El gobierno de Estados Unidos rechazó recientemente las solicitudes de visas de más de 500 estudiantes chinos de ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (CTIM) para estudiar en las principales universidades estadounidenses por motivos de seguridad, según reportaron los medios de comunicación chinos. La noticia ha suscitado un debate en las redes sociales chinas y los internautas afirman que la mayoría de los solicitantes de visados de estudiante proceden de universidades chinas que tienen vínculos con el ejército chino.
El 7 de julio, el periódico estatal chino China Daily reportó que la embajada y los consulados de Estados Unidos denegaron los visados a por lo menos 500 estudiantes chinos que se especializan en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas por violar la Sección 212(f) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad de Estados Unidos y la Proclamación Presidencial 10043.
La sección 212(f) otorga al presidente de Estados Unidos la facultad de denegar la entrada a extranjeros o a personas no estadounidenses que se consideren perjudiciales para los intereses de Estados Unidos. Basándose en ese estatuto, el expresidente Donald Trump emitió la Proclamación 10043 el 29 de mayo de 2020, titulada «Suspensión de entrada como inmigrantes y no inmigrantes de ciertos estudiantes e investigadores de la República Popular China», en respuesta al robo tecnológico por parte de China a través de sus investigadores y estudiantes en universidades e institutos de investigación estadounidenses.
Los solicitantes de visado son todos estudiantes de posgrado que han sido aceptados por universidades estadounidenses —entre ellas la Universidad de Harvard, la Universidad de Yale, la Universidad de California en Berkeley, el Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Universidad Johns Hopkins— para estudiar un doctorado o una maestría en Estados Unidos, según el China Daily. La mayoría de ellos estudian ingeniería, informática, química, ciencia de los materiales, biomedicina y otros programas científicos.
Tras la denegación de sus solicitudes de visado, más de 500 estudiantes chinos firmaron una carta que circuló por las redes sociales chinas, en la que pedían al gobierno estadounidense que resolviera la llamada «discriminación y supresión» de los estudiantes chinos.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China respondió a la cuestión de los visados de los estudiantes expresando su «grave preocupación» y ha presentado serias protestas al gobierno estadounidense, dijo el portavoz Zhao Lijian en una rueda de prensa el 6 de julio.
La noticia provocó un acalorado debate en las redes sociales chinas. Algunos internautas señalaron que todos estos estudiantes se graduaron de las siete principales universidades chinas afiliadas al ejército chino, conocidas como las «7 de la Defensa Nacional», y dijeron que todos ellos van a regresar a China después de estudiar en Estados Unidos. En cambio, muchos graduados de destacadas universidades no afiliadas al ejército, como la Universidad de Tsinghua y la Universidad de Beijing, no tuvieron problemas para obtener visados para estudiar en Estados Unidos.
Algunos internautas dijeron: «El número real de estos estudiantes chinos de CTIM debe ser varias veces mayor. Los 500 son solo el número que se ha dado a conocer. Debe haber miles de esos estudiantes que fueron reasignados o no firmaron la carta».
Preocupaciones sobre la seguridad
Al gobierno estadounidense le preocupa que algunos ciudadanos chinos se hagan pasar por estudiantes para entrar en el país con el fin de llevar a cabo actividades de espionaje y robo de propiedad intelectual. Puede ser difícil distinguir a los agentes chinos de los verdaderos estudiantes chinos en el extranjero.
El director del Buró Federal de Investigaciones de Estados Unidos, Christopher Wray, advirtió en una audiencia en el Senado que los espías académicos chinos se están infiltrando en todo Estados Unidos para robar ciencia y tecnología y suponen una amenaza para la sociedad estadounidense.
Joe Augustyn, exfuncionario de la CIA, también declaró que las agencias de inteligencia del Partido Comunista Chino (PCCh) utilizan a algunos miembros de la población estudiantil china para infiltrarse en las universidades y empresas estadounidenses para realizar espionaje económico. Augustyn dijo que el régimen chino recluta a estudiantes chinos para que actúen como «agentes de acceso» o «influenciadores encubiertos» en los campus de las escuelas estadounidenses. Una vez que las operaciones son expuestas, el régimen podría separarse (la agencia de inteligencia del PCCh) de los estudiantes y negar su participación.
La Administración Biden declaró el 27 de abril que relajaría las restricciones a las visas establecidas por la Administración Trump para los estudiantes chinos y de otros países que estudian en Estados Unidos este otoño.
Sin embargo, desde el anuncio, a algunos estudiantes y académicos chinos se les denegó el visado a Estados Unidos. En mayo, la embajada estadounidense rechazó la solicitud de visa de una estudiante china porque su padre trabaja como empleado de seguridad en China. Poco después, la Embajada de Estados Unidos emitió una carta de decisión en la que confirmaba las instrucciones del secretario de Estado de Estados Unidos de dejar de expedir visas a los cónyuges e hijos de los empleados activos de la Administración de Inmigración, el Ministerio de Seguridad del Estado y el Ministerio de Seguridad Pública de China, debido a los abusos de los derechos humanos del régimen y a la infiltración en otros países.
En junio, un estudio independiente encuestó a 310 estudiantes chinos a los que se les denegó el visado para entrar en Estados Unidos. El informe descubrió que la mayoría de los estudiantes estudiaban en escuelas chinas vinculadas al ejército chino y que participaban en proyectos de defensa nacional, como la Universidad de Aeronáutica y Astronáutica de Beijing, el Instituto de Tecnología de Beijing, el Instituto de Tecnología de Harbin, la Universidad de Ingeniería de Harbin, la Universidad Politécnica del Noroeste, la Universidad de Aeronáutica y Astronáutica de Nanjing, la Universidad de Ciencia y Tecnología de Nanjing y la Universidad de Correos y Telecomunicaciones de Beijing.
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