Una investigadora de la Universidad de Stanford ha sido acusada de mentir y destruir pruebas sobre su condición de miembro del ejército chino.
Song Chen, una investigadora médica visitante de la universidad de 39 años, fue acusada el pasado mes de julio por mentir supuestamente en una solicitud de visado sobre su pertenencia al Ejército Popular de Liberación (EPL). El 18 de febrero, un gran jurado federal emitió una acusación ampliada en la que se acusaba a Song de fraude en la obtención de visados, obstrucción a la justicia, destrucción de documentos y de mentir a los investigadores federales.
La solicitud de visado de Song en 2018 decía que era una neuróloga que venía a Stanford para realizar investigaciones relacionadas con enfermedades cerebrales. Reveló que sirvió en el ejército chino desde septiembre de 2000 hasta junio de 2011, y que su actual empleador era un hospital de Beijing llamado «Xi Diaoyutai». Los fiscales dijeron que esto era en realidad una tapadera que encubría al verdadero empleador de Song, el Hospital General de la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación (PLA) en Beijing.
«Alegamos que mientras Chen Song trabajaba como investigadora en la Universidad de Stanford, era secretamente un miembro del ejército chino», dijo en un comunicado el fiscal federal David L. Anderson para el Distrito Norte de California.
Los fiscales dijeron que las búsquedas en internet revelaron documentos de investigación que mostraban la afiliación de Song al hospital, páginas web que enumeraban su empleo allí y una foto de Song con uniforme militar.
El agente del FBI Craig Fair dijo que la investigación también encontró que Song «tomó medidas activas para destruir las pruebas de su afiliación oficial con el ejército chino, incluyendo sus credenciales actuales del EPL que la mostraban con uniforme militar».
La acusación decía que después de que Song se enterara de la detención de otro supuesto militar chino encubierto a principios de junio de 2020, intentó borrar una carpeta de documentos en un disco duro externo relacionados con su servicio militar y el fraude de visados. Esto incluía una imagen de sus credenciales del EPL de julio de 2016 a julio de 2020, que contenía una foto de Song con uniforme militar y una copia de su curriculum, que indicaba que su empleador era el Hospital General de la Fuerza Aérea, dice el documento judicial.
También incluía una carta de Song al consulado chino en Nueva York en la que escribía que su empleador «Hospital Xi Diaoyutai» era una fachada falsa. También afirmaba que había obtenido la aprobación de las Fuerzas Aéreas del EPL para prolongar su estancia en Estados Unidos. La aprobación era clasificada, por lo que no pudo enviar los documentos por correo electrónico, según la acusación.
Los fiscales dijeron que Song mintió sobre su actual afiliación al EPL cuando fue interrogada por el FBI en julio de 2020. Después de que Song se enterara del interés del FBI en ella, la información que conectaba a Song con el EPL o con el Hospital General del Ejército del Aire empezó a desaparecer de internet, según los fiscales.
Song también borró de forma selectiva los correos electrónicos de una cuenta de Hotmail que contenían detalles de su servicio militar, su empleo y sus afiliaciones después de ser acusada el pasado julio, según la acusación.
Está previsto que Song comparezca de nuevo ante el tribunal el 7 de abril. Si es declarada culpable, se enfrenta a hasta 10 años de prisión y una multa de 250,000 dólares por el fraude de visados; hasta 20 años de prisión y una multa de 250,000 dólares por cada uno de los cargos de obstrucción y alteración; y hasta cinco años de prisión y una multa de 250,000 dólares por el cargo de declaraciones falsas.
La acusada forma parte del grupo de seis investigadores señalados por los fiscales federales el año pasado por mentir supuestamente sobre sus vínculos con el ejército chino en sus solicitudes de visado, según el Departamento de Justicia. En uno de los casos, el departamento alegó que un oficial del EPL recibió el encargo de sus supervisores en China de obtener información que beneficiara a las operaciones militares. En otro, los fiscales acusan a un investigador médico del EPL de recibir órdenes de observar las operaciones de laboratorio en una universidad estadounidense para poder reproducirlas en China.
Las investigaciones sobre estos investigadores llevaron a que más de 1000 investigadores vinculados a los militares abandonaran Estados Unidos el año pasado, según un alto funcionario del departamento de justicia.
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