Cuando ves a los demás felices, ¿cuál es tu reacción inicial? En tu mente, en tu corazón, ¿sientes verdadera felicidad por ellos o te sientes un poco intranquilo?
Por lo general, parece que puede ser difícil alegrarse por los demás, compartir sus alegrías, ser verdaderamente felices por los demás, incluso por los seres queridos, y hacerlo en serio.
Aunque puede ser difícil de admitir, la reacción negativa al ver las buenas noticias de otra persona es una manifestación de envidia, una emoción omnipresente que puede llevar a la propia amargura y sufrimiento en la vida. Si te dejas exasperar, puede que incluso te encuentre deseando el mal a los demás. El camino de la envidia es oscuro.
Aunque se siente como un instinto natural, con esfuerzo puedes dejar de lado la envidia. El resultado de tal esfuerzo es una sensación de ligereza, compasión y optimismo.
Aquí hay algunas formas de empezar a dejar la envidia
Reconocer la inspiración
La sola idea de que la buena noticia de alguien desencadena tu envidia puede enseñarte algo sobre ti. Ellos tienen o hacen algo, a lo que tú aparentemente aspiras. Esa puede ser información útil para tu vida.
Es más, te están mostrando que es posible. ¡Qué bien! En lugar de ceder a los sentimientos negativos hacia ellos, intenta agradecerles la inspiración y desearles un éxito aún mayor.
Celebrar la diversidad
Hoy en día se habla de la diversidad en muchos contextos, pero la verdadera diversidad de la experiencia humana existe entre todas las vidas individuales. Todos nacemos en circunstancias diferentes con características y personalidades, talentos y debilidades diferentes. La gran variedad que existe entre la humanidad es verdaderamente notable y maravillosa, algo que hay que celebrar.
Desde esta perspectiva, ver a los demás triunfar puede ser fácilmente recibido con una sensación de admiración, en lugar de desprecio. Esa es una parte de la historia de su vida, no de la tuya. Usted tiene su propio y único camino a seguir.
Encuentra compasión
Es difícil ser envidioso y compasivo al mismo tiempo. Mientras que la envidia está enraizada en el egoísmo, la compasión está enraizada en el altruismo.
La verdad sobre cada vida es que tiene sufrimiento. No conoces a nadie que no haya sufrido.
Cuando alguien experimenta alegría, éxito o bendiciones es algo que realmente se debe celebrar. Es probable que no sepas todo lo que superaron, el trabajo que hicieron, o los tiempos difíciles que pasaron. Tampoco puedes entender las inseguridades que sienten o los desafíos que enfrentan.
Si tu mente está enfocada en un sentido de injusticia o en por qué no tienes lo mismo, tus pensamientos están empantanados en el egoísmo. Estás pensando solo en ti.
En su lugar, elige animar a esta alma amiga que está disfrutando de algo bueno en esta vida. Puede que encuentres que ver la alegría en los demás puede traer un profundo caudal de alegría para ti.
Lo que sea, será
A veces en la vida puedes querer algo. Crees que tienes las habilidades y talentos necesarios y que debería ser tuyo. Sin embargo, no importa cuánto luches por ello, no lo consigues. Esto ocurre.
Por el contrario, a veces lo que termina siendo el aspecto más maravilloso de tu vida parece haber quedado en tu camino. Esto también sucede.
Aunque nos gustaría creer que nuestros esfuerzos son todo lo que se necesita para alcanzar nuestros objetivos, debemos reconocer que hay fuerzas más grandes en juego. Sus propios esfuerzos personales no siempre resultan de la manera que usted quiere o pueden resultar mejor de lo que usted podría haber imaginado. Permítase reconocer que no tiene el control total aquí.
El destino no está necesariamente en tus manos. Aflojar las riendas y tener fe en algo más grande puede ayudar a eliminar la amargura de la envidia.
Déjala ir
La envidia perjudica a las personas que la albergan, así como al entorno en el que vive y a los que te rodean. Es tóxico.
Si te encuentras sintiendo envidia, es maravilloso que la reconozcas. Eso muestra una gran sabiduría y objetividad. Ahora puedes intentar dejarla ir.
Sigue a Barbara en Twitter: @barbaradanza
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