El Dr. Scott Atlas, exasesor de la Casa Blanca en materia de COVID-19, ve múltiples razones para investigar al Dr. Anthony Fauci, director saliente del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID, por sus siglas en inglés).
Esta investigación ha estado en conversaciones a medida que los republicanos se acercan a una mayoría en la Cámara de Representantes que les otorgaría poderes de citación. Algunos legisladores del Partido Republicano han acusado a Fauci de desempeñar un papel en el engaño del público sobre los orígenes del COVID-19 y de apoyar mandatos por la pandemia que califican de draconianos.
Aunque Atlas, un crítico declarado del jefe del NIAID, es «muy escéptico» en cuanto a que una investigación como ésta pueda librarse de la política o de la percepción de que es política, cree que está justificada. El cambio de postura de Fauci respecto a ciertas políticas por el COVID-19 debe ser puesto en evidencia, dijo Atlas recientemente en el programa Newsmakers de EpochTV.
«Hay que sacar a la luz pública, de forma real y clara, lo que ha ocurrido exactamente», dijo Atlas, investigador principal de política sanitaria en la Hoover Institution y colaborador de The Epoch Times.
«Personalmente, soy muy escéptico en cuanto a que una investigación política, independientemente de quién la haga, vaya a hacerse sin política, o si va a ser percibida como no política. No confío en absoluto en la gente del gobierno. No merecen que se confíe en ellos, que sean objetivos», dijo en el programa Newsmakers de EpochTV.
«¿Cuál fue la motivación para cambiar varias veces de política?», dijo, refiriéndose al cambio de postura de Fauci sobre el cierre de escuelas por la pandemia, que suscitó críticas a finales de 2020.
Además, cuestionó si hubo algún «encubrimiento» de la financiación de los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) en la división de Fauci, y citó como ejemplo las adjudicaciones al Instituto de Virología de Wuhan a través de la organización sin ánimo de lucro neoyorquina EcoHealth Alliance.
La EcoHealth Alliance, que sigue recibiendo millones de subvenciones de los NIH, fue objeto de escrutinio por parte de múltiples agencias federales por su asociación con el laboratorio de Wuhan. A finales de 2020, la Oficina de Investigaciones del Departamento de Salud y Servicios Humanos abrió brevemente una investigación sobre un presunto «fraude importante contra Estados Unidos». La investigación se cerró en enero de 2021, según documentos internos donde los motivos del cierre estaban tachados. La acusación afirmaba que «el virus del COVID-19 se generó en… China con la ayuda de una subvención de los NIH».
A partir de 2014, EcoHealth recibió una subvención de 3.7 millones de dólares para estudiar los coronavirus de los murciélagos en China. Esa subvención se renovó hasta 2019, pero se suspendió en 2020 debido a problemas de cumplimiento. En agosto, los NIH pusieron fin a la financiación de la subvención para las instalaciones de Wuhan después de que el laboratorio rechazara al menos dos veces la solicitud de los NIH de cuadernos de laboratorio y archivos originales de la investigación.
«No podemos permitir que la ciencia estadounidense financie investigaciones ilegales fuera del país» evitando o eludiendo las normas, dijo Atlas.
«Estos puestos de liderazgo conllevan una enorme responsabilidad. No es un juego estar a cargo de las cosas», dijo. «No se supone que lo utilices para eludir las normas. No se supone que se establezca el poder, amigos en los medios de comunicación para que te cubran. No, tienes que responder al menos a las preguntas ante el pueblo estadounidense».
Del mismo modo, la responsabilidad de los líderes de China, el punto de origen del virus, debería ser una cuestión de rutina, según Atlas.
Además de admitir con retraso la gravedad del brote ante el mundo durante los primeros días de la pandemia —comportamiento que Atlas calificó de «inaceptable»— Beijing ha «bloqueado las investigaciones reales» y «destruido las pruebas de lo ocurrido», dijo.
«Por supuesto que tienen que rendir cuentas», dijo. «Tiene que hacerlo, sin embargo, un gobierno y varios gobiernos que realmente tengan la credibilidad y el enfoque ético para hacerlo, y creo que eso está por ver».
El congresista James Comer (R-Ky.), miembro principal del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, ha prometido convocar a Fauci cuando los republicanos del Comité investiguen los orígenes del COVID-19 si ganan la Cámara.
«¿Por qué mintió el Dr. Fauci durante tanto tiempo sobre el hecho de que el dinero de los contribuyentes estadounidenses, a través de EcoHealth Alliance, se destinaba a financiar la investigación sobre la ganancia de función? ¿Por qué mintió sobre la investigación de ganancia de función realizada en el laboratorio de Wuhan? ¿Por qué estábamos en el laboratorio de Wuhan? Hay muchas preguntas a las que los estadounidenses merecen respuestas», declaró Comer recientemente al programa «Capitol Report» de NTD news, un medio de comunicación asociado a The Epoch Times.
«El pueblo estadounidense merece respuestas y cualquiera que haya participado en cualquier tipo de encubrimiento. Deben rendir cuentas».
The Epoch Times ha solicitado los comentarios del NIAID.
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