El caso electoral federal del expresidente Donald Trump lleva 50 días en pausa mientras él apela ante una corte superior alegando que es inmune a ser procesado.
El 13 de diciembre de 2023, la jueza federal de distrito, Tanya Chutkan, dictó una pausa en el caso electoral en Washington y señaló, en al menos dos ocasiones, que la fecha del juicio de marzo, que se había programado el año pasado probablemente no se mantendrá. La jueza también detuvo la presentación de cualquier moción importante por parte de los abogados del presidente Trump y los fiscales federales.
El caso no se reanudará hasta que la Corte de Apelaciones del Circuito de Washington D.C. resuelva la cuestión de si el expresidente es inmune a un proceso penal. Sus abogados han argumentado que esto se debe a que su actividad después de las elecciones de 2020 fue parte de sus funciones oficiales.
Cuando la corte de apelaciones, que no ha indicado cuándo emitirá una orden, presente su decisión, es probable que el presidente Trump apele el asunto ante la Corte Suprema de Estados Unidos. Si eso sucede, no está claro cuándo se reanudará el caso electoral.
“El momento de la decisión del panel será de hecho un determinante crítico de si el caso puede avanzar rápidamente”, dijo esta semana a Politico Daniel Richman, profesor de derecho de la Universidad de Columbia, añadiendo que «aquí tendrían que alinearse bastantes estrellas antes de que el juicio pueda continuar».
Matthew Seligman, un exasistente legal de la corte de apelaciones, que presentó una moción judicial separada en el caso de inmunidad, dijo al medio de prensa que no está claro cuándo la corte de apelaciones de DC emitirá una decisión. No hay señales de que “estamos realmente cerca de un punto en el que los jueces en su mayoría considerarían tomar todas las medidas que pudieran (…) y no está claro cuáles son”.
La jueza de la Corte de Apelaciones de DC, Karen Henderson, jueza principal del panel, indicó que se oponía a acelerar el caso de inmunidad. Ella también tiene derecho a redactar la opinión mayoritaria si forma parte de la mayoría, ya que es la jueza de mayor rango del panel. Si ella no está de acuerdo con la mayoría, la jueza también podría retrasar el fallo durante semanas, señala el artículo.
Otra actividad
En enero, la jueza Chutkan indicó por segunda vez que existe una buena posibilidad de que la fecha del juicio de Trump se posponga para una fecha posterior. En un caso que involucra a un acusado del 6 de enero, ella programó su juicio para principios de abril.
El abogado especial Jack Smith, que presentó los cargos contra el expresidente, dijo que el juicio del presidente Trump probablemente tardará entre cuatro y seis semanas en completarse, lo que significa que la fecha del 4 de marzo muy probablemente se contrapondrá o incluso entraría en conflicto con la fecha del juicio del acusado por los eventos del 6 de enero.
Semanas antes de esa orden, la jueza de distrito de Estados Unidos escribió que la fecha del 4 de marzo estaba destinada a proporcionar tanto al equipo de Trump como al equipo de Smith más tiempo para prepararse. También adoptó las recomendaciones de los abogados del presidente Trump para evitar que tanto la defensa como la fiscalía emitan nuevas “mociones sustantivas previas al juicio sin pedir permiso primero a la corte” y que el expresidente “no pierde argumentos ni derechos al optar por no responder en este momento”.
La jueza Chutkan escribió en enero que el equipo de Trump podría presentar más objeciones a cualquier moción judicial reciente realizada por el fiscal especial, incluso si la Corte de Apelaciones de D.C. devuelve el caso a su jurisdicción.
Hace varias semanas, varios analistas legales dijeron que el inicio del juicio el 4 de marzo parece poco probable en ese momento. Uno de ellos, un exfiscal federal, indicó que parece poco probable que el juicio comience antes de las elecciones de noviembre de 2024, debido al proceso de apelación.
“Ese proceso llevará meses y, a menos que la jueza Chutkan levante la suspensión, existe la posibilidad de que el juicio de Trump no se lleve a cabo antes de las elecciones de noviembre. El otro juicio programado para abril es un reflejo de esa realidad”, dijo Neama Rahmani, directora de West Coast Trial Lawyers.
Los fiscales dieron a conocer en diciembre que el caso había sido suspendido, pero dijeron que el gobierno “continuaría cumpliendo con sus propios plazos determinados previamente” por la corte “para promover la pronta reanudación del cronograma previo al juicio” siempre y cuando el caso regrese a la jueza Chutkán.
El expresidente Trump está acusado de conspirar para anular las elecciones de 2020, lo que él ha negado con vehemencia. Es uno de los cuatro casos penales que enfrenta el candidato republicano mientras compite para regresar a la Casa Blanca este año.
El Sr. Trump se declaró inocente de los cuatro casos en su contra, argumentando que los cargos fueron presentados para denigrarlo políticamente.
También se enfrenta a una demanda civil presentada por la fiscal general de Nueva York, Letitia James, y recientemente un jurado le ordenó pagar a E. Jean Carroll 83 millones de dólares en un caso de difamación que la escritora presentó en su contra. El expresidente Trump también negó las acusaciones formuladas en este caso.
Con información de The Associated Press.
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