Los registros de visitantes de la Casa Blanca muestran que un asistente del fiscal especial Jack Smith se reunió discretamente con la oficina del fiscal de la Casa Blanca apenas unas semanas antes de la impugnación al presidente Donald Trump por cargos relacionados al manejo de documentos clasificados.
Los registros de visitas revisados por The Epoch Times muestran que Jay Bratt, un fiscal del equipo del Sr. Smith, se reunió con Caroline Saba, subjefa de personal de la oficina del consejero de la Casa Blanca del presidente Joe Biden, el 31 de marzo.
Si bien los registros no brindan detalles sobre el tema de la reunión o lo que se discutió, han surgido preguntas sobre por qué un miembro del equipo de Smith se reuniría con la oficina del abogado de la Casa Blanca mientras se encontraba en medio de una investigación sobre el presidente Trump, quien es el principal rival del presidente Biden en la carrera presidencial de 2024.
Rudy Giuliani, quien alguna vez fue fiscal federal, le dijo al New York Post que «no existe ningún propósito legítimo para que un funcionario [del Departamento de Justicia] se reúna con la Casa Blanca, excepto si está coordinado por los niveles más altos».
Giuliani agregó que cree que la reunión fue para coordinar el procesamiento a Trump, quien fue acusado formalmente unas nueve semanas después de cargos criminales que incluyen retener ilegalmente secretos de defensa nacional en su casa de Mar-a-Lago.
Ni la Casa Blanca ni el Departamento de Justicia (DOJ) respondieron a una solicitud de The Epoch Times para obtener más detalles sobre la reunión, en particular sobre lo que se discutió.
Misteriosa reunión
Si bien el tema de la reunión sigue siendo un misterio, tuvo lugar varios días después de que un juez designado por Obama le ordenara al abogado de Trump, Evan Corcoran, testificar ante un gran jurado en la investigación de Smith sobre los documentos en poder del expresidente en su casa de Mar-a-Lago, en Florida.
El equipo de Smith había prevalecido en su intento de obtener más testimonios de Corcoran después de que la jueza principal Beryl Howell rechazara las reclamaciones de privilegio abogado-cliente que Corcoran planteó durante una comparecencia ante un gran jurado en Washington, en enero.
Aproximadamente nueve semanas después de que Bratt se reuniera con Saba en el ala oeste, Smith acusó al 45° presidente de 37 cargos, incluida la retención intencional de documentos clasificados, la obstrucción a la justicia y la realización de declaraciones falsas.
El 13 de junio, el presidente Trump se declaró inocente de los 37 cargos, incluidas presuntas violaciones a la Ley de Espionaje, que penaliza la posesión no autorizada de información de defensa.
Giuliani comentó más sobre la reunión del 31 de marzo entre Bratt y Saba, diciendo que cree que demuestra que el Departamento de Justicia se ha convertido en un arma política por parte del presidente Biden.
«Es un fiscal estatal de Biden y un policía estatal de Biden», dijo Giuliani.
Ni el Departamento de Justicia ni la Casa Blanca respondieron a una solicitud de comentarios sobre los comentarios de Giuliani.
Por su parte, el presidente Trump recurrió a Truth Social el sábado para publicar un video que retrata las diversas acusaciones en su contra como parte de un golpe político y una «cacería de brujas».
«Actuando como un dictador corrupto del tercer mundo, Biden ha desatado a un grupo de burócratas gubernamentales sin escrúpulos que controla para que actúen como lobos rabiosos y ataquen su mayor amenaza, lanzando una de las mayores cacerías de brujas de la historia», dice el narrador en el vídeo, mientras en la pantalla aparecen imágenes de los fiscales involucrados en las distintas acusaciones, incluido el Sr. Smith.
El vídeo sugiere entonces que las distintas acusaciones están teniendo el efecto contrario al supuestamente previsto, es decir, aumentar la popularidad del presidente Trump en las encuestas.
En una publicación de seguimiento, el presidente Trump citó una encuesta de Reuters/IPSOS que lo muestra aventajando al gobernador de Florida, Ron DeSantis, por casi 40 puntos porcentuales para la nominación presidencial republicana y 6 puntos por delante del presidente Biden en un enfrentamiento hipotético.
«Oh, no, estoy liderando por 6, 7 y 8 en varias encuestas sobre el corrupto Joe Biden. ¡Eso casi garantiza otra acusación!» El presidente Trump bromeó en una publicación del sábado en Truth Social.
Caso de documentos clasificados
Inicialmente, Smith acusó al presidente Trump el 8 de junio de docenas de cargos relacionados con acusaciones de que guardaba secretos de defensa nacional en su residencia de Florida.
Más tarde, el 27 de julio, el equipo del Sr. Smith acusó al presidente Trump en una imputación actualizada (pdf) de conspirar con su personal para eliminar algunas imágenes de seguridad para que el gran jurado del caso no viera todas las pruebas.
Carlos De Oliveira, miembro del personal de Mar-a-Lago, fue nombrado tercer acusado en la acusación formal sustitutiva, junto con el asistente de Trump, Walt Nauta, y el excomandante en jefe.
El presidente Trump ha dicho que utilizó su autoridad presidencial para desclasificar todos los documentos relevantes en el caso en su contra y ha negado haber ocultado algún material al gobierno.
Después de que se anunciaron los nuevos cargos, el expresidente recurrió a su plataforma de redes sociales para negarlos y calificó la nueva acusación del Sr. Smith como una «mentira» que equivale a una interferencia electoral antes de las elecciones de 2024.
«¡Las cintas de seguridad que se eliminaron fueron una mentira inventada por el trastornado Jack Smith! Interferencia electoral», escribió el presidente Trump en una publicación en Truth Social el 1 de agosto.
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