Peng Bo, que en su día trabajó para una agencia secreta del Partido Comunista Chino para llevar a cabo décadas de atrocidades, ha sido acusado de delitos de corrupción.
La fiscalía superior de China, el fiscal estatal del régimen comunista, anunció los cargos contra Peng el 11 de octubre. Sin embargo, el anuncio no mencionó qué violaciones de los derechos humanos podría haber cometido mientras actuaba como subdirector en la «Oficina 610» extralegal.
El fiscal del Estado dijo que Peng fue acusado por presuntamente aceptar ilegalmente «grandes cantidades de soborno» y por censurar internet en beneficio de ciertas empresas. Estos delitos se cometieron durante su larga carrera política desde 2006, durante la cual también ocupó diferentes cargos en el sector del ciberespacio chino, incluido el de subdirector del regulador de internet Administración del Ciberespacio de China (CAC).
Peng fue subdirector de la CAC desde 2012 hasta 2015. Después asumió el cargo de subdirector de la Oficina 610, además de ser jefe de equipo en la gestión de la «ciberopinión pública» en el máximo órgano jurídico del régimen comunista, la Comisión Central de Asuntos Políticos y Jurídicos (PLAC).
Su carrera política pareció terminar en 2018. Ese año, comenzó a trabajar como profesor en su alma mater, la Universidad de Beijing.
El partido abrió una investigación sobre Peng en marzo, y cinco meses más tarde se le retiró la condición de miembro del partido.
La Oficina 610, que lleva el nombre de la fecha de su fundación, el 10 de junio de 1999, fue creada por el antiguo mandatario chino Jiang Zemin con el fin de aplicar la persecución del régimen chino contra los practicantes de Falun Gong. La oficina funcionaría de forma parecida a la Gestapo de la Alemania nazi, con poderes por encima de los tribunales y la policía de China.
Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una práctica espiritual con ejercicios de meditación y enseñanzas morales basadas en los principios de verdad, benevolencia y tolerancia. La práctica se hizo muy popular en 1999, y las estimaciones oficiales situaban el número de practicantes en China entre 70 y 100 millones.
Jiang, que veía la popularidad de la práctica como una amenaza para la supervivencia del régimen comunista, lanzó una campaña nacional para perseguir a los practicantes de Falun Gong el 20 de julio de 1999. Desde entonces, millones de personas han sido detenidas en prisiones, campos de trabajo y otras instalaciones en China, y cientos de miles han sido torturados mientras estaban encarcelados, según el Centro de Información de Falun Dafa.
La Oficina 610 ha sido directamente responsable de muchos casos de tortura y muerte, según Minghui.org, una página web con sede en EE. UU. que hace un seguimiento de la persecución del régimen a los practicantes de Falun Gong.
En diciembre de 2004, Chen Xiuchong, que tenía entonces 74 años y vivía en la ciudad de Xiamen, en el sur de China, fue golpeada hasta la muerte en su casa por funcionarios de la Oficina 610 local, según Minghui.
En 2016, Minghui documentó cómo la Oficina 610 regional de Dehui, una ciudad de la provincia nororiental china de Jilin, sometía a varios practicantes locales de Falun Gong a sesiones de lavado de cerebro, en un intento de obligarles a renunciar a sus creencias.
Un antiguo funcionario de la Oficina 610 ha sido sometido a sanciones de EE. UU. En mayo, Yu Hui, que en su día dirigió la Oficina regional 610 en la ciudad de Chengdu, en la provincia de Sichuan, fue sancionado por el Departamento de Estado por su papel en «graves violaciones de los derechos humanos, concretamente la detención arbitraria de practicantes de Falun Gong por sus creencias espirituales».
Peng es el segundo funcionario de la Oficina 610 que fue purgado por el régimen chino este mes.
Fu Zhenghua, exjefe de la Oficina 610 y exministro de Justicia chino, está siendo investigado desde el 2 de octubre. El órgano del partido encargado de vigilar la corrupción, la Comisión Central de Inspección Disciplinaria, insinuó que la investigación estaba relacionada con delitos de corrupción, pero no dijo si la comisión estaba examinando también la posible participación de Fu en violaciones de los derechos humanos.
La Organización Mundial para la Investigación de la Persecución a Falun Gong, una organización sin ánimo de lucro con sede en EE.UU., ha denunciado a Fu por sus delitos contra los practicantes de Falun Gong.
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