La Universidad de Pensilvania (UPenn) se enfrenta a una disminución del apoyo financiero de donantes influyentes debido a sus respuestas a la actual guerra entre Israel y Hamás y al presunto antisemitismo en el campus.
El multimillonario Clifford Asness, antiguo alumno de la Universidad de Pensilvania, fue el último gran donante en cerrar su chequera a la universidad de la Ivy League.
En una carta dirigida a la presidenta de UPenn, Elizabeth Magill, el 16 de octubre, compartida en X, el Sr. Asness condenó a la escuela por desviarse de la libertad de pensamiento y expresión. En concreto, se refirió a la organización por parte de la universidad de un festival de literatura palestina en septiembre, calificándolo de «festival antisemita Burning Man».
«Por supuesto, lo más angustioso para mí fue su primera declaración haciendo vagas equivalencias entre el asesinato intencional de niños (y otros) por terroristas y las lesiones accidentales a los niños que tristemente ocurren cuando los terroristas asesinos se esconden detrás de los niños para escapar de la justicia», escribió el multimillonario de 57 años.
El Sr. Asness añadió que había completado recientemente sus pagos de compromiso de cinco años a UPenn y «no considerará otro hasta que tal cambio significativo sea evidente».
Es gestor de fondos de cobertura y cofundador de AQR Capital Management, una empresa de gestión de dinero que supervisa 100,000 millones de dólares en activos. Según Forbes, el magnate de los fondos de cobertura tiene una fortuna de 1600 millones de dólares.
UPenn pierde donantes importantes
Asness no fue el único donante que retiró sus fondos de la Universidad de Pensilvania en medio del revuelo causado por el polémico festival de escritores palestinos y la guerra en Oriente Próximo.
A la cabeza del éxodo de donantes de alto perfil estaba Marc Rowan, CEO de Apollo Global Management y un generoso exalumno que, con su esposa, donó 50 millones de dólares a la escuela en 2018.
En una carta del 10 de octubre a The Daily Pennsylvanian —publicada por eJewish Philanthropy— el Sr. Rowan escribió: «Dos semanas y más de 1,000 civiles israelíes masacrados y secuestrados después, UPenn aún no condenó el festival Palestine Writes lleno de odio».
Instó a todos los ex alumnos y simpatizantes de UPenn que no están de acuerdo con la dirección actual a cortar su financiación hasta que el presidente Magill y el presidente del Consejo de Administración de Penn, Scott L. Bok, dimitan.
«Es hora de que los administradores empiecen a dirigir UPenn en una nueva dirección. Únanse a mí y a muchos otros que aman a UPenn enviando a la universidad 1 dólar en lugar de su contribución discrecional normal, para que nadie se pierda», declaró.
La guerra entre Israel y Hamás desata la tensión
Las ramificaciones de los discursos universitarios en torno a la guerra entre Israel y Hamás se extendieron más allá del mundo académico, a medida que los antiguos alumnos donantes y los futuros empleadores examinan las respuestas de los estudiantes y de los dirigentes de la universidad al asunto.
En Harvard, la reacción ya provocó la retirada financiera de la Fundación Wexner, una organización filantrópica creada por Leslie Wexner y su esposa, tras 34 años de asociación. La Fundación Wexner anunció que romperá sus lazos con la Universidad de Harvard, alegando que ésta trató los atentados de Hamás «de puntillas y con equívocos», según el Harvard Crimson.
Varios bufetes de abogados, entre ellos Davis Polk & Wardwell y Winston & Strawn, también rescindieron ofertas de trabajo a estudiantes que firmaron o redactaron declaraciones públicas que responsabilizan a Israel de la trágica pérdida de vidas en el ataque de Hamás.
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