Las sanciones del régimen chino contra la presidente y el vicepresidente de la Comisión de Libertad Religiosa Internacional de Estados Unidos (USCIRF) no acabarán con las críticas a la opresión que Beijing ejerce sobre millones de musulmanes uigures.
«Las sanciones sin fundamento del gobierno chino contra funcionarios estadounidenses y extranjeros, que defienden los derechos humanos y la libertad religiosa en China, son un intento de silenciar las crecientes críticas internacionales a sus políticas genocidas contra los uigures y otros musulmanes turcos de Xinjiang», afirmó la presidente del USCIRF, Gayle Manchin, en un comunicado del 29 de marzo. Xinjiang es una región del noroeste de China.
“Esta táctica no funcionará. USCIRF no será silenciado. No dejaremos de hablar en contra del genocidio y los crímenes de lesa humanidad que está llevando a cabo el gobierno chino”, dijo Manchin, quien es esposa del senador Joe Manchin (D-W.V.).
Manchin se refería a las sanciones anunciadas por el régimen chino la semana pasada en su contra y contra el vicepresidente de la USCIRF, Tony Perkins, así como contra otros funcionarios estadounidenses y canadienses.
Las sanciones prohíben que tanto la presidente Manchin como el vicepresidente Perkins viajen a la parte continental de China, Hong Kong y Macao, y hacen ilegal que las empresas chinas tengan cualquier tipo de relación con ellas o con las entidades que representan.
«Las sanciones sin fundamento del gobierno del Partido Comunista Chino son tácticas de intimidación que revelan que el régimen comunista está tratando de lavar su imagen ante la comunidad internacional, la cual ha denunciado sus políticas brutales y represivas hacia su propio pueblo», dijo Perkins en el comunicado.
«Hacemos un llamado a la comunidad internacional, especialmente a los aliados de Estados Unidos que comparten los mismos valores y principios universales fundamentales de libertad de religión o creencias y que creen en el estado de derecho, para que redoblen sus esfuerzos y se unan con el propósito de hacer frente a la China comunista», agregó Perkins.
Perkins también le pidió a Estados Unidos y a sus aliados que impongan sanciones coordinadas adicionales contra funcionarios del régimen chino que han actuado en contra de los, aproximadamente, 11 millones de uigures y otros musulmanes turcos que viven en Xinjiang.
Al hablar sobre los campos de trabajos forzados de China y sobre otras acciones represivas contra las minorías musulmanas, como una «campaña genocida» en Xinjiang, Perkins también pidió a la comunidad internacional que traslade o boicotee los Juegos Olímpicos que Beijing tienen previsto hacer en el 2022.
El ataque a Manchin y a Perkins por parte de Beijing se produjo después de una audiencia de la USCIRF, el 10 de marzo, que se centró en las empresas estadounidenses que se benefician o hacen uso del trabajo forzado impuesto a los uigures.
«Es prácticamente imposible que una empresa estadounidense se beneficie de la región uigur sin utilizar mano de obra forzada, lo que significa que todas las empresas que han optado por permanecer en la región uigur son cómplices del delito de trabajo forzado», declaró Scott Nova, director ejecutivo del Consorcio para los Derechos de los Trabajadores (WRC), en la audiencia del USCIRF.
Se calcula que la región uigur produce el 20 por ciento de la producción mundial de algodón, según los testigos de la audiencia, así como casi la mitad del polisilicio utilizado en los paneles solares. La región también produce grandes cantidades de tomates y productos a base de tomate, gran parte de los cuales son comprados e importados a Estados Unidos por empresas nacionales.
“Desde Target hasta Walmart, desde lululemon hasta Uniqlo, desde Amazon hasta Zara, la cadena de suministro de prácticamente todos los minoristas de marca que venden prendas de algodón pasa por la región Uyghur”, dijo Nova.
Durante la presidencia de Donald Trump, en junio de 2020, la USCIRF advirtió que la esterilización forzada de uigures por parte de China se constituía en una prueba de genocidio sistemático.
Perkins y Manchin intercambiaron cargos después del 20 de enero, cuando el exvicepresidente Joe Biden asumió como sucesor de Trump en la Casa Blanca.
El panel de libertad religiosa también emitió una declaración el 23 de marzo para apoyar las sanciones, en virtud de la Ley Magnitsky, de Estados Unidos, y de otros países, contra los funcionarios chinos Wang Junzheng, secretario del Cuerpo de Producción y Construcción de Xinjiang (XPCC), y Chen Mingguo, director de la Oficina de Seguridad Pública de Xinjiang. (XPSB), quienes cometieron atroces violaciones a la libertad religiosa contra los uigures y contra otros musulmanes que residen en la región.
Se puede contactar al corresponsal del Congreso Mark Tapscott en [email protected]
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.