Lo último que deseamos hacer cuando nos duelen las articulaciones es ejercicios. De hecho, puede que ni queramos oír hablar de ello.
Pero ayuda. De hecho, podría ayudar más que nada.
Los ejercicios adecuados y realizados correctamente pueden ser la solución para cualquier tipo de dolor articular. Me refiero al tobillo, rodilla, cadera, hombro y codo. Y lo que funciona no tiene que ser especializado. El simple hecho de realizar más actividad puede aliviar el dolor y potencialmente retrasar o prevenir la necesidad de una cirugía.
Hay una advertencia sobre la efectividad del ejercicio, y es la consistencia. Si no es una parte regular de su vida, no hará mucho por usted. Esto puede ser un gran problema porque las partes más difíciles de una rutina de ejercicios son empezar y dedicar tiempo.
Para alcanzar su dosis diaria de ejercicio, necesitará un plan y un poco de motivación. Aquí hay cuatro maneras de ayudarle a incluir la actividad en su día para promover articulaciones más saludables y sin dolor.
Dedique tiempo: si pasa mucho tiempo frente al televisor, empiece a reemplazar algunos de sus programas de 30 minutos que no son tan agradables por el ejercicio. Si le gustan los canales deportivos, salga a caminar durante el programa previo al juego o en los descansos. También puede hacer ejercicio mientras los ve.
Si su día está muy cargado, piense en levantarse 30 minutos antes. Usar esa media hora extra puede darle algo de tiempo para levantarse y hacerlo, o al menos despejar algo de espacio más tarde durante el día. Si no puede juntar 30 minutos seguidos, divida el ejercicio en tres intervalos de 10 o dos de 15-15 minutos.
Elimine sus opciones: puede incorporar el ejercicio a su día eligiendo hacer algunos sacrificios. Comience a tomar escaleras en lugar de ascensores o escaleras mecánicas, por ejemplo. Bájese del autobús o del metro un par de paradas antes y camine el resto del camino. Camine para hacer los deberes a distancias razonables, o elija un espacio de estacionamiento que le permita caminar a varios lugares. Cuando hable por teléfono, camine alrededor, o realice movimientos como extensiones de tobillo.
Encuentre un compañero: hacer ejercicio con un compañero puede hacer que las cosas sean más agradables y que usted sea más responsable.
Encuentre alternativas: si el clima es un inconveniente, no tiene que hacer ejercicio al aire libre. Las personas que se sienten desanimadas por las temperaturas frías o húmedas pueden conducir hasta el centro comercial local para dar vueltas, encontrar un gimnasio cercano o tomar una clase de ejercicio.
La actividad tiene el potencial de aliviar el dolor en las articulaciones, ¡ahora y en el futuro!
Devon Andre tiene una licenciatura en ciencias forenses de la Universidad de Windsor en Canadá y un doctorado en derecho de la Universidad de Pittsburgh. Este artículo fue publicado por primera vez en Bel Marra Health.
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