Los auditores del condado más grande de Arizona terminaron el miércoles un tercer conteo de las boletas electorales y pasarán a compilar un borrador del informe sobre los resultados de la auditoría.
Los trabajadores supervisados por el auditor retirado, Randy Pullen, expresidente del Partido Republicano de Arizona, completaron el tercer conteo en el edificio Wesley Bolin en los terrenos de la Feria Estatal de Arizona en Phoenix, según la presidenta del Senado de Arizona, Karen Fann.
«La contabilización física de las boletas se completó y será devuelta al condado de Maricopa mañana», dijo Fann a The Epoch Times por correo electrónico.
Los datos recogidos por los auditores se llevarán ahora a los laboratorios para su análisis.
Los equipos dirigidos por Cyber Ninjas, con sede en Florida, terminaron el mes pasado un primer recuento manual de las casi 2.1 millones de papeletas emitidas en las elecciones de 2020.
El tercer conjunto de números fue necesario porque el recuento inicial y el número que el condado de Maricopa informó no coincidían, dijo Fann a principios de este mes.
La Junta de Supervisores del Condado de Maricopa atacó repetidamente a los auditores y Jack Sellers, presidente de la junta, dijo que los métodos utilizados eran «defectuosos» y que «producirían resultados incorrectos».
En el tercer recuento, los trabajadores dirigidos por Pullen solo contabilizaron el número de boletas electorales, en lugar de marcar algunos o todos los votos como hicieron los auditores y el condado.
Este recuento se hizo por consejo del abogado de los republicanos del Senado de Arizona, según Fann.
La finalización del trabajo de auditoría física se produce después de días de tensión entre la compañía Cyber Ninjas y Ken Bennett, el exsecretario de estado republicano que había sido designado por Fann para servir como enlace entre la auditoría y el Senado estatal.
Bennett dijo el lunes que estaba considerando dimitir tras ser bloqueado por parte de la auditoría después de que compartiera algunos de los hallazgos de los auditores con analistas externos, poniendo en duda si el tercer recuento se hizo de forma independiente de Cyber Ninjas. El miércoles dijo al presentador de radio James Harris, que dimitirá a lo largo del día.
«Yo sigo bloqueado de la auditoría y, como tal, me es imposible funcionar realmente como enlace», añadió Bennet.
Bennett no respondió a una solicitud de comentarios. Más tarde dijo al Arizona Mirror que había llegado a un acuerdo con Fann para seguir siendo el enlace.
Mientras era entrevistado por Harris, Bennett se mostró abierto a ayudar a examinar el borrador del informe y el informe final, pero dijo que solo lo haría si tenía acceso a los datos de origen y a cualquier otra información utilizada para elaborar el informe.
«No puedo llegar en el último momento y que se me pida que respalde algo en lo que no puedo participar para construirlo realmente de la forma en que debe hacerse», añadió.
Fann dijo a The Epoch Times en un correo electrónico que los senadores no tienen acceso a las cifras que los auditores han contabilizado.
«Nosotros no deberíamos estar mirando por encima de su hombro, diciéndoles cómo hacer su trabajo o pidiendo información prematura. Cuando la auditoría esté completa, tendrán que proporcionarnos todas las pruebas y la documentación de sus resultados», dijo Fann.
En una declaración, la presidenta del Senado indicó que fue irresponsable por parte de Bennett revelar cuántas boletas electorales había en algunas de las cajas a un trío de analistas que han menospreciado repetidamente la auditoría.
No obstante, dijo que Bennett «participará y será una parte vital del borrador y de los informes finales para asegurar su exactitud con sus conocimientos y contribuciones a lo largo del proceso de auditoría».
La conclusión también se produjo después de que el Departamento de Justicia emitiera una nueva advertencia contra las auditorías como la realizada en Arizona, y después que los senadores de Arizona citaran al condado y a Dominion Voting Systems —cuyas máquinas utiliza el condado para celebrar las elecciones— para obtener más datos relacionados con las elecciones, incluidas las contraseñas administrativas de las máquinas.
Tanto los funcionarios del condado como Dominion se han negado a entregar más información, a pesar de que un juez dictaminó en febrero que las citaciones iniciales emitidas el año pasado eran legales.
Sin los datos adicionales, el informe final estará incompleto, dijo el senador estatal Warren Peterson, republicano, en una audiencia celebrada a mediados de julio.
«Nosotros sinceramente esperamos que el condado de Maricopa proporcione los documentos e información que faltan y que hemos solicitado para que la auditoría sea completada y finalizada. Los votantes merecen saber que sus votos están seguros, protegidos y contados legalmente», dijo Fann.
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