derechos constitucionales estuvieran siendo violados. La semana pasada, la jueza Amy Coney Barrett rechazó un intento de impugnar el reglamento de la Universidad ante la Corte Suprema de Estados Unidos.
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