Mercedes Shlapp, exdirectora de comunicaciones estratégicas de la Casa Blanca durante la administración Trump (2017-2019) habló en una entrevista reciente sobre el acercamiento que ha tenido la administración Biden a las dictaduras en Latinoamérica y las repercusiones que esto trae para Estados Unidos.
Esto luego de la reciente visita de una delegación estadounidense a Cuba, que estuvo encabezada por la subsecretaria adjunta para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de EE. UU., Emily Mendrala, para hablar asuntos relacionados con la migración ilegal.
“Yo creo que el presidente Biden, su plan es negociar con estas dictaduras. Él piensa que con negociar con estas dictaduras, podemos ver un cambio en estas naciones, pero como hemos visto en la historia, como han visto en el pasado, cuando hay estos tipos de negociaciones, no hay cambio que beneficia al pueblo de ese país, como en el caso de Venezuela”, dijo Shlapp a The Epoch Times durante una entrevista reciente en la primera edición de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) en México.
Shlapp dijo que Biden ha lanzado “una guerra” en contra de la industria energética de Estados Unidos.
El presidente Joe Biden, en su primer día en la Casa Blanca, firmó una orden ejecutiva para revocar el permiso del presidente Donald Trump para el oleoducto Keystone XL para el suministro de petróleo y además prácticas restrictivas a las empresas petroleras.
Schlapp señaló que ese “ha sido un problema muy grande”. “Porque ahora lo que estamos viendo es que no tenemos los recursos y ha causado un aumento de precios en la gasolina y en el petróleo, y él está buscando otra manera de traer esos recursos a Estados Unidos y está pensando en usar Venezuela” como uno de los países que puedan traer petróleo a EE. UU., dijo.
La exdirectora de la Casa Blanca dijo que esto no tiene sentido porque “Estados Unidos tiene tantas riquezas [en cuanto a] los recursos energéticos que no estamos utilizando en este momento”.
Este sábado la administración Biden autorizó a la empresa petrolera estadounidense Chevron a reanudar sus operaciones de extracción en Venezuela, tras la reanudación el mismo día de los diálogos entre la oposición venezolana y el régimen en la Ciudad de México. Esta medida, según el Departamento del Tesoro, refleja la política de largo plazo de Estados Unidos “de proporcionar un alivio de sanciones específico basado en pasos concretos que rebajan el sufrimiento del pueblo venezolano y apoyan la restauración de la democracia”.
Respecto a las consecuencias que podría tener el acercamiento de Biden y su administración a las dictaduras de la región, Shlapp dijo que “creo que es [muy] problemático para lo que es lo que estamos viendo en la región”, y citó los resultados de las últimas elecciones en Brasil, como uno de los ejemplos.
“Yo creo que significa que estamos viendo muchos de estos países latinoamericanos yéndose a la izquierda, con gobiernos socialistas, con gobiernos donde le están quitando las libertades al pueblo. Y Joe Biden no tiene una buena respuesta—él se ve como un presidente débil”.
Shlapp dijo que esa postura débil de Biden, la están viendo los líderes de estados totalitarios como Vladimir Putin de Rusia y el líder chino Xi Jinping.
“Ellos también saben que en este momento Estados Unidos no está en una posición fuerte para poder negociar o poder hablar fuertemente contra estas dictaduras”.
Con información de EFE.
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