El Vaticano anunció el domingo que sus celebraciones tradicionales de la semana Santa, dirigidas por el Papa Francisco y a las que normalmente asisten a miles de personas, se realizarán este año sin la presencia de fieles debido a la pandemia del coronavirus.
«Todas las celebraciones litúrgicas de la Semana Santa se llevarán a cabo sin la presencia física de los fieles», anunció en un comunicado la Prefectura de la Casa Pontificia, que, entre otras cosas, organiza audiencias oficiales con el Papa.
«Además, esta Prefectura informa que, hasta el 12 de abril, las Audiencias Generales y el Ángelus presidido por el Santo Padre estarán disponibles solo en el sitio web oficial de Noticias del Vaticano por trasmisiones en vivo».
Estaba previsto que el Papa Francisco comenzara la Semana Santa el 5 de abril, con la Misa del Domingo de Ramos en la Plaza de San Pedro, seguida de la Misa Crismal el jueves 9 de abril, en la Basílica de San Pedro y la Misa de la Cena del Señor, también el jueves, ofrecida en centros de detención o con solicitantes de asilo.
La conmemoración de la Pasión del Señor, el Viernes Santo; y la Vigilia Pascual del sábado será celebrada por el Papa argentino sin los fieles, según la Agencia Católica de Noticias.
A medida que el brote de coronavirus continúa propagándose por toda Italia, el Papa Francisco ha reducido significativamente sus apariciones públicas, en cambio transmitirá en vivo la Misa de la mañana, la audiencia general del miércoles y el Ángelus del domingo. Los Museos Vaticanos también estarán cerrados hasta el 3 de abril, como medida de precaución.
La decisión del Vaticano, de transmitir en vivo las celebraciones de la Semana Santa, se produce después de que funcionarios de salud en Italia anunciaron, el viernes, que 250 personas habían muerto por coronavirus en un solo día en todo el país, lo que elevó el número de muertos a 1266. También confirmaron 15,000 casos del virus, lo que lo convierte en el país más afectado del mundo fuera de China continental, pero señalaron que 1439 personas se han recuperado hasta ahora.
Silvio Brusaferro, el médico jefe de la agencia de salud del país, dijo que la mayoría de los pacientes que han muerto por COVID-19, la enfermedad causada por el coronavirus, tienen más de 80 años. «El pico de mortalidad es entre 80 y 89 años», dijo Brusaferro según información consignada por ANSA, una la agencia de noticias italiana respaldada por el estado. Hasta el domingo, se habían reportado 21,157 casos del virus, con 1441 muertes y 1966 personas que se recuperaron.
En las últimas semanas, Italia ha extendido sus medidas de emergencia por el coronavirus, en un esfuerzo por evitar que el virus se propague. Actualmente más de 60 millones de personas están bajo llave y se han introducido restricciones de viaje. El país también ha prohibido todas las reuniones públicas, incluidos los funerales y bodas, mientras que los teatros, gimnasios y pubs han sido cerrados. Las escuelas y universidades también permanecerán cerradas hasta el 3 de abril, según The Guardian.
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