Wall Street rebotó este viernes tras registrar en la víspera su peor jornada desde 1987 y el Dow Jones, su principal índice bursátil, llegó a subir en la apertura un 4.50 % ante las expectativas de que los legisladores y el Gobierno de EE.UU. aprueben un paquete de medidas económicas para paliar el impacto del coronavirus.
Al comenzar la sesión en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones llegó a dispararse un 6 % pero después se moderó rápidamente y media hora después subía un 2.92 % ó 619 puntos, situándose en unos 21,820, impulsado por las firmas Boeing (8.58 %), JPMorgan Chase (7.55 %) e Intel (7.60 %).
El selectivo S&P 500 ascendía un 3.38 % u 84 puntos, hasta 2565 enteros, tras haber obligado previamente a interrumpir las operaciones de futuros al tocar un techo del 5 %, que activa un mecanismo de protección en el parqué.
El índice compuesto Nasdaq, que reúne a las tecnológicas más importantes, avanzaba un 3.48 % o unos 250 puntos, hasta 7452 enteros.
Wall Street parece querer sobreponerse a su desplome del jueves, motivado en las ventas de pánico por la prohibición de viajes de Europa a Estados Unidos durante un mes que anunció el presidente Donald Trump y en el que influyó muy poco la drástica inyección de liquidez a corto plazo en el sistema financiero, de 1.5 billones de dólares, que hará la Reserva Federal.
La volatilidad hoy baja en torno al 10 % según el índice Vix, y además el selectivo S&P 500, que ha encendido su mecanismo de «cortocircuito» dos veces en Wall Street esta semana por caídas del 7 % durante las operaciones, esta mañana ha hecho lo propio por lo contrario: por dispararse un 5 % durante las negociaciones de futuros.
No obstante, los inversores están pendientes de la llegada de un paquete de estímulo fiscal después de que la presidenta de la Cámara Baja de EE.UU., la demócrata Nancy Pelosi, afirmara que los legisladores han «resuelto muchas diferencias» sobre el contenido y de que el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, declarara esta mañana en CNBC que se vislumbra un acuerdo.
Por sectores, las mayores ganancias eran para las empresas financieras (5.67 %) y tecnológicas (4.69 %).
En otros mercados, el barril de petróleo de Texas subía un 3.3 %, hasta 32.54 dólares; el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años ascendía al 0.983 %; el oro se deslizaba a 1573 dólares la onza y el dólar ganaba terreno ante el euro con un cambio de 1.1124.
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