La empresaria china Geng Xiaonan y su marido Qin Zhen, que han expresado públicamente su apoyo a los disidentes en China, fueron condenados a prisión tras ser declarados culpables de dirigir una operación comercial ilegal.
La pareja fue juzgada en un tribunal del distrito de Haidian, en Beijing, el 9 de febrero.
A los amigos no se les permitió entrar en la sala y asistir a la audiencia, según los tuits del periodista independiente de Beijing Gao Yu.
Ese mismo día, la policía impidió que el amigo íntimo de la pareja y exprofesor de la Universidad de Tsinghua, Xu Zhangrun, saliera de su casa o acudiera al tribunal.
En su declaración personal, Geng se declaró culpable y expresó su deseo de responder a todos los cargos presentados por la fiscalía.
El tribunal condenó a Geng a tres años de prisión y a Qin a dos años y medio con tres años de libertad condicional.
Gao comentó en su tuit que creía que Geng admitía su culpabilidad no por cobardía, sino para evitar implicar a sus seres queridos, a sus subordinados en el trabajo y a sus socios en dos editoriales independiente. Gao dijo que probablemente Geng quería asegurarse de que no se metieran en problemas durante el Año Nuevo Lunar, que este año cae el 12 de febrero y es tradicionalmente la fiesta de reunión de las familias chinas.
Cai Xia, exprofesor de la Escuela Central del Partido de Beijing, la principal escuela de formación de cuadros del Partido Comunista, y un reconocido disidente chino, cuestionó la decisión del tribunal en un tuit del 9 de febrero.
«Las autoridades [chinas] impidieron que sus amigos asistieran a la audiencia (…) a las pocas horas, el video grabado [de la audiencia] desapareció [de internet]. Por decirlo claramente, [las autoridades chinas] le impusieron una persecución política y al mismo tiempo temen que la atención mundial se centre en ella», observó Cai.
Geng es editora y artista. Ha sido una firme defensora de los disidentes chinos en las redes sociales y una vez dijo que eran héroes que contribuían a una China más democrática. Según Cai, Geng ha prestado ayuda financiera a muchas personas que se enfrentaban a acusaciones de las autoridades chinas, entre ellas Xu, y Bao Tong, exsecretario de política del difunto primer ministro chino Zhao Ziyang. También pidió la liberación del periodista ciudadano Chen Qiushi, que proporcionó reportes de primera mano sobre el brote de COVID-19 en Wuhan el año pasado.
El 9 de septiembre de 2020, Geng y su marido fueron detenidos por la policía en el distrito de Haidian. Sus amigos sospechan que fue detenida por su constante apoyo a los disidentes chinos.
El 21 de octubre, intelectuales chinos escribieron una carta abierta a los principales líderes chinos, pidiendo la liberación inmediata de Geng y su marido.
En la carta señalaban que la acusación de llevar a cabo una operación comercial ilegal era una acusación vaga que ahora utilizan las autoridades chinas para la persecución política de los defensores de los derechos humanos en la China empresarial.
El 12 de noviembre, el Committee of Concerned Scientists publicó otra carta abierta dirigida al líder chino Xi Jinping en un intento de presionar a las autoridades chinas para que liberen a la pareja.
El Committee of Concerned Scientists es un organismo independiente con sede en Washington formado por científicos, médicos, ingenieros y académicos dedicados a la protección y promoción de los derechos humanos y la libertad académica.
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