Un grupo de congresistas republicanos presentó conjuntamente una resolución en la que se pide a Estados Unidos que lidere un boicot internacional a los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022, a menos que se trasladen de China a otro lugar, debido a los amplios abusos de los derechos humanos cometidos por el régimen chino.
La resolución, presentada por los representantes Guy Reschenthaler (R.Pa.) y Michael Waltz (R-Fla.), y el principal republicano del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, John Katko (R-N.Y.), pide al Comité Olímpico Internacional (COI) que vuelvan a convocar los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022, que se celebrarán en Beijing, China.
(1/2) Today I introduced a resolution with @RepWaltzPress and @RepJohnKatko calling for the United States to lead an international boycott of the 2022 Winter Olympic Games if they are not moved out of Communist China.
— Rep. Guy Reschenthaler (@GReschenthaler) February 24, 2021
«Mientras el Partido Comunista Chino [PCCh] comete un genocidio contra los uigures musulmanes en Xinjiang, Estados Unidos, el Comité Olímpico Internacional y las naciones de todo el mundo tienen la responsabilidad de hacer que China rinda cuentas por sus atroces violaciones de los derechos humanos trasladando los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022 de Beijing», dijo Reschenthaler en un comunicado.
El Departamento de Estado en enero, bajo la administración de Trump, determinó que el trato del PCCh a los uigures y otras minorías étnicas en la región de Xinjiang equivale a un genocidio y a «crímenes contra la humanidad».
La medida se produce en medio de crecientes llamados en todo el mundo para que los Juegos de 2022 se trasladen fuera de China. Un grupo de senadores republicanos presentó una medida similar a principios de este mes, mientras que los gobiernos británico y canadiense también se enfrentaron a la presión de algunos políticos.
El secretario de Estado Antony Blinken se ha negado hasta ahora a comentar si Estados Unidos boicotearía los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022 en Beijing. Sin embargo, estuvo de acuerdo con la designación de genocidio, afirmando que «forzar a hombres, mujeres y niños en campos de concentración, tratando de reeducarles, en efecto, para que se adhieran al Partido Comunista Chino; todo eso habla de un esfuerzo por cometer un genocidio».
«Los países amantes de la libertad de todo el mundo deben unirse para condenar el comportamiento de China y mostrar al PCCh que Estados Unidos y la comunidad internacional no se quedarán de brazos cruzados mientras cometen atrocidades contra los uigures, los hongkoneses y otros disidentes chinos», dijo Reschenthaler.
Waltz dijo en un comunicado que la resolución demuestra que el PCCh debe rendir cuentas por sus «actos atroces», como el «genocidio en Xinjiang, la represión de los derechos democráticos de Hong Kong, la supresión de la libertad religiosa y el encubrimiento del brote de coronavirus en Wuhan».
«Dado que el COI se ha negado a trasladar los Juegos, no nos queda más remedio que llamar al boicot de los Juegos Olímpicos de Invierno en Beijing para enviar un mensaje claro al PCCH de que el mundo no recompensará su comportamiento atroz y temerario dándole una plataforma internacional prominente», dijo Waltz.
El COI, en una declaración anterior a The Epoch Times, dijo que su comisión de evaluación había «considerado las opiniones de las ONG independientes con respecto a una serie de cuestiones, incluidos los derechos humanos» al seleccionar a Beijing como sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022, y planteó las preocupaciones a las autoridades gubernamentales.
«Recibimos garantías de que los principios de la Carta Olímpica serán respetados en el contexto de los Juegos», añadió, y dijo que seguiría discutiendo «cuestiones relacionadas con los Juegos» con los organizadores.
Katko añadió que Estados Unidos «simplemente no puede de buena fe» participar en unos Juegos Olímpicos en un país que está cometiendo un genocidio, y «continuamente intenta manipular y mentir a la comunidad mundial al respecto».
«Durante demasiado tiempo, el Partido Comunista Chino se ha vuelto cada vez más audaz en sus esfuerzos por reprimir a su propio pueblo, convertir su sector privado en un arma para fines militares y de inteligencia, explotar los datos de los estadounidenses y manipular los mercados mundiales, lo que supone una clara amenaza para nuestra seguridad nacional y el modo de vida estadounidense. Es hora de que rindan cuentas», dijo Katko en un comunicado.
Y añadió: «Este concurso de larga duración entre naciones debería celebrarse en un país merecedor que realmente esté a la altura de los valores de la Carta Olímpica, y no en uno que socava descaradamente nuestros valores fundamentales».
Una coalición de más de 180 grupos, entre ellos la Red Internacional del Tíbet y el Congreso Mundial Uigur, firmaron una carta conjunta a principios de este mes en la que instaban a los gobiernos a boicotear los Juegos de 2022.
Con información de Cathy He.
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