Siete presuntos miembros de una red de tráfico de drogas y armas vinculada a cuatro muertes por sobredosis de fentanilo fueron imputados por un gran jurado federal, anunció el 12 de julio la fiscalía federal del Distrito Medio de Pensilvania.
Se les acusó de utilizar aplicaciones de citas para conectarse con personas que buscaban prostitutas, con la intención de robarles dinero en efectivo, tarjetas de crédito, teléfonos móviles, documentos de identidad, drogas, armas y otros objetos de valor.
El grupo, al que las fuerzas de seguridad bautizaron como la «banda de ladrones del fentanilo», opera desde New Hampshire hasta Virginia y tiene algunos vínculos con otras bandas de Nueva York, según la oficina del fiscal federal Gerard M. Karam.
Para incapacitar a sus víctimas, los miembros de la banda supuestamente les ofrecían drogas secretamente mezcladas con fentanilo. Si su objetivo rechazaba las drogas, el grupo se las introducía a los cuerpos de los individuos por medios forzados o subrepticios.
Si el fentanilo no hacía efecto con la suficiente rapidez, pasaban a cometer robos con allanamiento de morada a punta de pistola o por otros medios violentos, como amenazas, palizas y agresiones con agravantes.
Los delitos de los que se les acusa incluyen conspiración para distribuir una sustancia controlada con resultado de muerte y lesiones corporales graves, distribución de fentanilo con resultado de muerte y lesiones corporales graves, blandir armas de fuego en apoyo de un delito de tráfico de drogas, secuestro y usurpación de identidad con agravantes.
Según la Administración para el Control de Drogas de EE. UU. (DEA), solo 2 mg de fentanilo pueden ser letales en función de la talla de la persona, su tolerancia y el uso que haya hecho de la droga en el pasado.
La acusación vincula a las actividades de la banda con cuatro muertes por sobredosis de fentanilo —tres en los condados de Berks y Luzerne, en Pensilvania, y una en Portsmouth, Nuevo Hampshire.
Los fiscales adjuntos Todd K. Hinkley y Luisa Honora Berti llevan el caso.
Entre los acusados figuran Amanda Marie Correa, de 29 años; Robert Andrew Barnes, de 24; Christine Deann DiCarlo, de 50; Shaqare Jaymont Blackwell, de 23; Shakur Serafin Brownstein, de 27; Dylan Wilson Small, de 35; y Samual Jordan, de 42 años.
Los cargos son el resultado de una investigación conjunta llevada a cabo por el FBI, la Policía del Estado de Pensilvania, la oficina de Scranton del Servicio de Alguaciles de Estados Unidos, las fiscalías de los condados de Pike, Lackawanna, Luzerne, Wyoming y Berks de Pensilvania, el Departamento de Policía de Portsmouth, Nuevo Hampshire, la fiscalía general de Nuevo Hampshire y otros muchos organismos policiales estatales y locales.
La investigación sigue abierta y los agentes continúan buscando a otros sospechosos y víctimas. Se anima a las personas que dispongan de información pertinente a que se pongan en contacto con el FBI llamando al 570-344-2404.
Con información de The Associated Press.
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