Virginia podría empezar a reabrir el 15 de mayo, anunció el lunes el gobernador Ralph Northam al extender su orden de confinamiento en casa hasta el 14 de mayo.
«Anticipo que pasaré a la fase uno el día 15», dijo Northam en una conferencia de prensa.
«Podrá cortarse el pelo, pero necesitará una cita.(…)Podrá salir a comer de nuevo pero los restaurantes usarán menos de sus mesas para que la gente se disperse más (…) Podrá ir al gimnasio, pero con menos gente y más requisitos de limpieza».
Los funcionarios aún no están completamente seguros de si la reapertura puede comenzar, lo que provocó la extensión de la rigurosa orden.
Desde marzo, los virginianos han sido confinados en sus casas y se les ha ordenado no salir excepto para los llamados viajes esenciales. Mientras la mayoría de los estados de la nación reabren o se encaminan hacia la reapertura, Northam se ha resistido hasta ahora a los llamados para aliviar las restricciones junto con los vecinos Maryland y el distrito de Columbia.
Extendiendo la orden «nos da dos semanas adicionales para observar los datos y determinar si estamos cumpliendo con la métrica que necesitamos ver para entrar en la fase uno», señaló el gobernador demócrata. A la vez anunció que haría todo lo posible para avisar a la población con antelación si el plan cambia.
La fase uno incluye la flexibilización de los límites de los negocios y las casas de culto. Se incentivará a las personas que están saliendo fuera de sus casas a mantener la distancia entre ellos y los demás y a usar cubiertas para la cara o mascarillas mientras están en público.
A las empresas se les dirá que establezcan políticas para mantener a los empleados y clientes físicamente separados, evitando las conferencias, las ferias comerciales y otras grandes reuniones. Es posible que los empleados tengan que usar máscaras en el trabajo. La desinfección debe intensificarse. La gente que puede trabajar desde casa debe continuar haciéndolo.
Se permitirán las reuniones en persona en iglesias y otras casas de culto con medidas de distanciamiento social. Los mercados de las granjas también podrán funcionar.
Los ancianos y las personas con sistemas inmunológicos comprometidos deben quedarse en casa si es posible.
La fase uno podría durar de dos a cuatro semanas o incluso más, según los funcionarios del estado. A su vez se prevé que las fases dos y tres duren unas tres semanas cada una.
La fase dos tendrá una mayor relajación de las restricciones, incluyendo el permitir reuniones sociales de hasta 50 personas. Se seguirá aconsejando a los trabajadores que trabajen desde casa si es posible y que sigan las pautas de distanciamiento social cuando van a trabajar.
La fase tres solo se implementaría si no hay evidencia de un rebrote de nuevos casos durante un período de tiempo sostenido. Se eliminaría la prohibición de las reuniones sociales y se eliminarían los límites de capacidad de las empresas y otros establecimientos. Se seguiría aconsejando a las poblaciones de riesgo, incluidas las personas mayores, que se queden en casa cuando fuera posible y se continuaría con una mayor cantidad de limpieza y desinfección.
El número de nuevos casos en Virginia no ha disminuido significativamente en los últimos días, con niveles récord alcanzados el 30 de abril y el 1 de mayo. El estado vio 821 nuevos casos durante la noche. Los funcionarios esperan que la tasa diaria se mantenga alta mientras aumentan los test del virus aún más. Además se centran en el porcentaje de personas que dan positivo con respecto al número total de pruebas, especialmente el desplazamiento de la media de siete días del recuento de test positivos.
«Queremos ver una tendencia a la baja en ese porcentaje durante 14 días», dijo Northam.
Otra medida clave es el porcentaje de personas hospitalizadas con COVID-19.
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