Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de EE. UU. se prepararon para alertar a los funcionarios estatales y locales de una conexión emergente entre la inflamación del corazón y las vacunas contra el COVID-19, pero finalmente no enviaron la alerta, según un nuevo documento obtenido por The Epoch Times.
Las cuatro vacunas contra el COVID-19 que están o han estado disponibles en Estados Unidos pueden causar la inflamación del corazón, o miocarditis, según estudios, expertos y organismos como los CDC. Los primeros casos se notificaron poco después de que las vacunas estuvieran disponibles a finales de 2020.
Los CDC envían alertas a funcionarios de salud pública federales, estatales y locales y a médicos de todo el país a través de un sistema llamado Red de Alerta Sanitaria (HAN, por sus siglas en inglés). Los mensajes a través del sistema transmiten «información sanitaria vital», según los CDC.
En mayo de 2021, los funcionarios de los CDC redactaron un borrador de alerta sobre la miocarditis y las dos vacunas contra el COVID-19 más utilizadas, según el documento recién obtenido, hecho público por primera vez por The Epoch Times.
«Este es el borrador más reciente de una alerta tal y como se ha discutido. Encantado de discutirlo», dijo el Dr. Demetre Daskalakis, máximo responsable de los CDC para la equidad en los datos y la participación de COVID-19, a otros dos colegas de alto rango de los CDC en el correo electrónico.
Se titulaba «borrador de alerta sobre miocarditis y vacunas de ARNm».
Las vacunas de Pfizer-BioNTech y Moderna se fabrican con tecnología de ARN mensajero modificado (ARNm).
El proyecto de alerta se adjuntó al correo electrónico. The Epoch Times está trabajando para adquirir el proyecto de alerta.
«Esta censura de una alerta propuesta en mayo de 2021 es sólo un ejemplo más del patrón de comportamiento repetido de nuestras agencias reguladoras para censurar cualquier información que sirva para contrarrestar la narrativa de que las vacunas contra el COVID-19 son ‘seguras y eficaces'», dijo el Dr. Joel Wallskog, copresidente del grupo de defensa de personas lesionadas por vacunas React19, a The Epoch Times por correo electrónico.
Los CDC comenzaron a recibir informes de miocarditis postvacunación en enero de 2021 y no detectaron o ignoraron una señal de seguridad para la miocarditis y las vacunas de ARNm al mes siguiente, según mostraron reportes anteriores de The Epoch Times. La agencia también ocultó una advertencia de Israel, el país que vacunó por primera vez a los jóvenes, que se enfrentan al mayor riesgo de miocarditis por la vacunación contra el COVID-19.
Los CDC y otras agencias tampoco han revelado repetidamente otra información que socava su promoción de las vacunas, incluido el número de casos de COVID-19 entre los vacunados.
El correo electrónico recientemente revelado tiene fecha el 21 de mayo de 2021. Eso es tres días antes de que un grupo de trabajo de los CDC reconociera por primera vez que el número de casos de miocarditis registrados después de la vacunación contra el COVID-19 era mayor de lo esperado, y una semana antes de que los CDC dijeran que seguían recomendando que prácticamente todos los estadounidenses de 12 años en adelante recibieran la vacuna.
El Dr. Daskalakis y sus dos colegas, los doctores Henry Walke y John Brooks, respondieron a las peticiones de comentarios a través de un portavoz.
«Los CDC utilizan diversos medios para informar al público de los posibles problemas de seguridad de las vacunas. Una HAN es un método», dijo el portavoz. En última instancia, la agencia optó por publicar en mayo de 2021 un documento denominado «consideraciones clínicas», en el que se afirmaba que se había registrado un mayor número de casos de miocarditis tras la vacunación con ARNm, pero se hacía hincapié en que los CDC seguían recomendando la vacunación para prácticamente todas las personas mayores de 11 años.
La oficina de medios de comunicación de los CDC no quiso explicar cómo se aseguraron de que las mismas personas que habrían recibido una HAN vieran el documento.
«La consideración clínica llegó al mismo público que la HAN», alegó un portavoz. «Una consideración clínica es útil cuando es necesario actualizar la información a medida que evolucionan las circunstancias y se recopilan y evalúan más datos».
¿Doble estándar?
La Red de Alerta Sanitaria lleva enviando mensajes al menos desde 2001, según un archivo de alertas. Los CDC afirman que la red es el «principal método de la agencia para compartir información clara sobre incidentes urgentes de salud pública con funcionarios de información pública, profesionales de la salud pública federales, estatales, territoriales y locales, médicos y laboratorios de salud pública».
Los CDC emitieron una alerta el 8 de enero de 2020, para lo que se conoció como COVID-19, proporcionando varias actualizaciones en los meses siguientes sobre la enfermedad. La agencia también compartió alertas sobre las pruebas por COVID-19, los viajes en cruceros y una enfermedad rara llamada MIS-C vinculada al COVID-19.
La primera alerta relacionada con las vacunas contra el COVID-19 se emitió el 13 de abril de 2021. Fue por una combinación de coagulación de la sangre y niveles bajos de plaquetas después de la vacunación de Johnson & Johnson.
El mensaje señalaba que se habían producido seis casos de la combinación de afecciones, trombosis del seno venoso cerebral (TTS), en mujeres después de recibir la vacuna y que una había fallecido. Las autoridades aconsejaron a médicos y funcionarios que dejaran de administrar la vacuna mientras se realizaba una revisión de su seguridad.
Un mes más tarde, los funcionarios de los CDC consideraron la alerta para las vacunas contra el COVID-19 y la miocarditis. Para entonces, se habían notificado cientos de casos en Israel, Estados Unidos y otros países, incluidas dos muertes en Israel y otras en Estados Unidos.
«Es un doble estándar», declaró a The Epoch Times la doctora Tracy Hoeg, epidemióloga residente en California y una de las primeras expertas estadounidenses en cuestionar la narrativa de los CDC sobre la miocarditis postvacunación. «¿Por qué iban a emitir uno para la vacuna J&J para los coágulos de sangre pero no para la miocarditis posvacunación ARNm? Teníamos datos de nuestro propio Departamento de Defensa en ese momento que indicaban que era una señal de seguridad real y ya se habían notificado dos casos mortales de miocarditis posvacunación de Pfizer en Israel».
El Dr. Hoeg dijo que los funcionarios de los CDC implicados en el proyecto deberían testificar.
«Creo que va a ser crucial averiguar quién decidió que la alerta no debía enviarse después de todo, cuando aparentemente ya la habían redactado», dijo el Dr. Hoeg. «Estaría bien que una de las personas incluidas en el correo electrónico testificara ante el Congreso sobre cómo se determinó que la alerta sobre la miocarditis posvacunación ARN no debía publicarse».
El Subcomité Selecto sobre la Pandemia de Coronavirus de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, que está investigando la respuesta estadounidense a la pandemia, no quiso hacer comentarios.
Los CDC enviaron posteriormente múltiples alertas animando a la vacunación contra el COVID-19. Ninguna mencionaba la miocarditis.
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