En Hong Kong, la seguridad de los practicantes locales de la práctica espiritual Falun Dafa está nuevamente bajo peligro luego de que varios de sus stands de información al borde de la calle fueran vandalizados por personas con presuntos vínculos con el régimen chino.
El hecho de que continuaran practicando libremente sus creencias se convirtió en una preocupación desde que Beijing impuso una draconiana ley de seguridad nacional en Hong Kong a fines de junio. La ley castiga crímenes vagamente definidos como la subversión y la colusión con una pena máxima de cadena perpetua.
Falun Dafa, también conocido como Falun Gong, es una práctica centrada en ejercicios de meditación y enseñanzas morales basadas en Verdad, Benevolencia y Tolerancia. Debido a la creciente popularidad de Falun Dafa en China continental, el régimen chino, temiendo que la práctica amenazara su poder, lanzó una amplia campaña de represión en julio de 1999.
Millones de practicantes de Falun Dafa han sido detenidos en prisiones, campos de trabajo forzados y otras instalaciones en China, cientos de miles quienes fueron torturados mientras estaban encarcelados, según el Centro de Información de Falun Dafa.
Aunque Hong Kong, como un territorio gobernado por China pero separado, respeta la libertad religiosa. Desde que entró en vigor la ley de seguridad, los residentes locales se preguntaron si las autoridades de Beijing usarían pronto las mismas tácticas que en China continental para silenciar a los disidentes, como los abogados de derechos humanos, líderes de iglesias clandestinas y practicantes de Falun Dafa, con denuncias inventadas, incluida la subversión.
La Asociación de Falun Dafa de Hong Kong previamente dio la alarma de que los practicantes locales podrían ser «arrestados y perseguidos por denuncias infundadas en cualquier momento» bajo la ley de seguridad nacional.
Vandalismo
En respuesta a la persecución de China, los practicantes en muchos países y regiones alrededor del mundo establecen stands en áreas públicas para crear conciencia sobre las violaciones a los derechos humanos cometidas por Beijing contra los practicantes de Falun Dafa en China.
Durante el fin de semana, los stands de información de Falun Dafa instalados en tres distritos de Hong Kong — Causeway Bay, Tsim Sha Tsui y Mong Kok — tal como un stand cerca del popular sitio turístico del Templo Wong Tai Sin, fueron vandalizados. También ocurrieron incidentes similares a inicios de este mes y en septiembre.
Alrededor del mediodía del 19 de diciembre, una persona empujó varios carteles que estaban en exhibición en el stand de Causeway Bay, antes de que la persona huyera en dirección a un centro comercial cercano, según un practicante de Falun Dafa que estaba a cargo del stand.
El mismo día por la tarde, un hombre que llevaba una mascarilla y una gorra derribó enérgicamente varios carteles y pancartas en el stand cerca del templo Wong Tai Sin. Un practicante de Falun Dafa de apellido Zhuang filmó el incidente. El hombre finalmente huyó mientras se llevaba algunas de las pancartas que había derribado.
Según Zhuang, el hombre tenía acento de China continental cuando habló. Se llamó a la policía local al lugar y los agentes tomaron fotografías para recabar pruebas.
Al mediodía del domingo, un hombre se presentó en el stand de Tsim Sha Tsui. Rompió uno de los postes y arrojó carteles al cercano puerto Victoria. Una practicante de apellido Chen se enfrentó al hombre, pero finalmente huyó mientras cargaba otro poste.
Los agentes de policía ayudaron a recuperar los carteles arrojados en el puerto luego de ser llamados al lugar.
Alrededor de la 1:10 p.m. hora local del domingo, varias personas se presentaron en el stand en Mong Kok, rociando aerosol en varios carteles. Un practicante local de Falun Dafa, que regularmente atiende el stand, dijo que la gente había aparecido para acosarlos durante varios días previos al domingo. En una ocasión, una persona les gritó a los practicantes que «terminarían en la cárcel tarde o temprano».
Condena
Sarah Liang, presidenta de la Asociación de Falun Dafa de Hong Kong, condenó a los vándalos de quienes sospechaba que tenían vínculos con el Partido Comunista Chino (PCCh). Ella pidió a los ciudadanos de Hong Kong que presten atención a lo que ha sucedido con las actividades de Falun Dafa en Hong Kong, para garantizar la libertad de expresión de la ciudad.
El funcionario jubilado de Hong Kong, Kwok Cheuk-kin, quien ha sido reconocido localmente como el «rey de las revisiones judiciales» por presentar impugnaciones legales a las políticas gubernamentales, dijo que las leyes locales permiten a los practicantes de Falun Dafa instalar stands en las calles.
Artículo 32 de la mini-constitución de Hong Kong, la Ley Básica, establece que «los residentes de Hong Kong tendrán libertad de creencias religiosas y libertad para predicar, realizar y participar en actividades religiosas en público».
Kwok dijo que creía que las recientes actividades de vandalismo tienen que ver con que el régimen chino no quiere que la gente se entere de su persecución hacia los practicantes de Falun Dafa en China.
Además, Kwok también instó a los residentes locales a hablar o denunciar cualquier incidente a la policía para garantizar sus derechos constitucionales.
Con información de la edición de Hong Kong de The Epoch Times.
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