Una doctora de una clínica juvenil de género de Carolina del Norte habló sobre el tratamiento de pacientes de tan sólo 2º grado con bloqueadores de la pubertad en un video recientemente difundido por un activista de los derechos de los padres.
En un video subido a YouTube, la Dra. Deanna Adkins describe los protocolos durante «KIPL Power Hour: El cuidado de los pacientes LGBT durante el Covid-19».
El episodio de 2020 fue presentado por la Fundación de la Sociedad Médica de Carolina del Norte y el Instituto Kanof para el Liderazgo Médico.
En el video se identificaba a Adkins como directora de la Clínica de Atención al Género Infantil y Adolescente de Duke. El centro forma parte del sistema Duke Health, que incluye la Facultad de Medicina de la Universidad de Duke, donde Adkins es profesora adjunta de Pediatría.
La activista por los derechos de los padres Sloan Rachmuth llamó la atención sobre el video en un artículo publicado en el sitio web de Education First Alliance (EFA). Es presidenta del grupo de vigilancia de Carolina del Norte.
Los hospitales de todo el país han dicho que las advertencias de los activistas sobre el uso de estos protocolos en niños pequeños forman parte de una campaña «transfóbica» de «desinformación».
Pero Rachmuth considera que los videos son una prueba importante de la verdad.
El video demuestra que «tenemos los hechos de nuestra parte», declaró a The Epoch Times.
«Y con ellos, seguiremos equipando al público para que luche contra los sistemas hospitalarios que están siendo usados como armas contra los niños y las familias de Carolina del Norte».
«Cómoda» con las hormonas del sexo opuesto
En el video de 2020, se muestra a Adkins hablando de «algunos de mis pacientes que tienen una disforia significativa, o que empezaron a tomar bloqueadores de la pubertad a los 8 ó 9 años» para algunos pacientes.
La pubertad podría detenerse para los pacientes jóvenes que se sienten «incómodos» con su identidad de género a medida que sus cuerpos maduran, explicó.
La doctora dijo que se sentía «cómoda» con el inicio rutinario de las hormonas del sexo opuesto a los 14 años. En algunos casos, empezaría a administrarlas un año antes, dijo.
«Quiero intentar que lleguen a la pubertad con sus compañeros, así que puede que empiece con ellos a los 13 años o así», dijo.
Adkins dijo que los médicos estaban «acortando el intervalo de tiempo» entre el inicio del tratamiento de los niños con bloqueadores de la pubertad y el comienzo de las «hormonas de afirmación del género».
En todo el país, los activistas denuncian estos procedimientos, que a menudo se describen como reversibles.
Las personas que intentan revertir los efectos de los llamados «cuidados de afirmación de género» forman parte de un creciente grupo conocido como «detransicionistas».
Muchos de ellos han salido a la calle y a los medios de comunicación para advertir de las secuelas de por vida que dicen que ahora sufrirán como consecuencia del «tratamiento» que recibieron de niños.
Tratar a niños pequeños
El video de 2020 no es la primera vez que los centros de Carolina del Norte hablan abiertamente del tratamiento de la disforia de género en niños pequeños.
En los sitios web de las organizaciones, en documentos y en artículos de prensa revisados por The Epoch Times, las facultades de medicina de la Universidad de Duke, la Universidad de Carolina del Norte (UNC) y la Universidad de Carolina del Este (ECU) hicieron referencia a proporcionar «tratamiento» a niños pequeños y en edad escolar con disforia de género.
Un posteo publicado el 10 de mayo de 2016 en la página de Facebook de Duke Children citaba un informe de un periódico de Carolina del Norte sobre la atención prestada a niños pequeños.
«La Dra. Deanna Adkins, directora del Centro Duke de Atención al Género Infantil y Adolescente, dijo que tiene pacientes transexuales de tan sólo 2 años», decía el posteo.
Adkins indicó opiniones similares en su testimonio pericial presentado ante un tribunal federal de distrito de Carolina del Norte. Emitió su dictamen en relación con una propuesta para restringir el uso de los baños públicos al sexo biológico, medida a la que ella se oponía.
En ese documento judicial, reitera su creencia de que los niños pequeños pueden experimentar disforia de género.
«La mayoría de las personas tienen una identidad de género que coincide con el sexo que se les asignó al nacer», afirma Adkins en el documento judicial que firmó en 2020.
«Sin embargo, para algunas personas, su identificación básica profundamente sentida y su autoimagen como un género concreto no se alinean con el sexo que se les asignó al nacer. Esta falta de alineación puede crear una angustia significativa a las personas con esta experiencia y puede sentirse en niños de tan sólo 2 años».
Propuesta de prohibición de los cambios de sexo infantiles
Rachmuth lucha contra la política de los centros médicos en relación con los niños con disforia de género.
Está a favor de una propuesta de ley de Carolina del Norte que prohibiría la cirugía en menores y bloquearía el uso de fondos estatales en cualquier procedimiento de «transición de sexo» para menores de 18 años.
Los sistemas hospitalarios de Carolina del Norte han intentado desviar el escrutinio, dijo Rachmuth, alegando que los videos y documentos relativos a los procedimientos de género para niños son desinformación.
Es «para que puedan seguir esterilizando y mutilando a los niños», dijo.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con Adkins y con las tres facultades de medicina de Carolina del Norte, pero no han respondido a las solicitudes de comentarios.
Sin embargo, después de que la información sobre sus programas suscitara reacciones negativas en las redes sociales, las tres universidades emitieron declaraciones públicas en las que indicaban que no prescriben hormonas transgénero ni practican cirugía de modificación del sexo a niños pequeños.
Las organizaciones médicas no negaron que sus médicos atendieran a preescolares por disforia de género.
«Las decisiones sobre los cuidados las toman los pacientes, las familias y sus proveedores, y son adecuadas para la edad y se ajustan a las directrices nacionales e internacionales», escribió un representante de Duke Health en un mensaje posteado el 4 de mayo en Twitter.
«Las terapias hormonales no se administran explícitamente a los niños antes de la pubertad, y las cirugías de afirmación del género, salvo en circunstancias extremadamente raras, sólo se realizan después de los 18 años».
En la Clínica de Atención al Género para Niños y Adolescentes de Duke, los «jóvenes transexuales» pueden recibir una amplia gama de tratamientos y educación en el centro, según el sitio web de la organización.
«Proporcionamos tratamiento, apoyo, educación y asesoramiento a jóvenes transexuales que están explorando su identidad y expresión de género, así como a sus familias», dice el sitio web.
«También tratamos a personas con disforia de género, que se produce cuando el sexo y el género asignados al nacer no coinciden con la identidad de género de una persona».
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