El presidente Joe Biden se reunirá la próxima semana con seis senadores del Partido Republicano en su intento de conseguir apoyo bipartidista para un amplio Plan de Empleo Americano y el paquete de «infraestructuras» de 2.25 billones de dólares, el que los republicanos tachan de ser hasta ahora demasiado caro y lleno de gastos no relacionados con el arreglo de carreteras y puentes del país.
Un funcionario de la Casa Blanca dijo a los periodistas el viernes que Biden se reunirá el jueves con los senadores Shelley Moore Capito (R-W.Va.), John Barrasso (R-Wyo.), Roy Blunt (R-Mo), Mike Crapo (R-Idaho), Pat Toomey (R-Pa) y Roger Wicker (R-Miss.).
«El presidente aprecia su compromiso y el diálogo en curso sobre esta alta prioridad y está deseando hablar con el grupo», dijo el funcionario, en un tono similar a cuando Biden agradeció a los republicanos por presentar una contrapropuesta a su plan de infraestructuras, al tiempo que pedía conversaciones bipartidistas y «discusiones profundas».
Moore Capito lideró a un grupo de republicanos del Senado en la presentación de una contrapropuesta de infraestructura de 568,000 millones de dólares al plan de Biden. En una conferencia de prensa el 22 de abril, la senadora dijo que el GOP define el concepto de manera más estrecha en la «infraestructura básica, infraestructura física». Ella compartió una visión general de la propuesta del GOP en un posteo en Twitter, en el que dijo que el plan de Biden «va más allá de lo que constituye infraestructura».
El gobierno de Biden trató de enmarcar la «infraestructura» de manera mucho más amplia, incluyendo las declaraciones de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), a los periodistas en una rueda de prensa el 15 de abril, en la que dijo que para que el Plan de Empleo de Estados Unidos cumpla sus objetivos, «hay que tener una infraestructura humana que lo acompañe”.
Pelosi estará entre los líderes del Congreso con los que Biden tiene previsto reunirse el miércoles, un día antes de que se reúna con los senadores republicanos. El funcionario de la Casa Blanca dijo que el presidente mantendrá una reunión con Pelosi, líder de la mayoría del Senado, con Chuck Schumer (D-N.Y.), líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.), y el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Ca.), para discutir su propuesta de 2.25 billones de dólares.
«Ellos dialogarán sobre las áreas políticas de mutuo acuerdo e identificarán los puntos comunes en los que pueden trabajar juntos y obtener resultados en los desafíos que enfrentan las familias estadounidenses», dijo el funcionario de la Casa Blanca.
McConnell criticó duramente el amplio plan de Biden, calificando el paquete de «legislación engañosa».
«La Casa Blanca agrupó un variado surtido de las prioridades más caras de la izquierda», dijo McConnell en el pleno del Senado el 13 de abril. «Menos del seis por ciento de esta propuesta se destina a carreteras y puentes. No está ni remotamente orientada a lo que los estadounidenses creen que obtienen cuando los políticos hacen campaña sobre infraestructura».
«Pero en lugar de presentar un proyecto de ley mejor, los demócratas decidieron que es el idioma inglés el que tiene que cambiar. Se están embarcando en una campaña orwelliana para convencer a todo el mundo de que cualquier política gubernamental puede ser etiquetada como infraestructura».
Biden y Moore Capito hablaron la semana pasada sobre infraestructuras, y la Casa Blanca dijo en una declaración a los periodistas que ambos «mantuvieron una conversación cálida y amistosa y continuaron su diálogo sobre infraestructura y empleo, reiterando su voluntad de negociar», y añadió que también hablaron de tener otra reunión en persona en un futuro próximo.
Los republicanos están luchando por reducir el paquete multimillonario que, según ellos, contiene disposiciones que tienen poco que ver con infraestructura. También se muestran con recelo de revertir los recortes fiscales de la era Trump, que es una característica clave del plan de Biden. Para pagar el plan de infraestructura, la Casa Blanca propone elevar la tasa del impuesto de sociedades desde el 21 por ciento actual al 28 por ciento.
Biden viajó el jueves al bastión republicano de Luisiana para vender su Plan de Empleo Estadounidense, al tiempo que señaló su disposición a retroceder en algunas de sus demandas.
«Estoy dispuesto a escuchar ideas de ambas partes», dijo Biden. «Estoy dispuesto a comprometerme. Lo que no estoy dispuesto es a no hacer nada», añadió el presidente.
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