El presidente Joe Biden se reunió el sábado con el líder chino Xi Jinping en su último encuentro presencial durante la presidencia de Biden. En su conversación, que duró una hora y 40 minutos, Xi expresó la disposición de China a trabajar con la administración estadounidense entrante.
La reunión tuvo lugar al margen de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Lima (Perú), en el hotel donde se alojaba Xi.
Durante su discurso de apertura, Xi le dijo a Biden: «Estados Unidos concluyó recientemente sus elecciones. El objetivo de China de una relación China-Estados Unidos estable, saludable y sostenible permanece inalterado».
«China está dispuesta a trabajar con la nueva administración estadounidense para mantener la comunicación, ampliar la cooperación y gestionar las diferencias, a fin de esforzarse por lograr una transición estable de la relación China-Estados Unidos en beneficio de los dos pueblos».
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, dijo a los periodistas tras la reunión que Biden y Xi trataron una amplia gama de temas, y describió su conversación como «sincera» y «constructiva».
Biden le dijo a Xi que «ha trabajado duro para gestionar responsablemente la competencia» con China durante los últimos cuatro años con el fin de evitar que se convierta en un conflicto, dijo Sullivan.
Ambos líderes se han comprometido a gestionar de forma responsable esta relación durante el crítico periodo de transición, añadió.
Los dos líderes también hablaron sobre «áreas de fricción», dijo Sullivan, citando el apoyo de China a la base industrial de defensa de Rusia, la actividad militar en torno a Taiwán, las políticas comerciales injustas y la creciente agresión en el Mar de China Meridional.
Biden y Xi también se refirieron a la relación de China con Corea del Norte, en particular cuando las evaluaciones de los servicios de inteligencia estadounidenses y occidentales indican que Corea del Norte desplegó tropas para ayudar a las fuerzas rusas en su actual guerra con Ucrania.
Durante la reunión, Biden expresó su «grave preocupación» por la implicación de Corea del Norte, dijo Sullivan.
La Casa Blanca indicó anteriormente que Estados Unidos y sus aliados (Corea del Sur y Japón) creían que «China tiene un papel que desempeñar» para disuadir la creciente alianza entre Rusia y Corea del Norte.
El regreso de Trump
El inminente regreso del presidente electo Donald Trump a la Casa Blanca también pesó en la reunión Biden-Xi.
Trump señaló en repetidas ocasiones que aplicará aranceles de hasta el 60 por ciento a los productos fabricados en China que lleguen a Estados Unidos.
Trump también está dispuesto a dotar a su nueva administración de varios halcones en materia de China. Ya ha nombrado al senador Marco Rubio (R-Fla.) y al representante Michael Waltz (R-Fla.) (dos acérrimos críticos de China) como sus candidatos a secretario de Estado y asesor de seguridad nacional, respectivamente.
Beijing sancionó a Rubio dos veces en 2020 y le prohibió entrar en China.
Sullivan declinó hacer comentarios sobre la reacción de Beijing al plan arancelario de Trump.
«Miren, no voy a comentar las políticas de una futura administración que no han sido formuladas ni articuladas», dijo a los periodistas. «Lo que sí diré es que hemos expuesto en términos claros nuestra preocupación por las prácticas económicas ajenas al mercado que ha emprendido la República Popular China».
Sullivan defendió los aranceles estadounidenses a los productos chinos, afirmando que muchos países han tomado medidas para abordar el problema del exceso de capacidad de China en sectores críticos.
El historial de Biden en China
Los dos líderes se reunieron por última vez al margen de la cumbre de líderes de la APEC celebrada en San Francisco el 15 de noviembre de 2023.
Tras la reunión, ambos países restablecieron las comunicaciones entre militares para ayudar a prevenir confrontaciones escaladas. Sullivan dijo que, desde la última reunión, ambos países también han hecho algunos progresos en la lucha contra los estupefacientes ilícitos que fluyen desde China y en el desarrollo de una comprensión compartida de los riesgos asociados a la emergente tecnología de inteligencia artificial.
En la última reunión, ambas partes acordaron impedir que la inteligencia artificial (IA) tenga control sobre las armas nucleares.
«Los dos líderes afirmaron la necesidad de mantener el control humano sobre la decisión de utilizar armas nucleares», según la lectura de la Casa Blanca. «Los dos líderes también subrayaron la necesidad de considerar cuidadosamente los riesgos potenciales y desarrollar la tecnología de IA en el ámbito militar de manera prudente y responsable».
Durante su última reunión con Xi, Biden también sacó el tema de los ciudadanos estadounidenses detenidos en China.
«No tengo ningún anuncio que hacer, pero hoy han mantenido una importante discusión sobre el tema, y seguiremos trabajando todos los días hasta el último para intentar conseguir la liberación de los estadounidenses injustamente detenidos», dijo Sullivan.
Biden también planteó la cuestión del aumento de los ciberataques por parte de piratas informáticos vinculados a China.
El FBI y la agencia estadounidense de vigilancia cibernética CISA anunciaron recientemente que piratas informáticos vinculados a China habían comprometido las redes de «múltiples empresas de telecomunicaciones» y robado datos de vigilancia destinados a las fuerzas de seguridad estadounidenses.
Sullivan se negó a comentar los detalles de lo que Biden y Xi hablaron sobre el último ciberataque.
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