Portland multará al gobierno de EE. UU. por obstruir la calle con valla de la corte

Por Lorenz Duchamps
29 de julio de 2020 8:11 PM Actualizado: 29 de julio de 2020 8:11 PM

El gobierno federal será multado por un monto máximo de USD 500 dólares por cada 15 minutos que mantenga una valla alrededor de la corte federal en Portland, Oregon, que los manifestantes intentaron romper durante los disturbios nocturnos en curso, dijeron las autoridades de Portland.

«Hasta ayer, el gobierno federal nos debe USD 192,000 y contando», dijo el martes en un comunicado la comisionada de la ciudad, Chloe Eudaly, que supervisa la Oficina de Transporte de Portland (PBOT). Ella agregó que la ciudad tiene la intención de cobrar.

La valla se levantó inicialmente alrededor de la corte Mark O. Hatfield la semana pasada para tratar de disminuir las tensiones entre  los agentes federales y los alborotadores que lanzaron proyectiles e intentaban abrir una brecha e incendiar la corte.

El PBOT «presentó una carta de cese y desistimiento» la semana pasada exigiendo que el gobierno federal retire la «valla no autorizada», según el comunicado. La comisionada Eudaly dijo que la valla está obstruyendo las calles de la ciudad.

Eudaly dijo que está «comprometida a hacer todo lo que esté en su poder para terminar con esta ocupación federal y avanzar en el reconocimiento de nuestra comunidad ante la injusticia racial y nuestros esfuerzos para transformar nuestro enfoque de la vigilancia y la seguridad pública».

Los líderes demócratas de la ciudad y del estado, incluyendo a Eudaly, acusan a los agentes federales de la escalada de violencia en la ciudad. Pero según las pruebas de vídeo y los funcionarios, los oficiales y agentes parecen estar reaccionando a las acciones criminales de los alborotadores, incluyendo el daño a la propiedad federal y el ataque a los agentes del orden público.

Los agentes federales se preparan para dispersar a una multitud de unos cientos de manifestantes durante una protesta en la corte Mark O. Hatfield el 21 de julio de 2020 en Portland, Oregon. (Nathan Howard/Getty Images)

Los funcionarios federales anunciaron previamente que no es necesario responder si las multitudes se mantienen alejadas de la corte y de la nueva valla, la cual los manifestantes violentos incendiaron e intentaron dañar repetidamente antes que se erigiera la barrera; recientemente centraron su energía en derribar la valla con sierras, cuerdas, cadenas, martillos y otras herramientas.

El lunes 27 de julio, una multitud de varios cientos de personas cerraron las calles alrededor de la corte, algo muy común, y pasaron horas gritando, cantando, golpeando la valla y lanzando objetos al edificio. Justo antes de la medianoche, los alborotadores comenzaron a lanzar fuegos artificiales y morteros pirotécnicos y algunos empezaron a trepar por encima de la valla. Otros usaron paraguas y escudos para cubrir a una persona que intentaba atravesar la barrera.

Eudaly dijo en su comunicado que sólo unos pocos manifestantes mostraron violencia y que estas pocas acciones no deben negar los derechos de los demás a ejercer su libertad de expresión y a reunirse pacíficamente.

«La respuesta de las fuerzas de la ley debe ser proporcional a las infracciones. Lanzar indiscriminadamente gases lacrimógenos y municiones de impacto contra miles de manifestantes pacíficos no es una respuesta proporcionada», dijo Eudaly.

El secretario interino de Seguridad Nacional, Chad Wolf, dijo en una conferencia de prensa a principios de este mes que el departamento apoya plenamente y protegerá a quienes deseen protestar pacíficamente en Portland, pero lo que los agentes ven cada noche «es todo lo contrario».

Los disturbios en Portland siguen un patrón diario, según el subdirector del Servicio de Protección Federal (FPS), Richard Cline. Desde aproximadamente las 6 p.m. a las 11 p.m., los manifestantes pacíficos se reúnen y protestan. Después de la medianoche, estalla la violencia organizada por los agitadores. Él dijo que la respuesta federal a la violencia fue erróneamente descrita como dirigida a las protestas pacíficas.

Los agentes federales se enfrentan a los alborotadores frente a la corte federal Mark O. Hatfield en el centro de Portland mientras la ciudad experimenta otra noche de disturbios el 27 de julio de 2020 en Portland, Oregon. (Spencer Platt/Getty Images)

«Lo que está ocurriendo en Portland en las primeras horas de cada mañana no es una protesta pacífica, estas personas están organizadas y tienen una misión en mente: incendiar o causar daños extremos a la corte federal y a los agentes federales», dijo Wolf.

«Los vemos planeando sus ataques, y sin embargo la ciudad de Portland no hace nada o casi nada para detener o dispersar a esta multitud», continuó. «Estos individuos llevan láseres, bates de béisbol, fuegos artificiales explosivos, tubos de metal, botellas de vidrio, acelerantes y otras armas, todas dirigidas a las instalaciones federales y a los agentes federales».

El congresista Earl Blumenauer (D-Ore.) exigió la renuncia de Wolf, afirmando que «cualquier persona que supervise el secuestro de manifestantes y la ocupación violenta de ciudades estadounidenses no tiene cabida en nuestro gobierno», señalando al secretario en funciones.

Eudaly añadió que la ciudad supervisará de cerca las acciones estatales y federales y proporcionará apoyo donde sea posible.

También dijo que normalmente la ciudad «enviaría un equipo de mantenimiento o un contratista» para remover una obstrucción como la valla, «pero no enviaré a los trabajadores al peligro», añadió.

El reportero de The Epoch Times Zachary Stieber contribuyó a este informe.


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