Dos astronautas de la NASA celebran la Navidad en el espacio exterior después de estar varados durante meses.
Los astronautas Sunita Williams, de 59 años y Butch Wilmore, de 61 años, fueron lanzados al espacio el 5 de junio en lo que se suponía iba a ser un vuelo de prueba de una semana; sin embargo, su misión fue extendida hasta marzo o incluso abril de 2025.
La pareja está varada en el espacio desde que viajaron a la Estación Espacial Internacional en una nave fabricada por Boeing llamada Starliner. Los problemas de seguridad llevaron a la NASA a retrasar su regreso a la Tierra.
El 16 de diciembre, el Centro Espacial Johnson de la NASA publicó una foto en Instagram mostrando a Williams y a otro astronauta, Don Pettit, posando para un retrato de la temporada navideña.
Es posible celebrar con buena comida en el espacio, dijo la veterana del Ejército Michelle Mackel.
«Si bien gran parte de la comida está liofilizada o pre-empaquetada, la NASA logró avances significativos en la creación de comidas que son tanto nutritivas como placenteras», dijo Mackel a The Epoch Times el 25 de diciembre.
Puede que no sea comparable con una comida casera de Navidad, pero, al igual que la mayoría de los soldados que soportan durante el combate o los entrenamientos, el simple hecho de tener una comida decente trae una sensación de comodidad y tradición, incluso en el espacio».
Los astronautas, al igual que los soldados, deben prepararse para los retrasos y adaptarse a circunstancias cambiantes, según Mackel.
«Retrasos como estos destacan la precisión y complejidad de las misiones espaciales», dijo. «Cada elemento debe ser planificado y ejecutado meticulosamente para garantizar la seguridad de los astronautas y el éxito de la misión».
El sitio web de la NASA describe la Estación Espacial Internacional como una gran nave espacial en órbita alrededor de la Tierra por la cual varias naciones trabajaron juntas en su construcción, para que las tripulaciones de astronautas y cosmonautas tuvieran un lugar donde vivir.
«Entendemos completamente los desafíos de estar aislados allí arriba solo con los demás… sí, tal vez eso cause algo de desgaste, pero se están comportando de manera muy profesional y lo están manejando realmente bien», dijo la directora de vuelos de la NASA, Chloe Mehring.
«Tendrán el día libre para hablar con la familia, enviar correos electrónicos, pueden usar el teléfono IP [teléfono por internet]», dijo Mehring sobre Williams y Wilmore.
Mackel señala que las restricciones son logísticas y operativas.
«Los sistemas de comunicación son limitados y los astronautas deben priorizar sus responsabilidades relacionadas con la misión», dijo. «Es similar a estar destinado en el ejército. Extrañas a tu familia, pero la misión viene primero».
Después que se notara que Williams experimentó una pérdida de peso visible durante la prolongada misión espacial, la NASA declaró en línea que «todos los astronautas reciben formación médica y tienen contacto regular con un equipo de médicos que monitorean de cerca su salud en la Tierra. La NASA también mantiene una farmacia robusta y un conjunto de equipos médicos a bordo de la estación espacial para tratar diversas condiciones y lesiones».
Los efectos psicológicos y de salud a largo plazo que pueden surgir con estancias prolongadas en el espacio incluyen atrofia muscular y pérdida de densidad ósea.
«En microgravedad, el cuerpo humano sufre cambios significativos», dijo Mackel. «Mantener su condición física es esencial para garantizar que puedan realizar tareas de manera efectiva y recuperarse rápidamente al regresar a la Tierra. Las restricciones reflejan la naturaleza de alto riesgo de su trabajo, similar al del ejército, donde las rutinas estrictas y las regulaciones están diseñadas para asegurar el máximo rendimiento y la preparación».
Esta no es la primera vez que los astronautas cenan comida festiva en el espacio exterior.
En un comunicado del 27 de noviembre, la NASA indicó que los astronautas en el transbordador espacial Endeavour comieron una comida de Acción de Gracias que consistía en pavo ahumado, batatas glaseadas, ejotes, champiñones, aderezo de pan de maíz y un postre de arándano y manzana.
«Ya sea que estés destinado en un desierto de Medio Oriente o en una nave espacial, es ese mismo anhelo por el hogar lo que te mantiene emocionalmente equilibrado», dijo Mackel. «Es un desafío que requiere una inmensa fuerza mental y concentración. Ambas ocupaciones, ser soldado o astronauta, son difíciles de comprender para cualquiera que no lo haya experimentado».
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