Ciudadanos chinos hablaron recientemente con The Epoch Times sobre cómo el brote del nuevo coronavirus en Wuhan, el epicentro del brote del virus en China, ha empeorado en parte por las decisiones tomadas en una fábrica de acero estatal.
Situada dentro del distrito de Qingshan (una zona industrial alejada del centro de la ciudad) se encuentra la Corporación de Hierro y Acero de Wuhan (WISCO), de propiedad estatal, subsidiaria de uno de los mayores fabricantes de acero de China, el Grupo de Acero Baowu.
Baowu tiene su sede en Shanghai, pero cuenta con muchas empresas subsidiarias en todo el país, incluidas las de Shanghai, Xinjiang, Guangdong y Ningbo.
Brote en el distrito de Qingshan
WISCO ha mantenido su fábrica en funcionamiento a pesar de que las autoridades locales han promulgado estrictas medidas de cuarentena para contener el virus desde finales de enero.
Como resultado, los empleados se han infectado. El medio de comunicación chino Caixin obtuvo una copia de un documento interno de Baowu, en el que la empresa afirmaba que había 119 casos conocidos entre todo el personal y dos muertes en su sede en Wuhan, según un informe del 22 de febrero.
La propia WISCO tenía 69 casos confirmados del virus, según el documento.
Un empleado de WISCO, que se hace llamar Han Jiang, dijo a la edición en chino de Epoch Times el 28 de febrero que el brote era una prueba de que el Partido Comunista Chino colocaba el PIB (Producto Interno Bruto) del país en primer lugar en vez de proteger la vida de las personas del virus.
Zhuo Hui (un seudónimo) es originario del distrito de Qingshan dentro de Wuhan. Actualmente no vive en Qingshan, ya que su trabajo en el sector de la educación lo ha llevado fuera de la ciudad.
Aunque no ha vuelto a su ciudad natal desde hace más de dos años, se ha mantenido en contacto con sus padres y amigos que todavía viven allí, especialmente desde el brote de coronavirus.
«Mis padres todavía viven en el distrito de Qingshan. Me dijeron recientemente por teléfono que el distrito de Qingshan se ha convertido en una zona de desastre muy afectada. El brote se ha extendido en la región», dijo Zhuo a la edición en chino de Epoch Times en una entrevista telefónica el 28 de febrero.
Sus fuentes en Wuhan le dijeron que antes de que las autoridades locales revelaran la gravedad del brote, un hospital afiliado a WISCO ya estaba atendiendo a muchos pacientes. Sospecha que el número de muertos no ha sido reportado por las autoridades locales.
La edición en chino de Epoch Times también habló con Zhang Jie (un seudónimo), un residente de Qingshan, quien dijo que el brote en su distrito se había vuelto severo porque WISCO había estado fabricando sin parar, y los empleados infectados podían contagiar el virus a otros mientras viajaban hacia y desde el trabajo.
Zhuo explicó que las áreas residenciales del distrito han sido selladas y que los residentes están obligados a pedir por encargo los alimentos.
«Hay muchas quejas [sobre las entregas]. Algunos se quejaron de los retrasos, otros de que los productos entregados son muy caros», dijo Zhuo.
Zhuo también cuestionó si el actual requisito de cuarentena de 14 días de las autoridades chinas para cualquiera que haya viajado recientemente a Wuhan es efectivo.
Un estudio dirigido por el renombrado médico chino especialista en problemas respiratorios Zhong Nanshan descubrió que el período de incubación del virus podría ser superior a 14 días y llegar hasta los 24 días en algunos pacientes.
Zhuo añadió: «Las autoridades locales no son completamente transparentes en lo relativo al brote. Este es un problema grave ya que la gente no sabrá cómo protegerse».
Sin precauciones
Los medios de comunicación chinos han informado anteriormente sobre la WISCO y sus empleados, expresando su preocupación por la falta de medidas de seguridad tras el brote.
Unos 6000 trabajadores de WISCO habían «estado trabajando en horarios normales desde que el brote comenzó a finales del año pasado», según Caixin. Pero desde que el brote comenzó, se les pidió a los empleados que se ducharan y se cambiaran de ropa en los vestuarios de la empresa antes de comenzar su jornada laboral.
«Tengo colegas que de repente ya no vienen a trabajar, pero no sé por qué», dijo a Caixin un trabajor anónimo de WISCO. El trabajador dijo que el personal de la empresa no ha sido informado sobre el número de infecciones en la empresa.
El 22 de febrero, el periódico estatal chino Beijing Youth Daily informó que las líneas de producción de WISCO estaban funcionando al 100 por cien.
El creciente brote de coronavirus comenzó en diciembre de 2019 en Wuhan, capital de la provincia de Hubei, en el centro de China. Desde entonces, el virus se ha propagado a más de 60 países y regiones de todo el mundo.
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