La batalla de Hamburger Hill fue una de las más sangrientas de la guerra de Vietnam. Un hombre comenzó su despliegue realizando una misión de reconocimiento en la colina, y la experiencia le causó estrés postraumático. En los últimos 40 años, se ha recuperado a través de sus jardines.
Chuck Newhall III tiene 74 años y reside en Maryland. Cuando tenía 21 años, fue enviado a Vietnam de 1968 a 1969.
Newhall había sido oficial de entrenamientos básicos y se había ofrecido como voluntario para ir a Vietnam cinco veces. Finalmente, recibió órdenes de partir.
Después de solo una semana en el país, estaba en una misión de reconocimiento en Hamburger Hill.
El comienzo
Después de que su helicóptero aterrizó, el comandante de la compañía ordenó a Newhall que cruzara un campo abierto. Escuchó que se acercaba artillería y dijo a sus hombres que atacaran el terreno.
«Cuatro segundos después, el 40 por ciento de ellos estaban muertos o gravemente heridos», comentó Newhall a The Epoch Times.
El hombre frente a Newhall había sido cortado a la mitad. Sus piernas seguían de pie, y su torso no estaba.
Esa noche, Newhall y su unidad fueron a la base de Hamburger Hill y sufrieron otro bombardeo de artillería.
Durante los cuatro días siguientes, él y su pelotón se abrieron camino hasta la cima contra el fuego de ametralladoras y la artillería que se les acercaba.
Una vez que el pelotón llegó a la cima de la colina, fueron emboscados. Newhall ayudó a los heridos a salir de la colina y se ganó la Estrella de Plata por sus esfuerzos.
«Ese fue el comienzo de mi viaje a Vietnam», señaló Newhall.
Enfrentándose con el Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
Newhall regresó a los Estados Unidos en agosto de 1969 y se enfrentó a repetidos insultos. En un caso, un camarero le escupió en la cara. Mientras asistía a la escuela de postgrado, a menudo lo llamaban «asesino de niños».
Sin embargo, el trauma que experimentó en Vietnam resultó ser una lucha aún mayor.
Newhall comenzó a experimentar síntomas de TEPT después de que su primera esposa se suicidó. Comenzó a usar uniformes del Ejército y realizaba ejercicios con disparos con su hijo mayor.
A menudo, se despertaba varias veces por noche para revisar su casa en caso de una emboscada. Cada vez que un coche hacía ruido de explosión por avería, saltaba por los aires.
«Sabía que estaba en un mal momento», exclamó Newhall.
Newhall buscó terapia, y después de su primera sesión, le dijeron que tenía TEPT. Continuó viendo a un psiquiatra y le dijeron que el TEPT era una enfermedad, no su identidad.
Sanación y Flores
Newhall desarrolló un mecanismo para hacer frente a la situación, que fue dedicarse a la jardinería. Tomó todas las tragedias de su vida y las canalizó a través de las flores. Construyó su primer jardín en 1983, dedicado a su esposa.
Ahora tiene 54 jardines diferentes en su propiedad, y cada jardín representa un tema diferente. Por ejemplo, los tulipanes amarillos representan el amor indefenso.
La mujer que ayudó a construir uno de los jardines falleció de cáncer a la edad de 31 años. Tiene un jardín dedicado a ella con flores de corazón sangriento, que representan el tema de la vida interrumpida.
«Así que [para] cada jardín, las plantas se eligen para que se relacionen con la historia del jardín», explicó Newhall.
Los narcisos en sus jardines representan el renacimiento, y específicamente la recuperación de Newhall y la batalla contra el TEPT. Durante las últimas cuatro décadas, ha sido capaz de sanar a través de sus jardines.
«Lo que tienes que hacer con el TEPT es renacer», enfatizó Newhall.
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